Cuando le lanzan el primer puñetazo en la barriga, Melina ni siquiera finge que no le duele. Gritando a todo pulmón cuando sus nudillos con anillos de hierro golpean su estómago, Melina se encorva hacia adelante, forzando su estómago hacia adentro mientras sus costillas arden; su rostro se vuelve hacia atrás cuando James le golpea la barbilla.
—James, por favor, te lo ruego...—Las palabras de Melina se ahogan en su garganta cuando James le da un puñetazo en la cara. Un dolor punzante atraviesa la nariz de Melina mientras se parte en dos. Melina prueba el metal en su boca mientras la sangre brota de su nariz.
—Me pregunto si todavía te amar&aa
THOMASThomas se encuentra con Richard a medio camino de su oficina. Pudieron recuperar a Richard hace unos días después de tenderle una emboscada al automóvil que lo transportaba a una casa segura.—Señor, necesito que venga conmigo. Hay algo importante que necesita ver.—¿Qué tan importante?—Thomas pregunta mientras gira la perilla de la puerta de su oficina.—Se trata de Melina.La mano de Thomas se vuelve blanca mientras aprieta con más fuerza e
Melina se despierta una vez más por el sonido de los gritos. Se pregunta de dónde viene y por qué alguien está gritando tan fuerte. Melina mira su cuerpo y ve que la cama en la que está acostada está manchada con su sangre. Sus ojos se llenan de lágrimas al recordar a su bebé. James debe haberla traído aquí y la vistió. Melina levanta su vestido para revelar vendajes que cubren sus costillas. “No, ¿por qué se trataron mis heridas? No quiero vivir; Quiero morir para que este dolor y sufrimiento pueda terminar.”Melina hace una pausa en sus acciones mientras mueve su mano para arrancarse los vendajes. Sus ojos se abren cuando se da cuenta de lo que estaba causando los gritos que había escuchado. Melina corre hacia Franky mientras la arrojan a la habitación en el piso cerca de la puerta, a pesa
—No habrá preguntas—. El hombre se acerca a Melina y la agarra del brazo. Sus uñas se clavan en su piel mientras la arrastra fuera de la habitación y por el pasillo.Continúan por el pasillo y suben las escaleras hacia una hermosa casa. Las paredes son blancas con impresionantes diseños dorados. El piso de mármol blanco está diseñado con una hermosa flor en el centro del vestíbulo sobre un hermoso candelabro. Tenía que ser el sótano del que acababan de salir. Pasan por delante de una escalera de doble sentido con un hermoso pasamanos negro y manija dorada. Se detienen frente a una puerta mientras caminan hacia la izquierda. James está de pie justo en frente de él.
MELINAMelina mira por la pequeña ventana de la habitación donde estaban ella y Franky. No pueden escapar porque las ventanas tienen rejas. Melina ha pasado las últimas dos semanas tratando de averiguar cómo sacarlos de aquí. Franky se encuentra actualmente en coma y los médicos no están seguros de cuándo se despertará. Melina pasa la mayor parte de sus días contándole a Franky sobre la increíble vida que tendrán una vez que descubra la manera de sacarlos.Melina no ha visto a Rafael ni a James en las últimas dos semanas. Ella está contenta con esto. Ambos la asustan, y verlos solo podría significar que algo terrible le sucedería. Las ganas de morir de Melina se han desvanecido. Melina consideró abandonar a Franky, pero des
Melina no puede creer que esté aquí. Ella nunca esperó que él apareciera. ¿Por qué vino? Melina se pellizca para asegurarse de que no está soñando. No se sorprendería si estuviera alucinando en este momento. Melina ha oído que ves a la persona que más amas en el mundo antes de morir.—Soy real, principessa—dice, colocando su mano sobre la de ella. Melina siente el calor de su mano penetrar en la de ella, y rápidamente aparta su mano de la de él, como si el calor la hubiera quemado.“Thomas está aquí, Dios mío, Thomas está aquí. Debe estar furioso conmigo por huir”. Melina mira a su alrededor con mie
—Por favor, di algo—dice Thomas.—¿Estás enfermo?—Melina le pone la mano en la frente para comprobar su temperatura.—No estoy enfermo, mi amore—dice mientras quita suavemente su mano de su frente.—Definitivamente estás enferma. Acabas de referirte a mí como si fuese tu amor.— —Adelante—le dice Melina a la persona que llama a la puerta. No se molestó en preguntar quién era porque esperaba a Kat. Esta noche es la gala. Melina casi ha terminado de prepararse. Lleva un vestido transparente de tul bordado con un hombro asimétrico. Aplicó un maquillaje suave y Serena la ayudó a peinarse.—Dame un minuto, ya casi termino—dice Melina, poniéndose los zapatos. No quería ponérselos hasta que fuera hora de irse.—Sicuro—. “Claro”. Una voz masculina dice desde fuera del vestidor. Las cejas de Melina se fruncen cuando se da cuenta de que no es Kat a quien ha dejado entrar en su habitación. Ella sale para averiguar quién es.Su aliento queda atrapado en su garganta cuando ve a Thomas. Él está de pie en medio de su habitación, luciendo elegante como siempre. Está vestido con un esmoquin azul oscuro. Su esmoquin está perfectamente confeccionado y le queda perfecto. Su cabello está gelificado hacia atrás, lo que le da un aspecto más serio, pero aún se ve tan guapo como siemCAPÍTULO CUARENTA Y SIETE
Melina agradece a Thomas por acompañarla a su habitación antes de entrar. Ella anticipa que él caminará hacia su habitación, pero en cambio, él la sigue adentro. Thomas toma su mano entre las suyas y los lleva a la cama. Hace que Melina se siente y se inclina frente a ella. Él toma su pie derecho en su mano.—¿Qué estás haciendo?—Melina pregunta, desconcertada mientras lo mira sosteniendo su pie en su mano.—¿Cómo te sientes?—pregunta, quitándole el talón.—Estoy bien. No tienes que hacer eso—. Melina intenta sacar su pie derecho de su agarre, pero él la sujeta con fuerza. Probablemente se esté preguntando si ella se siente mejor después de su pequeña crisis de esta noche. Él masajea su pie suavemente y luego lo suelta después de besar su tobillo.—Eso es bueno escuchar—. Thomas dice mientras levanta su pie izquierdo y le quita el talón. Masajea ambos pies mientras descansan en el suelo.Melina lo mira, preguntándose si es el mismo Thomas de hace unos meses. No puede creer que el mism