Yo caminé hacia la cama para tomar una camisa de Adriel y ante su mirada curiosa no tuve más opción que ir a cambiarme a su baño, estando ahí me coloque la prenda de vestir que me quedaba algo entallada y salí para la cocina.— ¿Qué fue lo que olvide? Por suerte Adriel siempre estaba bien surtido en su cocina por lo que encontrar lo que quería no fue problema.— Es esto.— ¿En serio?— Amó la crema con los huevos revueltos, fue un detalle que omití hace tiempo ya que probablemente iba a ser raro decirlo pero hemos pasado por tantas cosas que a estas alturas no me da temor admitir algo tan raro.Yo sonreí y luego ambos fuimos al cuarto para desayunar entonces le di los huevos revueltos con crema encima de un pan tostado embarrado con frijoles molidos.— Pruébalo y vas a ver qué me darás la razón.— ¿Hablas en serio? — Sí y mucho.— Puedo morir si como eso.— No seas exagerado Adriel, vas a ver que te va a fascinar, además mi filosofía es que si vas a morir por algo de comida pues al
Adriel me lanzó a la cama suavemente y en un dos por tres se desnudó, tomó la camisa que llevaba puesta y la abrió de golpe haciendo que los botones salieran disparados.— Luego buscaremos esos botones para pegarlos a la camisa.— No te preocupes que tengo un montón de esas camisas.— Probablemente sea carísima por lo tanto buscaremos los botones.— ¿En serio estamos hablando de mi camisa en estos momentos que me tienes al borde de la locura?— No sé porque no has hecho tu trabajo querido.Adriel separo mis piernas y entró de golpe haciendo que me hiciera para atrás, está vez no era delicado como lo fue ayer en la noche sino todo lo contrario, sus movimientos eran brutales haciendo que me volviera loca.— Más rápido.Él se movió más rápido dentro de mí e hizo que comenzara a gritar de placer, mis piernas abiertas se movían desenfrenadamente y mis manos se aferraban a las sábanas de la cama.— ¡¡¡¡¡Más rápido Adriel!!!! Adriel no sé de dónde saco tantas fuerzas e hizo las embestidas m
— Lo creo completamente, Scarlett es una persona sumamente fastidiosa y que se cree la ambrosía de los dioses.— Bueno, estamos invitados a la fiesta de cumpleaños de Scarlett — dijo Aimee — por lo tanto Lucía, tenemos que ir de compras.— ¿En serio?— Los cumpleaños de Scarlett generalmente son uno de los eventos más esperados del medio por lo tanto las mujeres se vuelven locas comprando ropa, ve con Aimee en lo que yo me preparo para trabajar.— Pero en este lugar todo es carísimo.— No te preocupes por eso y toma la tarjeta.Adriel se fue al cuarto y me extendió una tarjeta negra, sinceramente no quería hacerlo pero Aimee la tomó.— Estas ofertas no se rechazan Lu.— Pero....— Nada de peros, quiero que luzcas despampanante y la tarjeta para eso está.— Adriel....— Te amo pero eres más terca que una mula, ve y compra todo lo necesario para que seas el tema de la fiesta.Adriel se levantó y me dio un beso en la frente, Aimee se notaba feliz por nosotros.— Nunca vi tan feliz a Adri
— Lo dudo mucho, retírese antes de que la saquemos a la fuerza — dijo el otro guardia.Los guaruras me miraron de pies a cabeza, es cierto que no venía vestida como los demás clientes pero eso no les daba el derecho de tratarme así.— Déjenme pasar antes de que me colme la poca paciencia que me queda.Intenté abrirme paso pero ellos me tomaron cada uno de un brazo y me levantaron en el aire para sacarme de la boutique.— ¡AIMEE!— grité mientras mis pies daban patadas en el aire.Di un grito muy fuerte entonces mire que Aimee salió al escucharme, se sorprendió y comenzó a caminar a toda prisa en mi dirección.— ¡¿Qué hacen?! ¡Suéltenla!Ellos al ver a Aimee me soltaron y cuando ella pidió una explicación yo le conté con lujo de detalles lo que había pasado.— Vamos a otro lado.El que suponía que era el gerente salió al escuchar el escándalo y se sorprendió al oír a Aimee decir que nos fuéramos a otro lado.— Señorita Aimee por favor no se marche, ¿Qué fue lo que sucedió?Aimee le cont
— ¿Por qué no diste señales de vida? Solo espero que no hicieras nada en contra de los empleados de la boutique.— No hice nada, estuve demasiado ocupado con algo que surgió.Al escucharlo me sentí aliviada, busco mi contacto y lo encontró entonces me dio un beso apasionado que yo le correspondí. En poco tiempo las cosas se acaloraron y yo me encontraba solamente en sostén pero decidí parar antes que quitará lo que tenía puesto de la cintura para abajo.— ¿Ya no vas a decir nada entonces? — Sabes que no puedo dejar las cosas así, me molesta que te tocaran de la manera que lo hicieron.Escuchar eso me molesto por lo que lo empuje y me coloque mi blusa, fui al cuarto en donde recogí los botones de su camisa y me puse a zurcir.— ¿Es en serio Lucía? — preguntó con una notoria erección — ¿Me piensas dejar así?— Sí, poco me importa lo que quieras — le dije sentada en la cama — ya que mis peticiones para ti no son importantes pues lo mismo sucede con eso — señale su erección — así que ve
— A pesar que yo soy una persona muy importante en su vida y si yo me hago a un lado destrozaría el mundo solo por mí.— Lo comprendo señorita y le doy mi palabra de que esto no se va a volver a repetir, por favor pasen para atenderlas.Yo le sonreí y luego pasamos a la boutique, esta tenía vestidos hermosos que si no los estuviera mirando en este momento juraría que no existen.— Ai mira este vestido.Yo le mostré el vestido y a ella le gusto, se fue a probarlo y mi boca se abrió en cuanto salió. Aimee se veía preciosa y juraría que esta prenda fue diseñada para ella a la medida.— Te miras preciosa, sabía que ese vestido te iba a sentar muy bien.— Me fascina, este es el indicado.— Ese vestido se entrega dentro de un mes — dijo el gerente — la señorita tiene un muy buen ojo, justamente ese era el que le iba a mostrar la otra ocasión.— ¿Dentro de un mes? — dije sorprendida — ¿Cuándo es la fiesta Ai?— Dentro de dos meses, Lu no te preocupes este tipo de eventos suele ser así y tien
— La reacción de dicha persona es justificada ya que aparte de querer dar una lección a un acto tan asqueroso como lo es una violación también se encuentra ligado en una relación con la señorita Lucía.Ella me miró para que confirmara mi relación con Adriel y yo asentí, dije que teníamos un noviazgo y que ese día él se presentó al hospital para darme mi regalo de navidad.— No tengo nada más que decir su señoría.Ella se fue a sentar y luego yo me fui a la par de Adriel, el jurado deliberó y una vez que llegaron a un veredicto le hicieron pasar el papel al juez.— Por favor lean el veredicto — dijo el juez pasando el papel.— En el juicio contra el doctor Castelo por intento de violación a la señorita Lucía, encontramos al acusado culpable y respecto a la demanda contra el señor Adriel Lund queda desestimada debido al vínculo sentimental que tiene con la víctima, se le condena a seis meses de prisión sin derecho a fianza.Al escuchar la condena me indigne, ¿Solo seis meses por haberme
Ella me sonrió sarcásticamente y se intentó acercar a mí pero mi carrito se atravesó y la detuvo de golpe, comenzó a quejarse y en eso vino la persona de la cual ellas hablaban.— Amor se me olvido preguntarte cuánto iba a comprar de carne — llegó Adriel sorprendiendo — ¿Cuánto vamos a llevar para las chicas? Me acerqué a Adriel y luego de pedirle perdón lo besé, sus manos sujetaron mi cintura y me levantó sin ningún problema. Nos separamos ya que el aire nos faltaba y sus ojos brillaron con tanto amor y yo le sonreía.— Te amo — dijo — ¿Qué venía a hacer? — La carne — le dije divertida — compra tres libras ya que los guardaespaldas de Bri están con nosotros.— Oh es cierto, la carne — sus manos sacudieron su cabello — lo olvidé completamente.Adriel se iba a marchar pero miró al club de venenosas y a esa tipa, dado que es un caballero se detuvo para saludar.— Ve a comprar la carne amor, te espero en la caja.Adriel se marchó y yo mire a estas tipas, estaban con la boca tan abierta