Klaus Santana
Tome mi carro y comencé a conducir, mientras mi personal averigua a donde estaba Peter, contacte a Alex, él había viajado para verme, pero en este momento se me hacía más útil en la estación de policía, allí uno de mis hombres lo llevaría hasta donde estaba mi padre, solo le había dicho que necesitaba que sacará a Amanda la sucia celda en donde la habían puesto según lo que Omar había dicho.
Tome rumbo hacia el aeropuerto, era la opción más viable para encontrar a mi querido hermanito, él se había metido en un gran problema, yo sabía lo que había sucedido, estuve allí, incluso habría sido capaz de guiarla para qué le disparará donde se lo merecía, pero sabía que ella no sería capaz de hacer, por lo que no le di muchas vueltas.
Pero, lo que él hab&ia
Amanda KingEn qué momento de mi vida, en que minutos, segundo, hora o día de mi vida, llegue a esta instancia, detenida, en una celda sucia, sin abogado que contactar, solté un suspiro cuando el guardia vine a la celda y dijo que me llevaría con mi abogado, en la sala de interrogatorios un hombre alto, moreno, elegantemente vestido me esperaba, se presentó ante mí como abogado de la familia Daniels, yo solo pude asentir.La verdad era que me sentía terriblemente incómoda, estaba mal vestida, tenía hambre y frío, ese cúmulo de sensaciones me tenían con una ansiedad que jamás olvidaré, fuera de que era mi primera vez en una estación de policía.Solté un suspiro, inevitable.– Me dicen que estás aquí por amenazas – dijo el abogado, casi riendo – yo que tú apretaba el gatillo y nos íbamos a juici
Klaus SantanaUna semana había pasado, desde que habíamos vuelto a nuestra vida normal, mi padre había decidió vender lo que tenía en aquel pueblito, e instalarse en NY, en resumidas cuentas, su vida estaba aquí, sus propiedades y empresas estaban aquí, y como buen hijo que soy le ofrecí mi casa para que se quedara y trabajara mientras acomoda sus oficinas en un edificio.De Peter habíamos sabido poco, solo que cuando fue a casa a rogar perdón, se había encontrado con sus cosas afuera, luego de eso vino a gritarle a nuestro padre, pero lamentablemente este último no lo atendió, tampoco le dio importancia, y luego de eso desapareció de la faz de la tierra.De las chicas habíamos sabido poco, sé que mi padre se mantiene en contacto con ellas, le envían fotografías y todo eso, en más de una ocasión me había mostrado como
Amanda King– Todo va a estar bien – sentencié, cuando vi a mi madre tan preocupada – seguridad lo sacara – Richard había averiguado en donde estábamos y nuestra luna de miel se había fastidiado – y nos iremos a casa.– Nos iremos directo a NY, allá estará nuestra casa de ahora en adelante – dijo ella recuperándose.Es fuerte, no puedo decir nada en contra de eso, pero me preocupa. Sé que mi madre al decir que lo quería, que se le había calado en el corazón, era sincera, y sentirse tan vilmente utilizada, no era la mejor sensación que la vida nos podía dar. Me dediqué a abrazarla, mientras esperábamos que Alhelí llegara, ella se había hecho cargo de la situación.Escuché como mi móvil sonaba en la habitación, pero no alcance a llegar a él, de hecho, ni siquiera h
Klaus SantanaPresente a mis amigos, cuando las primas King, también cuando Liam y Amelia se hicieron presentes, una vez todos presentados nos pusimos a hablar de lo que estaba sucediendo, Richard Benson las había venido a buscar, reclamando la venta de los terrenos, pero cómo podía ser tan desvergonzado.Después de escuchar sobre la escena que armo aquel estúpido hombre, herví en rabia, pero me quedé sereno, debíamos disimular y como mi padre había dicho durante el vuelo, había que llegar a un trato con aquel hombre, aún no aparecía la reina de su colmena, por lo que aún no podíamos culparlo de muchas cosas, la idea era meter a Benson, Peter y Regina en la misma cesta.Liam se dio cuenta y salió del lugar, disculpándose, por mensajes le pedí que viera la seguridad del hotel, o buscara uno donde nos permitieran implementar más segu
Amanda KingGiro en medio de mi cama, he de admitir que este hotel es mucho mejor que él anterior, suelto un suspiro, pensé que el paseo de la tarde me tendría al borde del sueño, por lo menos me haría sentir cansada, tomo mi móvil y veo las fotografías que postee en Instagram, todo está muy hermoso, me encanta. Pero luego vuelvo a pensar en todo lo que ha sucedido.Múltiples preguntas se hacen presente, sé muy bien que no ame a Peter, a pesar de tenerle un enorme cariño, no lo ame, pero ¿Por qué me iba a casar con él? Me cuestiono a mí misma, pero saber que lo que realmente sentía no era amor, me quita un enorme peso de encima.Entonces ¿Qué es lo que me sucede ahora? ¿Por qué me es tan fácil hablar con Klaus? Esa necesidad de aclararle todo lo que ha sucedido, incluso el impulso de decirle que realmente jamás
Klaus SantanaVeía las mancuernillas en mi camisa y no podía evitar sonreír, habían pasado algunos días desde que regresamos de Brasil, no había visto ni sabido nada de Amanda, pero aún podía recordar la última noche en Río, fue algo nuevo conversar con una mujer que no hablar de compras, centros comerciales o cuánto dinero había gastado en algún viaje.En cambio, ella, solo me habló de lo bien que lo había pasado, preguntó por mis gustos, y no supuso nada, a pesar de que es evidente mi buena situación financiera, pero aún está en mi cabeza lo que Benson dijo, ¿será que puedo confiar en ella? Suelto el aire y veo la hora de reojo en mi móvil, esta noche debo asistir a una cena en la nueva casa de mi padre.Salgo de inmediato de la oficina, Amelia me pide que la excuse con mi padre, ella no podría asistir
Amanda KingSubí hasta nuestro apartamento, hacía frío, estaba mojada y quería entrar antes de que Alhelí llegara, me había pasado la tarde comiendo, sentada en el carro de Klaus, viendo como mi prima paseaba con su padre, y ya ni siquiera se escondían, me reí sola mientras me desvestía en mi habitación y entraba en la regadera, pero, entonces, recordé su explicación, estas pobres palabras que pasaron como un susurro por mis oídos.– Es una modelo – había dicho Klaus – tuvimos algo que ver, hace algunos años, pero ella se volvió algo intensa, al punto de decir frente a la prensa y jurar a mis espaldas que teníamos una relación muy seria – eso me provocó un recelo, dejando que un escalofrío recorriera mi espalda.Sacudí mi cabeza y la traje al presente, salí del ba&ntild
Klaus Santana– ¡Deja de moverte! – Alex llamó mi atención, estábamos esperando a que el desfile comenzará y mis ojos estaban más en la entrada que en la pasarela – si no dejas de moverte, me cambio de asiento – mire la hora y aún faltaba media hora para que todo comenzara - ¡Llámala! – escupió Alex y respire profundo.– No quiero presionar – pasé mi mano por mi cabello y gruñí, qué más podía hacer.Había saludado a tantas personas durante el día, había revisado una y otra vez el evento, había recorrido las instalaciones, todo estaba listo y aun así no logré tranquilizarme, luego de aquel día, cuando salimos juntos, no nos habíamos visto, habíamos hablado, pero solo una vez, solté un suspiro ¡porque no soy capaz de llamarla! Me reclam&eac