— ¿Qué mi hijo te odie? — Preguntó el Rey Lance burlista, levantándose de la silla trás el escritorio en el salón de estudios de la Reina. Virginia Wiztan se le quedó viendo expectante y asintió lentamente. — Es solo un niño, no creo que suceda. — Continúo hablando el Rey. — Es muy ingenuo y aunque le digan algo y se resienta contigo, por causa del marqués Forsten; él después de hablar contigo verá que no tiene por qué temer de alguien como tú. Virginia no entendió si Lance la estaba animando o la estaba insultando o ambas cosas. Ella se quedó confundida. — ¿Eso significa que no me vas a dejar ver al príncipe hasta que tú quieras? — No hasta que yo quiera, por mí, no lo verías nunca más; si no después de ese evento. Aunque depende todo de que tan viva termines~ — Sonrió él con malicia, ahora quedando de pie frente a Virginia a menos de un metro de distancia. Ella sintió un e
•••••••••• 5: 00 pm. Castillo principal de Maita, oficina del Rey Lance Lamparth. — ¿Me llamaba, su majestad? — Preguntó uno de los consejeros más confiables del Rey, Charlie Evans, noble de cabello rizado castaño y ojos azules claros. — Sí, estaba pensando en cortarte las cabeza. — Sonrió Lance al verle, estando ese Rey sentado tras su escritorio. Charlie sonrió animado, entendiendo la broma fría de ese gobernante y a su vez, viejo amigo. — ¿Ahora que hice para merecer tal castigo, mi Rey? — Eres mi comandante de seguridad y ni siquiera te diste cuenta que Allen Jones hace y deshace con ella a como le plazca. — Informó Lance ahora sí, con un aspecto más serio. Charlie exhaló y se acercó hasta el escritorio del Rey. — ¿Allen Jones rompió mi seguridad? Pero… ¿Cómo es posible? Me encargo personalmente del castillo del Rey y del príncipe heredero y— — ¡La Reina! — Exclamó Lance, levantándose de su cómoda silla. — Allen buscó hacerme daño por medio de una de las personas menos e
— Nada en especial. — Respondió Lance fríamente. — En otra ocasión lo veré. Después de decir aquellas palabras el Rey continúo su rutina diaria y al llegar la noche comenzó a prepararse para ir al castillo de la Reina. — Su majestad, el carruaje está listo. — Informó uno de los servidores. — En unos minutos bajo, salgan todos. — Pidió Lance y sus sirvientes obedecieron de inmediato. El Rey buscó las llaves del nuevo salón de artes que fue preparado. "Puedo tener algo de información extra, ella parecía estar escondiendo más de lo que me dice" Tras ese pensamiento, Lance sonrió y se llevó consigo la llave. ••••••••••Dulce semana. Noche 3: El Rey de Maita ingresó a la habitación de la Reina, él la vió a ella como era de costumbre en la sala de esa recámara. Las puertas se cerraron después de que la Reina Maitana saludara y nuevamente, ellos quedaron completamente solos. Virginia Wiztan, se encontraba sentada en el sofá largo, sintiéndose un poco incómoda. "Esta noche elegí u
La Reina de Maita, veía a su esposo con incredulidad. "¿No quiere que muera?" "Pero si mi vida nunca ha sido de su importancia" "En nuestro primer encuentro lo primero que hizo fue apuntarme con su espada" "Me dejó a mi suerte de lo que pudiera sucederme en Maita cuando me trajo cautiva" "Me dice que soy una herramienta… ¿Ahora le importa mi vida?"Virginia se puso de pie alejándose de ese Rey, ella frunció el ceño. — ¿Por qué no quieres que muera? — Preguntó la mujer Gorianita viendo fijamente a ese Rey, quien ahora, se había sentado en el sofá, donde ella anteriormente estaba. — ¿Para que dure más como una herramienta? ¿Por qué así te es más útil? ¿Por qué sería un desperdicio de tus energías preparándome para ser tu pieza en ese torcido juego de venganza que tienes con el señor Jones? ¡Ah, ya sé! Es por qué— ¡Ah! En ese momento Lance tomó de la muñeca a Virginia, acercándola a él y viéndola fijamente a los ojos. — Hoy me dí cuenta de algo extraño… — Susurró el Rey. Virgini
***************••••••••••***************>>> Virginia Wiztan: El sol de esa mañana filtrándose levemente por las cortinas, iluminaba la espaciosa habitación del castillo Maitano en la que dormía.Esa mañana fue un poco inusual a otras. Pensé que no podría dormir bien anoche, lo extraño, fue que poco después me quedé dormida sin siquiera darme cuenta de nada más. ¿Hace cuanto no había descansado tan satisfactoriamente? No podía recordar la última vez que me sentí tan tranquila y alegre. Tal vez pasó más de un año ya… Desde que sentía que todo en mi vida iba por buen rumbo. Mis ojos se posaron en ese hombre dormido a mi costado izquierdo. Yo me senté sobre la cama y me quedé observando a ese Rey, lo normal que parecía, pero lo significativo que era para una nación entera. No sabía que hora era exactamente, pero el sol no parecía ser el del amanecer, supuse que pronto serían las 9am. Hora en la que finaliza una noche más en la dulce semana. Sentía mi corazón latir de emoción.
…..1: 00 pm.En el salón del consejo Real en Maita. — ¡No puede su majestad! — Exclamó uno de los hombres. — Usted había dicho desde un principio que era solo una unión política para que Gorian bajara la guardia. — Es cierto, voto a favor de que no lo haga. — Habló otro. — Tampoco me parece correcto que nuestro Rey Maitano reconozca a una Gorianita como una propia Maitana de los Lamparth; al pueblo no le gustaría eso, odiamos a Gorian desde la muerte de la Reina Cassandra, ¿No ha escuchado mi Rey, todo lo que dicen en las calles sobre Gorian, eso en todo el Reino? ¡Lo aborrecen! Lance quien estaba sentado en su elegante silla y los veía a todos con aburrimiento, habló: — Nunca dije "¿Quieren que lo haga? Habrá una votación" Solo dije: "¿Qué opinan de eso?" Ya escuché sus opiniones, aún así, mi decisión es definitiva. Se comenzaron a ver expresiones de desacuerdo y desagrado entre los miembros presentes del consejo Maitano, algunos murmuraban entre sí negando con su cabeza. ¡PAM!
…..Una vez que el Barón Jones llevó al interior de una de las grandes tiendas de campamento al hombre misterioso que por sus rasgos físicos era obviamente un Maitano: — Así que eres un mensajero, ¿Esta es la bolsa que traías contigo? — Preguntó el Barón Jones, posando sus ojos marrones en ese hombre con aspecto desaliñado y de pueblerino. — Sí… — Respondió el hombre nervioso siendo retenido por dos de los soldados más confiables de Allen Jones. — Mmm, un par de prendas, agua, algunas frutas, pan y semillas… Oh, aquí… Un pergamino, ¿Es esto lo que querías entregarme? — Sí señor… — Decía él viendo asustado a ese hombre que sabía era de los más importantes bajo el mando del Rey Lance Lamparth. Allen comenzó a leer el pergamino. Una dirección y una fecha era todo lo que tenía en el, pero no cualquiera. Una en un pueblito cercano a la frontera con el Reino de Gorian. — ¿Quién te dio esto? — Preguntó Allen viendo con frialdad a ese pueblerino Maitano. — Llegó a mi casa por un mist
***************••••••••••*************** >>> Lance Lamparth: No esperaba mucho de ella, para ser completamente franco, no esperaba absolutamente nada. Virginia Wiztan. Es una mujer Gorianita de apariencia corriente entre las características físicas de su gente. Cuando supe de ella por primera vez, fue gracias a la descripción de Allen. >> La hija favorita y primogénita del Rey Jhonn tercero Wiztan <