Daniel

Me sentia miserable, no se supone que las cosas fueran asi, digo si era obvio que le tomara por sorpresa lo que somos y que ella sea mi compañera, pero llegar a estos extremos era lo últim que quería. Me sentia mal por todo, Mariel me odiaba, podía sentirlo, su rechazo me golpeaba el pecho hasta casi asfixiarme, ademas la desilución de evitar el contacto con el niño era mayor de lo que pense, ni si quiera lo conozco y a pesar de ello, Noha y yo teníamos planes para pasar el tiempo con él, acercarnos, pensar en tener de nuevo un pequeño en casa nos habia ilusionado mucho, en verdad todoa esta situación hacia doler el pecho, me dolia el alma.

El resto de la tarde, fue mas tranquila pero igual de inquietante, Mariel en ningún momento salio de su habitación, moria de ganas por acercarme, uan vez que comenzamos a hacercarnos a nuestra pareja el separarnos no es opción, por naturaleza no podemos hacer eso solo espero haga un poco de efecto el té, habia pedido a Lili pusiera un rela