—¿Qué?...¿Qué?...¿Qué?...—grita a la defensiva mientras trata de orientarse.
Suelto una risotada al ver su estado de angustia y ella me fulmina con su mirada, al caer en cuenta que he sido yo la que la he despertado.
—Ah, eres tu —espeta con fastidio mientras se tira en la cama.
—¿Vas a seguir así conmigo? —le cuestiono sentándome de rodillas en su cama y mi mirada es tan insistente que hace que elle también me mire.
—No, aquí la pregunta es si, ¿tu vas a dejar de seguir ocultando cosas? —me quedo en silencio ante sus palabras y ella col
—Tienes que prometer que no dirás nada Brenda —le digo y ella aún no ha salido de su asombro.—Pero. ¿Cómo no me pude dar cuenta antes? —murmura—. Sabia que te había visto en algún lado, pero nunca se me pasó por la cabeza que fueras tu...—Lo sé...lo sé...—le digo tomándola de los hombros—, ahora me tienes que prometer...no, me corrijo los dos me tienen que prometer —miro a Collins que se ha mantenido todo este tiempo en silencio— que no dirán nada.—Ya te dije que no lo haré —pronuncia Collins y Brenda lo mira.—¿Y tú? —le cuestiono—. ¿Puedo contar con tu silencio también?Brenda me mira un poco dudosa, pero al final asiente, confío en ella y admito que ella es lo más cercano que he tenido a una amistad verdadera.—
Ha pasado una semana desde lo sucedido en el apartamento de Collins y durante todo este tiempo he tratando de evitar todo lo posible a Leiner. No ha sido tarea fácil, ya que nos toca cruzarnos en algunas de nuestras clases, cada vez que se me acercaba salgo huyendo del lugar y para no sentarme cerca de él, siempre opto por ubicarme en las sillas de atrás, no veo, ni escucho una mierda, pero me siento más tranquila.Quisiera decir que esto ha sido fácil, pero mentiría. Lo amo...y mucho, pero no puedo estar con alguien que insinúa que soy una zorra y que crea que lo engaño con otro...¡Por Dios...! Mi primera vez fue con él y que haya puesto en duda mis sentimientos es lo que no le perdono.Si...soy una maldita mentirosa de lo peor, pero eso no me hace una zorra, una quita novios o una infil. Lo que siento hacía el si es real, tan real como mi amistad con Brenda y la maldita felicidad que he
—Arthur...—pronuncio bajo al escuchar su voz al otro lado de su línea.—L-J. ¿A sucedido algo? —inquiere preocupado, no acostumbro a llamarlo, así que es normal que piense que algo malo a sucedido.—No...es...solo...que...—arrastro las palabras porque no se ni como empezar.—¿Qué sucede? ¿Qué? ¿Qué? ¿Qué? —insiste.—No sé si te vaya a gustar lo que te voy a decir —respondo mordisqueando mi labio inferior.—Dime que no estás en problemas otra vez —suelta en un suspiro—. Por favor dime que no la has vuelto a cagar de nuevo.—Bueno no...bueno si...pero solo un poco, no es tan grave —suelto.—¿Ahora que carajos hiciste Lluvia? —cuando el pronuncia mi nombre no es nada bueno, eso quiere decir que está enojado...corrección e
—Ya tienes todo listo? —pregunta Brenda metiendo algunas de sus cosas en el bolso que le cuelga en uno de sus hombros.—Si, ya tengo todo listo.—Muéstrame el traje de baño que llevaras.—¿Para que quieres verlo?La verdad no llevo ninguno, no me quiero bañar en la piscina.—Lluvia...—dice en forma de advertencia.—No llevaré ninguno...ok —levanto mis manos en señal de rendición, no está en mis planes meterme a la piscina con gente ebria.—¿Cómo que no? —dice hundiendo sus cejas.Se gira sobre sus talones y comienza a rebuscar en el clóset hasta hallar lo que sea que busca.—Ten —me tira un bikini que para mi gusto es muy revelador.Es de color verde militar, la pieza de arriba es un top que a duras penas me tapara las tetas y el tanga es tan diminut
—Te necesito —susurro a su oído y el sonríe contra mi cuello.El me toma por mis nalgas y me levanta del suelo, instintivamente rodeo su cintura con mis piernas sintiendo su miembro bien erecto contra mi vagina que solo permanece cubierta por el diminuto bikini, suelto un jadeo cuando el la restriega en mi feminidad que palpita ansiosa por la excitación y el ansia de quererlo tener bien adentro.—¿Lo quieres? —pregunta con la voz ronca y esto es una tortura.Estampo mi boca contra la suya de manera agresiva y creo que esa es una respuesta muy clara a su pregunta, Leiner desabrocha su pantalón y lo baja de una vez incluyendo su ropa interior, sin mucho esfuerzo hace a un lado el diminuto bikini que traigo puesto, posiciona la punta de su miembro en mi entrada y sin un ápice de delicadeza se entierra en lo más profundo de mi, gimo de forma sonora y él me acompaña con los s
—¿Tienes todo empacado? —le pregunto a Brenda.—Si...—me responde apurada mientras luce apurada tratando de cerrar su maleta.—¿Y es necesario que lleves todo eso? —inquiero mientras sonrío al ver como lucha en contra de su maleta que no quiere cerrar por el exceso de cosas que lleva.—Ya te dije que si —gruñe brincando sobre su maleta y es imposible no reír por la escena—. Lluvia, deja de reírte y ayúdame a cerrarla —me regaña y eso empeora el asunto, pero aún así la ayudo.Me acerco a mi amiga que esta luchando por retener adentro todo el contenido de su maleta y cierro la cremallera con esfuerzo, me parece exagerado que lleve tantas cosas y más cuando llegará su casa en donde seguro tiene muchas más.—Si...por fin —suspira aliviada.—Seria de muy mala sue
—¿Ya estás lista Lluvia? —inquiere Arthur mientras mira su reloj desesperado.—¿Será que te puedes calmar? —le respondo dándole los últimos retoques a mi maquillaje—. Aún faltan casi dos horas para el evento y tu estás aquí jodiendome la vida —agrego molesta—, ahora sal de mi habitación y déjame en paz.Arthur coloca sus ojos en blanco y sale de mi habitación para dejar que me termine de preparar.Me levanto de la pequeña silla acolchinada para mirarme en el espejo de cuerpo completo que hay al otro extremo de la habitación, aliso un poco el vestido negro corto que llevo puesto y me doy la vuelta para observar como se me ve de la parte de atrás, el escote es bastante bajo y a pesar de ser un vestido muy atrevido su elegancia es innegable, acomodo bien la coleta alta que he decidido llevar como peinado y salgo de mi ha
La gira había comenzado hace una semana y ya quería que terminara, apenas llevábamos dos ciudades y la primera fue Nueva York. Comenzamos con toda la energía, pero al parecer ya a mí se me ha agotado, todos estos meses sin ensayar me estan pasando factura y ahora tengo que esforzarme el doble para recuperar mi ritmo.Para empeorar el asunto el tipo de apellido Baxton, el cual no recuerdo su nombre, ha sido invitado por la disquera con que trabajo a acompañarnos durante todo el tiempo que el quiera, lo único bueno de todo esto es que puedo llevar a mis amigos conmigo, pero a la hora de subirme en el escenario y las entrevistas ellos se deben mantener como espectadores en el público. Prefiero que mantengan un perfil bajo; no quiero que sufran acoso por estar conmigo, ellos tienen sus propios asuntos y si que se la están pasando bien.—L-J —me llama el hombre que en estos días se había cometido en un dolor en el culo...y vaya que uno bien