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24. ¿No tienes trabajo que hacer?
Capítulo 24¿No tienes trabajo que hacer?Timothy entró en ese momento a la oficina cuando vio a su jefe riendo estando al teléfono. Se quedó congelado en la entrada, eso en los años que tiene trabajando por él nunca había pasado. Carraspea incómodo para hacerse notar y este no le presta atención, solo deja el celular cuando cuelga y comienza a trabajar en su computadora, medio minuto después resopla molesto porque Tim no dice nada, pero tampoco se va.—¿No tienes trabajo que hacer? —indaga molesto, adoptando su máscara fría de siempre levantando sus acerados ojos grises en su dirección.Timothy tembló, pero respiró aliviado porque su alfa volviera a ser el de siempre.—Solo quería preguntarle qué clase de trabajo quiere para las nuevas chicas del servicio —dice apurado por salir de la oficina de su alfa que hoy anda algo extraño.—Lavar, limpiar ese tipo de cosas, Tim —le dice poniendo los ojos en blanco como si ya él debiera saber eso— pensé que eras más inteligente que eso.—Claro,
25. Un vestido sencillo
Capítulo 25Un vestido sencilloLuego de terminar de asear la casa Clara se fue a duchar y se había arreglado con especial dedicación para esta cena con el alfa Tyler, olvidando momentáneamente el incidente con Bella.Le pudo hacer la cena a la familia Montgomery antes de irse y dejarles todo en el horno.El maquillaje no era su fuerte, pero se pellizcó un poco las mejillas para no estar tan pálida, aplicó un labial rojo que encontró entre las pertenencias de su madre y que ella solo usaba en ocasiones especiales que siempre trataba de momentos con Clara y se sintió lista, no quería exagerar y parecer un payaso.Sale al pasillo que da a la cocina y se consigue con Bella abriendo la nevera.—¿Vas a salir, esclava? —pregunta Bella en cuanto la ve con un vestido blanco sencillo, pero que en ella se veía bien y eso era lo que más le molestaba a Bella— ¿Le has pedido permiso a tus amos?Bella odiaba que esa estúpida tuviera ese cuerpo sin mucho esfuerzo mientras ella se mataba con dietas y
26. Incómoda
Capítulo 26IncómodaClara esperó hasta que fueran las siete en punto y salió por la puerta luego de despedirse del Alfa Charles y no estaban Drew y Zach, ahora estaban otros dos que no se veían muy diferente a los primeros, pero menos amigables.Los nervios la tomaron por sorpresa cuando nota a los dos hombres lobos frente a ella.¿En qué momento se fueron Drew y Zach?¿Tenía que ver extraños constantemente?—¿Dónde están Zach y Drew? —Clara pregunta viendo el bulto bajo sus chaquetas.Las armas la ponían muy nerviosas y no se sentía cómoda alrededor de ellas, en la mañana no se fijó si los chico traían armas, debía preguntarle al alfa Tyler cuando lo viera. Tampoco es que los hombres lobos la necesitaran, pero para los humanos a veces era necesario infundir valor.—Es su descanso, están desde anoche con usted —explica el hombre de cabello castaño— me llamo Nick y él es Peter —señala al rubio.Ambos un armario gigante y mucho más altos que ella, no podía evitar sentirse un poco intimi
27. La tardanza
Capítulo 27La tardanzaBella y Anabella casi se ponen moradas, verdes y azules cuando vieron el regalo y se quejaron con el Alfa Montgomery por regalarle un carro tan costoso a una simple sirvienta, pero este solo se rió y dijo que era su dinero y podía gastarlo como le viniera en gana.—Ya llegamos, señorita —dijo Peter despertándome de mis pensamientos.—Gracias, chicos —les dijo bajándose del auto sin esperarlos que le abran como había hecho el alfa Tyler.Entré con paso inseguro al lugar, el Alfa Montgomery me había enviado la dirección hace unas horas ya que ella se negaba a que la buscaran a la mansión Montgomery y provocar la furia ciega de Anabella y Bella.Clara se puso el mejor vestido que tenía y sus sandalias más altas, pero aun así no se veía muy bien, se sentía fuera de lugar en un sitio tan elegante como ese.Tal vez si se da media vuelta pueda llegar al auto y decirle a Neumann que se sentía algo mal y llegar a su cuarto y meterse debajo de las sábanas.—Bienvenida a E
28. La carta
Capítulo 28La cartaClara veía la carta, pero no sabía que pedir, era bastante difícil para ella con el montón de opciones, sentía que la cabeza le daba vueltas.A Clara se le atascaban tantas preguntas en la mente sobre este acuerdo al que llegaron el alfa Charles y el alfa Tyler.—No sé qué pedir —se mordió el labio viendo las tantas opciones con nombres extravagantes, tratando de despejar su mente y enfocarse en la comida.El alfa la observó arrugar el ceño y morder su labio inferior mientras veía la carta concentración, queriendo morder el mismo su labio, antes de que ella lo pillara observándola como un enfermo bajo su rostro y fijó su mirada en su propio menú.Clara estaba absorta leyendo tratando de descubrir que podía comer que no le dieran ganas de vomitar, últimamente era como sacarse la lotería.—¿Qué te apetece comer? —pregunta Tyler, dejando de lado su menú y concentrándose en ella.—Definitivamente pescado no— hizo una mueca de asco—. Tal vez pollo o carne… —hace una mu
29. ¿Fingir amor?
Cap. 29¿Fingir amor?Su cara se oscureció de rabia, su piel se erizaba. Sentía cada vez más frío, de seguir así podría congelar todo el restaurante.—Igual debes darme un hijo, Clara —fue contundente con sus palabras— y no quieres que inicie una guerra con la manada Lapislázuli... —el alfa dejó en el aire la oración para que ella la terminara.—Nadie creerá que te enamoraste de mí —dijo en un murmullo, sintiéndose atrapada en este destino que no quiso para ella.¿Por qué su vida había cambiado tanto?Una mujer que ni siquiera tiene a su loba, no puede estar pensando en rechazar esta oferta, y pensar que aceptó solo por el alfa Montgomery, ahora la idea no le parecía tan descabellada y quería casarse con ella para ser más práctico.¡Pero, ella no quiere casarse!Cualquiera que lo viera rogarle a una gamma casarse se burlaría de él.—Podemos decir que no fue planeado, no diremos nada del hospital. Podemos decir nuestra propia versión, que te conocí hace unos meses y nos enamoramos —dijo
30. Cuando nazca
Cap. 30Cuando nazcaClara se sentía morir, tener que entregar al hijo de sus entregar casi tan rápido como cuando nazca.—B-bien —balbucea ella. Se sentía usada como un recipiente para llevar al heredero del alfa Neumann.Muchos podrían ver esto como un privilegio, pero no ella.—En cuanto a tu otra pregunta. Siempre y cuando se sepa que no pasó nada que fuera tu culpa con la interrupción del embarazo no te culparé— dijo despacio el alfa sin querer hablar más sobre este tema—es por eso que debes cuidarte más, Clara —le ordena fríamente, pero pareció más una súplica para ella— de hecho, me tomé el atrevimiento de contratar personal para la casa donde trabajas, ya le conté a Charles y está de acuerdo.Habló con Charles cuando iba en el auto de camino a la cena y al anciano le pareció buena idea, pero le dejó claro al alfa Neumann que su nuera y nieta son difíciles de tratar así que Tyler llegó a la conclusión de simplemente subirle el sueldo a las mujeres, nadie iba a negar semejante s
31. Pobre alfa
Cap. 31Pobre alfaClara quería ver si podía ayudar en algo, pero no se le ocurría en el cómo.—Sí, también pensaba enviárselas al señor Charles, no le gustó mucho la incompetencia del hospital como a mí —le cuenta Tyler muy serio— así que quería tener ese detalle con el Alfa Charles, para que vea que no tuve nada que ver con todo —hace una seña con sus manos englobando todo— esto, que está pasando.—Me imagino que sí, estaba furioso con el responsable, cuando le conté —explicó ella— él solo está preocupado por mí y por el bebé.Clara siempre que hablaba de la única persona que la había apoyado a pesar de todo hacía florecer una sonrisa en su rostro y eso no le gustó a Tyler, para él no sonreía así.—Lo sé, te defendió como haría un padre por su hija —Tyler le expresa lo que vio anoche en Charles. También le hizo entender al alfa que se equivocó contigo, que no eres una oportunista, sin embargo, eso no lo diría— de todas formas, el matrimonio no parece tan alocado ahora que lo pienso