—Taddeo Ferrari, ¿Qué le hiciste a mi hermana, que la pusiste histérica? —Expresó Felipe con enojo.—Él no es Taddeo, es Camilo que entró a mi habitación haciéndose pasar por su hermano, pensó que yo no lo iba a reconocer.Camilo se quedó viendo a Felipe, quien se acercó a él muy peligrosamente, ten
Al tercer día de ausencia, había salido a recorrer el centro de Roma, pensando que pudiera localizarlo, y su sorpresa fue mayúscula al ver en un periódico de farándulas y chismes, una fotografía donde se veía claramente el rostro de su hermano tirado en el suelo como un indigente. Decía que había si
El no esperar la reacción de Camilla, haberse alejado y sumido en la borrachera, cayendo en un estado deplorable, era inconcebible, había muchos jóvenes que admiraban al piloto, por su seriedad su forma de ser, él los había defraudado, observó en su celular las fotografías que habían circulado en la
—¡¿Sabías que eras un maldito?! — Espetó enojado sin poder controlar su furia bullendo en su interior y aunque sabía que su hermano quería pedirle perdón, lo sentía, pero él necesitaba darle su merecido para aplacar sus demonios. Se levantó y le metió un puño a su hermano que lo tiró de la silla, Ca
AMOR INESPERADOHISTORIA DE TADDEO FERRARIMientras Taddeo trataba de recuperarse de la sorpresa, la chica con un tono de molestia le dijo—Nos viste y pensaste que me iba a dejar engatusar con tu hermano, que mi piel no iba a reconocerte, ¿Tan poco me conoces? —interrogó en un tono de tristeza.—Cre
— Eso que me cuentas que viviste, debió haber sido muy doloroso para un niño tan pequeño —. Afirmó Camilla. —Lo fue, al principio me dolía, pero luego comprendí que a veces hacemos daño sin querer, todos podemos equivocarnos, lo importante es reconocer que fallaste, pedir perdón, pero arrepentido s
Hicieron la respectiva prueba y el problema estaba solucionado. Al darse cuenta de que la chica había logrado resolver, sus compañeros la aplaudieron provocando sonrojo en Camilla, que no le gustaba ese tipo de reconocimiento, la felicitaron y de premio, la dejaron marcharse a su hotel, aceptó de bu
Taddeo salió de la suite se rascaba la cabeza, se preguntaba ¿Ahora qué hacía?, no tenía preservativos, tenía los nervios de punta y ¿Si no sabía qué hacer? había leído del tema, pero una cosa era la teoría y la otra la práctica, caminaba por el pasillo a la salida y de esta a la puerta, hasta que C