Paola está mirando fijamente al reloj que está frente a su salón y esperando atentamente la hora de receso, finalmente toca la campana y de inmediato o guarda sus libros y toma su mochila para salir. —Por fin...—exclama mientras sale rápidamente el patio, sale y busca a Drake, lo ve al fondo sentado en unas bancas y saludándola a los lejos, sonríe y camina hacia el.
—Hola Drake...–le da un beso en la mejilla.—Hola, princesa—sonríe y cierra su libro.Paola se extraña y Drake aclara que fue un apodo de cariño.—Me enteré de lo que te sucedió con ese tal Dan... no te preocupes, no te molestara más...—comenta mientras mira como unos jóvenes de primer grado juegan fútbol.—¿A que te refieres?...—El está en la cárcel, y por lo que se, tiene algunos enemigos dentro, así que no durará mucho ahí dentro—contesta mientras toma un poco de jugo.—Vaya... realmente me hizo sentir miedo e impotencia, fue una experiencia horrible, Dra—Solo saldré con Oliver, calma... quédate aquí con la luz apagada para que piensen que estoy durmiendo—Paola le responde emocionada por salir de casa a media noche.—Es aquí afuera, pero mi papá no me dejará salir así que me saldré por la ventana para que no escuchen que la puerta se abrió...—agrega mientras se coloca su suéter y una chamarra.—Bien, rapunzel; baja—extiende una soga. —Lo bueno es que la altura no es mucha y además si caes, el césped amortigua tu caída... en dado caso que caigas—ríe. Paola le lanza una mirada despectiva y después ríe. —Nos vemos...—comenta Paola mientras baja y rápidamente toca el suelo.—Adiós... intentaré cubrirte...—se despide con su mano.Con unos conversse blancos, un jean color negro, blusa y chamarra camina por el césped y llega hasta la calle, donde Oliver la espera en su auto.Con una sonrisa abre la puerta y ella sube rápidamente. —Buenas noches, nena, sube...—Holiwi
—¡¿Paola?!...—su madre se asombra al ver a su hija levantándose del suelo y a su lado estando Oliver.Al mismo tiempo la puerta principal se abre y sale su padre, manifestando molestia, de inmediato Paola se pone de pie. —Espera... déjame hablar...—con su mano le pide que se detenga.—Paola... nosotros dormimos tranquilos sabiendo que estás a salvo, que estás en casa, libre de cualquier peligro. Y ahora resulta que te escapas durante las noches, con tu... ¿novio?...—voltea a ver a Oliver. —Buenos días...—exclama Oliver en un tono incómodo. —Si, soy el novio de Paola, pero es la primera vez que salimos señor, a estas horas. Lo siento, nos ganó la emoción y pues quisimos escaparnos, pero la protegí bien...—sonríe mientras Paola está a su lado.—Eso es bueno para ti...Oliver le mira extraño. —¿Por qué?...—Porqué estarías muerto si no...—sonríe levemente mientras que al mismo tiempo llega Mariana con una bata puesta.—¿Qu
—Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti.. feliz cumpleaños querida Paola... feliz cumpleaños a ti...—cantan todos al unísono mientras Paola se encuentra sentada en el centro de la mesa mirando su pastel con velas encendidas, y también mirando a quienes cantan.En el comedor se encuentran Vania, Evelyn, Justin, Daniel, Mariana, Diana, Arianna, Oliver y entre otros amigos y conocidos. Todos están cantando al unísono mientras Paola se encuentra sentada en el centro de la mesa, hay platos, vasos, refresco, adornos en toda la casa, algunas sillas extras para los invitados que se encuentran ahí. Una decoración color rosa turquesa cubre la casa, letras, letreros, fotos con decoraciones y demás.Mientras cantan Paola ve a todos agradecimiento y con sumo cariño. De entre todos ve a Oliver sonriendo mientras le canta. Finalmente terminan de ganar, entre los aplausos se prepara para soplar las vela y pedir su deseo, duda por unos segundos mientras observa a s
Oliver finalmente llega a la dirección que le ordenó su novia, un poco nervioso apaga el auto y gira con Paola. Ella sonríe y baja del auto, puede ver el auto de su madre estacionado.—Bájate... le diré a mi mamá que no pude entrar y que saldremos, hay que rezar porque no me quiera matar...—comenta mientras cierra la puerta.Paola y Evelyn caminan hacia la casa, Pao es la primera en acercarse a la casa pero escucha a sus padres dentro de casa, se puede escuchar una discusión, se queda estática antes de abrir la puerta.Evelyn se queda en silencio mientras le observa a ella escuchar la discusión.—¿Otra vez quieres hablar del pasado?... típico de ti, tenemos problemas de dinero y sacas el pasado a flote...—grita Mariana mientras avienta algo contra la pared.—Tu me obligaste al mencionar a Gloria, nunca tuve nada con ella—ríe. —Caso contrario contigo... y no te escudes que teníamos problemas de dinero, Paola jamás lo supo, ¿quieres que se lo cuente? Que le cuente lo que realmente es su
Paola va camino al salón donde será la graduación, mirando por el vidrio dela auto y con un audífono en un oído izquierdo, observa la cuidad, medita sobre su vida actual y lo mucho que ha ocurrido en 3 meses, el tiempo transcurrió rápido para ella y recordar a Ericka, sus padres y su familia le hacen ver todo lo que ha pasado, lo lejano de sus recuerdos y como se desvanecen sus recuerdos.Evelyn toca el hombro de Paola y la hace bajar de la luna y regresar a la realidad. —¿Qué me decías?...—pregunta Paola entre la confusión y quitándose su audífono de su oreja.—Que subí las fotos a Instagram y Liz reaccionó con un corazón, la hice que nos respetara y hasta la bendición nos da, ahorita que la veamos allá se inclinará ante nosotras—ríe a carcajadas mientras le muestra su teléfono. —¿Si la recuerdas?—Como olvidarla... casi la dejabas sin cabello, tal vez por eso ahora nos tiene respeto...—responde Paola riendo mientras recuerda ese momento.
—Creo que el ocultarme los problemas fue peor para mí. Vámonos—le comenta a sus padres, mientras suben al auto.—Bien... ¿Cuál es ese tan esperado tema que me han ocultado por mucho tiempo?...—pregunta mientras se coloca el cinturón de seguridad.—Te dijimos que después de comer. No queremos amargar tu día... esto es especial, cielo—responde Mariana mientras gira en su asiento y voltea con su hija.—No pueden amárgalo más, mami—sonríe de oreja a oreja. —Ya, díganme que temas querías hablar conmigo...—agrega mientras la observa fijamente.—Lo siento, bebé. Mientras tú estuviste en coma pasaron algunas cosas, algunas que jamás debieron pasar, nena. Fueron 8 meses muy largos y como toda madre entré en una profunda desesperación...—es interrumpida por su hija.—Ve al grano...—baila los ojos y le mira con una cara de molestia.—Es necesario explicarte todo el contexto, por favor Paola, permite explicarte...—contesta su madre.
—Creo que era algo que ya se venía venir, Pao. Las discusiones, nuestros descubrimientos y su comportamiento tan extraño, sabíamos que algo pasaba y tú también lo sabías—la abraza después de ver que sus ojos comienzan a cristalizarse.—Lo sé, pero aún así duele, demasiado. Más el creer porqué fue mi culpa, ya me lo dijo Oliver, que me deje de ideas raras y me centre en el presente y futuro, pero ponte en mi lugar—emite una pequeña risa.—No pienses eso, Paola. No hiciste nada malo, no es como que tú accidente fuera culpa tuya, son cosas qué pasan y tal vez este era el destino... así debían ser las cosas. A mi también me hubiera gustado que nada te hubiera pasado, imagínate las cosas que habríamos hecho, todas las estupideces que tendríamos de recuerdo... sin embargo pasó porque fue un accidente y ya, todo eso nos ha llevado hasta aquí, no hay más que decir...—agrega Evelyn mientras ambas están sentadas en una banca fuera de la casa.Paola suspira. —Lo se,
Paola se acerca a la puerta y toca varias veces, después de unos segundos alguien se asoma la rendija de las cortinas y después abre la puerta. Paola un poco sorprendida da unos pasos para atrás.—Por fin llegaste, pasa—exclama Ángel mientras abre la puerta con prisa y hace un ademán para que ella pase.—Buenos días—sonríe mientras camina hacia dentro de la casa. Inmediatamente entra, se percata del desorden qué hay en la sala y estudio. —Parece que ha estado ocupado, doc. Y creo que es por mi, ¿cierto?—inquiere Paola mientras sostiene su mochila y está de pie en el pasillo. —De hecho...—responde mientras pasa frente a ella. —Ven...Paola le sigue y entra al estudio donde tiene dos laptops, algunas pizarras con cálculos plazamados en ellas. —He estado analizando tu situación, es súper complejo que me voló la cabeza una vez que le preste atención a los detalles, no fui yo solo, algunos colegas de otras universidades y diferente