Todos jadearon.

Incluso si al dueño de la espada rota se le diera el derecho de solicitar cualquier cosa al Jefe Instructor, trescientos millones de dólares era un precio elevado.

Con el Imperio del Sol Naciente respaldando a Sharon, ¿quién se atrevería a competir contra ella?

Incluso si tenían mucho dinero, temían que la nación se vengara y los lastimara.

A pesar de esto, alguien fue lo suficientemente valiente como para aumentar la oferta de repente.

¡A cuatrocientos cincuenta millones de dólares, nada menos!

El inesperado giro de los acontecimientos dejó a todos desconcertados.

'¡Ese chico que salió de la nada es demasiado audaz, ¿no?!'.

"¡Harvey, bastardo!".

Murphy miró furiosamente a Harvey.

“¡¿Es una broma?! ¡¿Siquiera tienes tanto dinero?!”.

“¡Si no tienes, estás arruinando los intereses del organizador al aumentar la oferta sin razón!”.

"¡Alguien! ¡Echen a este hombre de este lugar!”.

Sharon también miró a Harvey con el rostro contraído por el odio.

"No hagas nada