Lisandro Miller — averigua si ya le llegó— le ordené a Jesús — sí señor, la señora ya recibió lo que usted le envió también tengo que informarle que llamó a casa para hablar con los mellizos— no esperaba menos de ella. Independientemente de lo que pasara entre ella y yo sabía que mis hijos siempre iban a tener una figura materna en ella y el hecho de que ella me lo confirmara de esta manera me llenaba el corazón. Ahora cómo le daría la cara a mis hijos y les diría que no había cumplido con mi promesa y no había podido regresar a la mujer que ellos tanto amaban a casa. Al menos de algo sí estaba completamente seguro Valentina era mía y solo mía me iba a permitir que absolutamente nadie se acercara a ella. Ahora que los había completamente todo pero no había manera que yo dejara que mis hijos perdieran a su madre y que yo perdiera la mujer que me había hecho sentir lo que nunca nadie antes me hizo sentir ni siquiera cuando estaba con Karen— quiero que me informen cada cosa que ha
Valentina Petrova Caminaba de un lado a otro desesperada y ansiosa, me sentía como un animal enjaulado ansioso por saber alguna respuesta o por comerme a alguien. No sabía que estaba pasando al otro lado del teléfono pero mi mente solo estaba pensando en las peores escenas, quizás lo mejor era ir a casa de Lisandro y yo mismo abrir ese sobre. Entendía lo desesperado que se sentía él y lo ansioso que estaba también entendía su miedo era algo lógico si aquella prueba salía que él no era su padre había una posibilidad legalmente de que Daniel y Karen pudieran llevarse los mellizos y eso definitivamente era el peor escenario que nosotros nos hemos imaginado. Mi corazón latía de forma acelerada, podía sentir mis manos sudar. Y me estresaba que lisandra no hablara de una buena vez. Abrir la boca dispuesta para gritar pero él habló — Oh por Dios!!— aquello me hizo pensar lo peor. No eran sus hijos biológicos! No había duda, Lisandro no era su padre biológico, había una posibilid
Valentina Petrova — no entras en la camioneta Lisandro— le dije mientras terminaba de subir a Paula y le abrochaba su cinturón. Lisandro estaba detrás de mí vestido de traje esperando subir al auto sin embargo yo no me iría con él.Nosotros solamente estábamos siendo cordiales por los niños ¿No?— también quiero estar en el primer día de los niños— me sentí mal por ser tan egoísta— ustedes quieren que papá vaya verdad niño?— pude ver una mirada extraña ante Luca y Lisandro y luego como los mellizos asentían. — Bueno está bien, pero tú manejas— le di las llaves del auto, esta camioneta era casi idéntica la del tenía también pequeñas pantallas en la parte de atrás para que los niños estuviesen entretenidos.Realmente yo no era de que los niños vieran tanta televisión o estuviesen con pantallas sin embargo cuando estábamos en el auto para que no hubiese ningún desastre ningún accidente me gustaba que ambos estuvieron viendo algo o escuchando música. Aunque fuesen muy maduros para su
Lisandro Miller Había pasado casi todo el día entre reunión y reunión, estábamos haciendo un poco más grande la empresa en breve mi padre firmaría la empresa que estaría mi nombre, con aquella noticia había tenido que rechazar aquella oferta de dirigir la empresa de alguien más.— Señor por favor revise la propuesta — finanzas me entregó una carpeta yo sinceramente estaba comenzando a dolerme la cabeza entre tantos documentos que había estado hoy el perderme dos días en la oficina había sido caótico. — en breve te daré una respuesta— salí de la sala de juntas y me dirigí directamente hacia mi oficina. Bufe al ver a emma ahí parada en la puerta pensé que Jesús había solucionado esto y que además le había quedado claro que a mí no iba a poder chantajearme.— Lisandro por favor escúchame— camino hacia mí a medida que yo me acercaba mucho más a la puerta de mi oficina, supongo que quería evitar que me metiera a la oficina y me hablara con ella— sé que la última vez que hablamos no qued
Valentina Petrova Bajé a Paula del auto y dejé la camioneta en el estacionamiento, tome a Luca y a Paula de sus pequeñas manos venían muy emocionados brincaban mientras avanzábamos hacia el ascensor. Apenas este se abrió otra vez al hombre de esta mañana y de noche ¿Qué posibilidades hay que me la encuentre cada vez que me subo al ascensor?— señorita Valentina qué gusto volver a encontrármela casi voy a empezar a sospechar que usted está planificando estos encuentros— dicho eso soltó una carcajada tengo que admitir que no me causó absolutamente nada de gracia de hecho hasta me pareció de mal gusto, aún así le regalé una sonrisa evidentemente falsa. — pasa mi amor —le pedí a Luca que se detuvo y su sonrisa se borró no dejaba de mirar aquel hombre fijamente — ¿Cómo estás señor Alexander? un placer verlo de nuevo— traté de mantener una línea entre nosotros puedo ver como él lo había notado. Quería un momento sola realmente y con sola me refería a ningún hombre y no me parecía adecu
Valentina Petrova Lisandro tenía su mano en mi cintura en una posición bastante posesiva de su parte.— Bueno, espero puedan disfrutar de la fiesta— dijo mientras estrechaba una vez más la mano de Lisandro este se veía tenso. Alexander se retiró para mi buena suerte ya que realmente estaba incómoda cada vez que este hombre se acercaba. No me daba buena vibra.No podía negarte un hombre bastante atractivo y al principio me alagaba el hecho de que pareciera interesado en mí pero ya no era así.— estás bien?— me giré y lo vi tenía la mandíbula apretada y miraba fijamente como Alexander se marchaba lejos de nosotros— Lisandro!— esta vez me miró a mí fijamente aún con esa mirada seria. — por que no me dijiste que alguien en el edificio te estaba pretendiendo?— preguntó evidentemente me acomodé quedando justo frente a él no quería comenzar esto con más mentiras realmente sería completamente honesta con él él aunque en teoría no tenía por qué hacerlo él y yo en ese momento no éramos nada
Valentina Petrova No sé cuánto tiempo teníamos aquí y parecían que eran horas la chica que había llegado después de nosotros ya no lloraba y ya todos estábamos tranquilos. Nos habían tomado unas fotos supongo que estaban buscando quiénes éramos Podía ver las manchas de sangre en mi vestido en mis brazos y sabía que también tenía en mi rostro, me sentía paralizada por completo — Ya me llegaron algunos datos— oye uno decir mientras se acercaba poco a poco nosotros— Ignacio es senador mira tenemos a un senador aquí presente un senador corrupto ¿Cuánto estás dispuesto a darnos senador?— Cómo sabían ellos que él era un senador corrupto?— yo no soy senador soy ex senador y no soy corrupto— dijo el hombre con la voz temblando no podía verlo pero podía escucharlo. — si no lo eres entonces qué hacías en una fiesta de la mafia— ¿Que? ¿Cómo que una fiesta de la mafia? Mire confundida Raquel, pero ella parecía más confundida porque yo estaba confundida— No te hagas el bueno EX senador— Le l
Valentina Petrova En completo silencio deje que ella me ayudara a desmaquillarme y luego maquillarme. — a los hombres aquí les gusta que te maquilles oscuro, creo que es como su fetiche o algo así— me dijo con una pequeña sonrisa, de verdad me sorprendía como era que ya estaba tan normal y me hablaba de este tipo de cosas tan normal es como si me estuviese diciendo qué tipo de café le gusta— además tus hermosos ojos seguramente van a ser algo muy llamativo— todos seguían diciendo lo mismo una y otra vez. Me miré al espejo frente a mí juro por Dios que no me reconoci.Esa persona no era yo. Aquella mujer con el rostro pagado con las mejillas con mucho rubor con los ojos casi negros no era yo. Yo me había quedado con aquel vestido negro y con poco maquillaje saliendo de mi habitación esa realmente era yo saliendo apurada por estar junto a Lisandro. — Y ahora qué?— le pregunté tratando de evitar mi llanto. No quería arruinar el maquillaje que ella me había hecho no quería hacerla