—Estoy muy aburridaaaaaa.Kathy golpeó a Easen por tercera vez con el cojín del sofá. El día de ayer llegó muy tarde y tan exhausto que prácticamente se durmió con su ropa traje Gucci, por lo que Kathy tuvo que desvestirlo y arroparlo. ¿Qué era? ¿Su madre?Kathy se hacía la ofendida, pero en realidad disfrutó demasiado de arroparlo y mirar su rostro sereno. Probablemente era la primera vez que lo veía con el rostro tan en paz, tiene pestañas largas y claras, nariz respingada y elevada, arco de cupido marcado con unos labios gruesos. El inferior más grande que el superior.Lo observó durante tanto tiempo que sus propios ojos se cerraron sin que se diera cuenta y amaneció en la misma cama que su marido.Se rió mucho de la cara desconcertada de Easen esta mañana pero luego ya no le pareció gracioso en cuanto a Easen se le metió a la cabeza de que ella estaba en su misma cama porque trató de despertarlo al sentirse mal y él ni siquiera la sintió acostarse a su lado.¿Quién diría que su es
—"En próximas noticias: otro cuerpo fue encontrado cerca del área Metropolitana. Las autoridades encontraron similitudes a previos asesinatos y seguirán investigando profundamente..." —Que horror —Vick lamió la cuchara fría por el helado —. Vamos Ann, no te sientes un poco asustada cuando vez algo así en la televisión? Ann asintió, totalmente de acuerdo mientras trataba de robarle una probadita del helado de su mejor amiga. —Lo sé ¿Cómo puede ir alguien por ahí matando gente así? —miró a Kathy —. ¿No estás de acuerdo? Silencio. —¿Kathy?—fue Vick quien llamo esta vez. —Si...estoy de acuerdo.El rostro de la mujer está demacrado, ojeras grandes, piel quebrada y un aura muy pesada. —¿Ha pasado algo recientemente? No te ves bien—Ann, habló. Sí, ya les había contado a sus amigas lo de su casamiento, lo de mudarse a vivir con su marido, pero entre entregar bocetos a Ara, perder el tiempo dibujándolo, y algunos cuadros que le encomiendan, no le dió tiempo de avisar a sus amigas de su
—Hermano querido, ¿cómo estás? Ha pasado un tiempo…Almer oprime con fuerza su cerebro tratando de buscar palabras que aminoren o calmen a cierta bestia rubia parada en la puerta.—Kathy ¿Cómo te sientes?Almer abrió y cerró la boca. ¿Lo ignoró? ¿Lo ignoró para concentrarse en esa mujer?—No te preocupes, hoy estuve muy bien, te tengo que mostrar el avance del mural luego…—Vale, vale, sólo acuérdate de buscarme en mi oficina ¿Si? Porque hoy tengo bastante trabajo.—Vale, ¿Qué quieres de cenar?—Lo que quieras comer, para mí está bien.—Voy a cocinar para cuatro personas, voy a tardar un poco más.—No hace falta, los niños ya se van…—¿Cuál niño?—Argo dejó en su lugar la pelota colgante de la cabeza de la escultura —. ¡Soy todo un adulto!—Kathy, ¿Puedes…?Easen, si no terminaba su trabajo en la oficina, lo hacía en el despacho de su casa, así llegaba más temprano y le daba tiempo de cenar con su esposa. Estaba ya bastante estresado y en vez de encontrar a su pequeña esposa feliz, de
"Seamos amables" es el único pensamiento del CEO. No será tan malo ¿Verdad?Kathy salió de la cocina con unos platos en las manos, justo cuando la puerta se abría.—¿Qué? ¡Abriste la puerta, Kathy!Una peculiaridad de su mansión es que se puede abrir la puerta desde dentro de la casa sin tener que hacerlo por la misma puerta.—Claro, es tu madre ¿Verdad?¿Por qué sus hermanos no le avisaron de la llegada de ella? ¿O quizás ellos mismos la llamaron? ¡No! Sus hermanos podían ser todo menos traidores.—¡Regresa a tu habitación! —sujetó su muñeca para evitar que avance un paso más —. ¡Ahora!—Pero quiero saludar a…—¡Easen!La madre apareció con el rostro contraído del descontento.—Genial, Easen. Estás haciendo todo un espectáculo por un simple capricho tuyo.El rubio cubrió a su esposa con su cuerpo, sutilmente.—¡Solo te pedí una cosa! ¡Casarte, tener hijos y que vivas como quieras! ¿Tanto quieres llevarme la contraria?—¡Estoy cumpliendo con lo que querías, madre!—abrió los brazos—. ¡
En la noche fría, el humo del cigarrillo se podía ver claramente: El detective Ross estaba ansioso.…Flashback…Los asesinatos habían comenzado hace tres meses.«Quien sea que haya sido, seguro que tiene muchas agallas para dejar un cuerpo así en medio de la capital»El detective privado aparte de trabajar por su cuenta también tiene un departamento oficial en la policía nacional por lo que ya estaba familiarizado con el caso del asesino serial.Se asumió que era acto de una persona enferma mentalmente y que la evidencia de ADN rápidamente mostraría al sospechoso.Como sea, el asesino no existía, no había ni una pizca de evidencia o posibles motivos o alguna cosa en común que conectara a las víctimas o que indiscriminara los asesinatos que ocurrían en la semana.La única evidencia en las víctimas era la forma del símbolo en sus cuerpos. La prensa se movió rápidamente, ellos castigaron a los investigadores por solamente incluir personas cercanas a las víctimas en sus listas de sospec
El detective Ross miró a través de los binoculares a la pareja hablando en la sala de su casa. Había decidido hacer guardia fuera de su casa hace unas noches atrás, y había visto como iban y venían ambas personas en horarios diferentes.—Oye, novato.El novato que estaba bostezando en el asiento del conductor, fijó la atención en su superior sentado en el asiento del copiloto.—¿Si, señor?—Tal vez haya una probabilidad de que existan—sonrió en cuanto vio la cara confundida de su compañero de investigación.—¿A qué se refiere, señor?El novato, incómodo, quiso salir del auto en cuanto vió la cara distorsionada del detective Ross.—Las personas que fingen ser normales pero son enfermas mentales.(...)—"¡Es un demonio! ¡Un demonio! ¡Un demonio ha aparecido en el pueblo!—los gritos de la turba enfurecida hacían temblar los oídos del CEO—. ¡Ustedes deben arrepentirse y creer en Dios!Una mujer sujetó el micrófono para hablar.—¡La suma de muertes ha llegado a quince personas! ¿Cómo es
Las gotas de sangre caían una a una, a un compás que le parecía fantástico y grandioso.—Ayuda…ayuda por favor —la voz es casi un susurro—. Ayúdenme…Los susurros también le parecían algo relajantes, siempre y cuando no hiciera más ruido.El peliblanco lo ignoró olímpicamente mientras fumaba y jugaba en su celular, Mandy Crush. No le agrada en sí el videojuego, sin embargo, algo tenía que hacer para pasar el tiempo.—Ayúdenme…ayúdenme.Casi, un dulce más y lograría su récord personal en toda la vida. Sólo un dulce más y lo lograría…—Por favor, por favor, ayuda.Tosió con fuerza una y otra vez. Justo en ese momento a su cuerpo le agarró un ataque de tos potente y sin tregua.De la irritación, perdiendo la concentración, el peliblanco deslizó su dedo incorrectamente, perdiendo la oportunidad de ser ganadora.—Ah, maldito hijo de perra…Tomó la gruesa barra de metal que descansaba por la pared y fue a paso rápido junto a la persona colgando del techo. Amarrada con una cadena de metal an
Inicio de flashback—¡Pequeño pedazo de…mierda!Ramiro vagaba entre la consciencia e inconsciencia. Escuchaba los gritos de su padre fuera del armario, sin embargo su cuerpo está tan débil que no puede mover músculo alguno.—¡Voy a matarte hijo de perra!Sus sentidos lo iban abandonando.—¡Estás tan muerto, pequeña mierda!Esa fue la última cosa que el chico oyó.Si él presionaba su oreja contra el suelo, podía oír los lejanos sonidos de insectos arrastrándose alrededor, o el termostato de la casa escaleras abajo, chirriando.El sonido se expandía poco a poco a través del suelo…y entonces…—Hey niño—un señor de aspecto cuidado apareció, abriendo el armario—. Despierta, muchacho. La luz entró…Fin del flashback"—Wow ¿En serio? ¡Mierda! Hahahaha"La televisión bajó de volumen en cuanto Ross salió del baño, ingresando a la habitación.—¿Te afeitaste?—Sí…—Me gustaba como te veías con un poco de barba—subió la mano para acariciar su cara ahora suave.—Nah, ya se estaba convirtiendo en