GABRIEL Ya había pasado más de un mes, mi pequeño hijo seguia siendo un torbellino, nos traia de cabeza, pero estabamos muy contentos de tenerlo en nuestras vidas, mi madre nos visitaba todos los dias para ayudar a Sam.Aún no habiamos tenido sexo y eso en verdad me estaba volviendo loco, había contado los dias que faltaban, pero por alguna razón no lo habiamos hecho, asi que tuve una idea, estaba en la oficina y llamé a Sam.- ¿Podrias venir a las 3? necesito hablar contigo, es el único momento que tengo.- Supongo que sí, mamá vino y se quedará con Diego, creo que más tarde vendrá Marie. Sonrei, esperaba que saliera todo bien, queria seducir a mi esposa en la oficina.Lorelei estaba de permiso, asi que habia otra mujer como su reemplazo.- Sabrina, va a llegar mi esposa, no quiero que me molesten mientras ella esté aquí , tenemos un asunto importante.- Claro señor.Ya tenia todo preparado, mi escritorio despejado y entonces llegó. - ¿Que asunto tenemos que hablar, Gabriel?Cerré
Marie y mamá habian escuchado parte de la discusión, se acercó a mí, yo estaba tan furiosa. - Samantha, ¿qué paso?.- Estabamos en el restaurante y yo me encontré a un amigo, hablamos y luego el se puso furioso, me acusó de coquetear con él. ¡Yo no hice eso! y como siempre, en su estúpida arrogancia, cree que debo hacer las cosas como el dice, sin objetar. Perdóname Marie pero tu hijo es un idiota. - ¿Quieres venir conmigo a mi casa? te hará bien.- ¿No escuchaste?, no puedo salir si no es con él, y créeme, sus guardaespaldas son muy leales.-Toma las cosas de mi nieto y ven conmigo, le daremos una lección a ese cabeza dura.*Ella amenazó a Enzo con despedirlo si no nos llevaba a todas a su casa, entonces, mamá, Marie y yo, junto con mi hijo, nos fuimos, obviamente Gabriel lo sabría en el instante en que pusiera un pie fuera de casa.Llegamos a casa de Marie, siempre era impresionante de ver, parecía una galeria de arte y me encantaba.- Ven Sam, te mostraré fotografías vergonzosas
SAMANTHA Despues de insistir por un unos meses, por fin habia cedido a la propuesta de Gabriel de mudarme a un sitio más grande y céntrico para mi tienda, y estaba convenientemente cerca de las oficinas centrales de la empresa, él me acompañó a supervisar la mudanza.Gabriel tenía a Diego en sus brazos, ya tenia 4 meses, eran tan parecidos, él le hablaba y el bebé reia, era muy lindo verlo en su papel de padre.- ¿Vas a cambiar de nombre? el otro no es muy atractivo.- Ya pensé en uno, 'Sam, diseños de alta costura'simple, y mis clientas me seguirán.- Si, puede funcionar, un letrero grande, dorado, con estilo.Lo miré interrogante.-Recuerda que soy tu socio, y puedo opinar además solo es una sugerencia. - vio su reloj- tengo que irme, más tarde pasaré por ti - empezaba a caminar acompañado de su sombra.- Disculpe señor Ferrer, ¿a dónde cree que lleva a mi hijo?.Sonrió ampliamente, se acercó y me lo dió. - Solo quería mostrale su reino, creo que será en otra ocasión - me besó y
GABRIEL Las palabras de Sam calaron en mi mente, porque era exactamente lo que me habia dicho mi madre, y dijo que la perdería si seguía con el mismo comportamiento. Para mí, era muy dificil cambiar, habia sido así desde siempre, porque siempre obtenia lo que quería, y nadie me decía que hacer, pero ahora, tenia una esposa y un hijo, y la responsabilidad de la empresa en mis manos.No sabía como resultaría esto, pero tenia que hacerlo, porque amaba a mi familia, y nada era más importante que ellos.Samantha salió de la ducha, aún se veía molesta, y no me miró, me acerqué a ella y la abracé. - Sam, lo siento, tienes razón, debo confiar más en tí, no me culpes por ser así, toda mi vida he desconfiado de todos, porque las personas siempre han querido algo de mi, pero trataré de ser mejor, por tí. -Yo solo quiero que me ames, Gabriel, sin condiciones, porque así es como te amo yo.*Unos días después, Samantha por fin abrió su tienda, estaba en un excelente lugar, y muy cerca de mí, h
GABRIEL Estaba muy emocionado, habia planeando cuidadosamente la luna de miel que le debía a Sam, queria sorprenderla, habia guardado el secreto tanto como habia podido, solo lo sabía mi abogado y mi madre, porque él se quedaría a cargo de la empresa y ella cuidaría a mi hijo, solo seria una semana, porque sabía que Sam no podria estar mucho tiempo lejos de él. - Madre, ya esta todo listo, saldremos mañana, solo que no sé que haré con su maleta.- Toma lo que le gusta y lo que sepas que va a necesitar, además no es como si no pudieras comprarle algo más. Me reí-tienes razón, lo tomaré en cuenta, gracias te veré mañana.AL DIA SIGUIENTE Llamé a Samantha, le habia dicho que tenia un asunto y queria que me acompañara, saldriamos de ahi hacia el aeropuerto, no queria tomar el jet privado, iríamos en un vuelo comercial, también irian Adrian y Enzo.- ¿A dónde vamos Gabriel? no me dijiste que teníamos que tomar un avión, ¿que pasará con mi hijo?- No te preocupes princesa, está todo arr
SAMANTHA - Sam una mujer dijo ser asistente del profesor, te dejó este mensaje.- dijo Julia, dándome un trozo de papel doblado. - Gracias- lo leí, decia que queria verme a las 3, tenía una propuesta para mi.- Que extraño- le dije- él siempre me envía algún texto o me llama, ¿sabes dónde está Enzo?- vi mi reloj, ya casi era la hora. - Dijo que no tardaría, solo tomaría un momento. Esperé unos minutos y apareció. - Voy a la galería del profesor.- Si señora, la acompaño.Caminanos hacia allá , seguía pensando en lo extraño del mensaje, entramos y estaba todo en silencio.- Haré una revisión, quedese aquí.- me dijo preocupado.Ya se habia tardado, así que decidí ir a buscarlo, entré a la oficina del profesor, no encontré a nadie.-¿Enzo?- Camina, querida, vas a beber lo que está en el vaso o lo lamentarás.- no lo podia creer, ¡era Susana!- ¿Estás demente?¿Que le hiciste a Enzo?-presiono un arma contra mi.- Tu guardaespaldas no puede ayudarte ahora, ¡haz lo que te digo! - gritó.
Estaba fuera de mí, aún no podia creerlo, daba vueltas por la sala, intentando calmarme mientras ella guardaba sus cosas, la habia obligado a hacer sus maletas, no queria verla, me habia dolido tanto lo que habia hecho.Llamé a Antonio.-Necesito que . . . arregles todo, Sam, Samantha va a irse y quiero que revises las cláusulas del acuerdo.-¿Estás seguro de esto Gabriel? ¿Acaso quieres. . . divorciarte?.No habia querido decirlo en voz alta, siempre tuve temor a esas palabras, pensaba que el día que me casara, estaria con la mujer que amaba por siempre, asi como mi padre y mi madre.-Solo quiero que lo revises, en este momento no puedo pensar con claridad.Terminé la llamada, Samantha salió de la habitación solo con una maleta, un bolso y su libreta de bosquejos.- ¿Eso es todo? ¿son todas tus cosas?- pregunté molesto.- Es lo que traje cuando llegué aquí, todo lo demás no me pertenece . . . solo quiero a mi hijo Gabriel. -¡Pues no lo tendrás, asi que no insistas!- ¡No puedes quit
SAMANTHA Me quedé dormida por una horas, estaba cansada, habia llorado tanto, porque en un día perdi a mi esposo y perdí a mi hijo, y lo peor es que no habia hecho nada.Llamé a Marie, esperaba que aún me contestara el teléfono. -Marie, ¿como esta mi hijo?- pregunté angustiada. - Está bien Samantha, no te preocupes.- Quisiera verlo, ¿puedo verlo?- Creo que deben arreglar el problema en el qué están, de verdad que yo quiero creer que tú eres inocente, no puedo creer que sea de otra forma, porque sé cuánto amas a Gabriel.- Pero el no me escucha, y me echó de casa.- El está tan dolido que no sabe como llevarlo, deben resolverlo y pronto, por el bien de ustedes y de tu hijo.*¿Como demostrar que no soy culpable? solo me quedaba buscar al que hizo esto, ¿pero cómo?No me quedaba más remedio que buscar a Gabriel y hacer que me escuche.*Al otro dia fui a su oficina, aún tenia el acceso al elevador, Lorelei como siempre estaba en su puesto.-¿Esta ocupado?- ella me miró.- Solo esta