Paola va camino al salón donde será la graduación, mirando por el vidrio dela auto y con un audífono en un oído izquierdo, observa la cuidad, medita sobre su vida actual y lo mucho que ha ocurrido en 3 meses, el tiempo transcurrió rápido para ella y recordar a Ericka, sus padres y su familia le hacen ver todo lo que ha pasado, lo lejano de sus recuerdos y como se desvanecen sus recuerdos.
Evelyn toca el hombro de Paola y la hace bajar de la luna y regresar a la realidad.—¿Qué me decías?...—pregunta Paola entre la confusión y quitándose su audífono de su oreja.—Que subí las fotos a Instagram y Liz reaccionó con un corazón, la hice que nos respetara y hasta la bendición nos da, ahorita que la veamos allá se inclinará ante nosotras—ríe a carcajadas mientras le muestra su teléfono. —¿Si la recuerdas?—Como olvidarla... casi la dejabas sin cabello, tal vez por eso ahora nos tiene respeto...—responde Paola riendo mientras recuerda ese momento.—Creo que el ocultarme los problemas fue peor para mí. Vámonos—le comenta a sus padres, mientras suben al auto.—Bien... ¿Cuál es ese tan esperado tema que me han ocultado por mucho tiempo?...—pregunta mientras se coloca el cinturón de seguridad.—Te dijimos que después de comer. No queremos amargar tu día... esto es especial, cielo—responde Mariana mientras gira en su asiento y voltea con su hija.—No pueden amárgalo más, mami—sonríe de oreja a oreja. —Ya, díganme que temas querías hablar conmigo...—agrega mientras la observa fijamente.—Lo siento, bebé. Mientras tú estuviste en coma pasaron algunas cosas, algunas que jamás debieron pasar, nena. Fueron 8 meses muy largos y como toda madre entré en una profunda desesperación...—es interrumpida por su hija.—Ve al grano...—baila los ojos y le mira con una cara de molestia.—Es necesario explicarte todo el contexto, por favor Paola, permite explicarte...—contesta su madre.
—Creo que era algo que ya se venía venir, Pao. Las discusiones, nuestros descubrimientos y su comportamiento tan extraño, sabíamos que algo pasaba y tú también lo sabías—la abraza después de ver que sus ojos comienzan a cristalizarse.—Lo sé, pero aún así duele, demasiado. Más el creer porqué fue mi culpa, ya me lo dijo Oliver, que me deje de ideas raras y me centre en el presente y futuro, pero ponte en mi lugar—emite una pequeña risa.—No pienses eso, Paola. No hiciste nada malo, no es como que tú accidente fuera culpa tuya, son cosas qué pasan y tal vez este era el destino... así debían ser las cosas. A mi también me hubiera gustado que nada te hubiera pasado, imagínate las cosas que habríamos hecho, todas las estupideces que tendríamos de recuerdo... sin embargo pasó porque fue un accidente y ya, todo eso nos ha llevado hasta aquí, no hay más que decir...—agrega Evelyn mientras ambas están sentadas en una banca fuera de la casa.Paola suspira. —Lo se,
Paola se acerca a la puerta y toca varias veces, después de unos segundos alguien se asoma la rendija de las cortinas y después abre la puerta. Paola un poco sorprendida da unos pasos para atrás.—Por fin llegaste, pasa—exclama Ángel mientras abre la puerta con prisa y hace un ademán para que ella pase.—Buenos días—sonríe mientras camina hacia dentro de la casa. Inmediatamente entra, se percata del desorden qué hay en la sala y estudio. —Parece que ha estado ocupado, doc. Y creo que es por mi, ¿cierto?—inquiere Paola mientras sostiene su mochila y está de pie en el pasillo. —De hecho...—responde mientras pasa frente a ella. —Ven...Paola le sigue y entra al estudio donde tiene dos laptops, algunas pizarras con cálculos plazamados en ellas. —He estado analizando tu situación, es súper complejo que me voló la cabeza una vez que le preste atención a los detalles, no fui yo solo, algunos colegas de otras universidades y diferente
Un día nuevo es un día de nuevas oportunidades, de darle una sonrisa a la vida. Paola se coloca de pie y sale de su cama, con la actitud positiva que hacía falta en su vida, y que sin duda caracterizaba a su persona. Una chica linda y alegre.Coloca música de Ariana Grande mientras abre su ropero y observa y prueba que ropa se pondrá el día de hoy, visitará a su madre y en la noche saldrá con Evelyn. —Hmm—se lleva un dedo a su mejilla mientras medita si ponerse un jean o un vestido.Se coloca su vestido por encima mientras s eve al espejo, sonríe al ver que le queda bien. —Vestido será...Toma su vestido color rojo, una chaqueta color blanco y sus tenis color blanco. Se dirige al baño para darse una ducha y finalmente ponerse su ropa.Al salir de la ducha y terminar de cambiarse, se sienta en su silla y frente a su espejo en su mueble donde suele maquillarse. Corrige algunas de las pocas imperfecciones que tiene y comienza
—Llegaste—Evelyn se coloca de pie y saluda a su mejor amiga con un beso en la mejilla.—¿Leíste mi mensaje?—pregunta Paola.—Sí. Leí que estabas en casa de tu mamá, pero creí que ella estaba en casa de tu tía, por eso llamo mi atención...—contesta Evelyn mientras ambas caminan por la plaza.—Deja te cuento. Como ya te habías enterado por mi y por la discusión de aquella noche, mi madre tenía un romance, se supone que tenía y creí que perdió contacto con él, pues no fue así. Esta viviendo con su nuevo novio, fue algo extraño de presenciar, me sentí incómoda... pero sin embargo es mi mamá y la apoyo, pero no pude soportar estar mucho tiempo en esa casa, y el novio no creas que es alguien muy mayor, es un tipo que de viejo no tiene nada. Tiene 32 años, pero realmente el gimnasio le ha ayudado a comerse los años...—Wow... pues tú madre le gusta el colágeno, de eso no hay duda...Paola le lanza una mirada seria, sin que le haya hecho gracia s
Daniel: Tu madre fue... encontrada sin vida...Se queda en silencio por unos segundos, se sienta sobre la cama. Esta ida por la noticia. Al mismo tiempo, Oliver sabe lo que sucede y le abraza mientras está de espalda, ella niega con la cabeza mientras sus ojos se cristalizan.Paola: Papá... no, no puede ser, yo la mire ayer... es que no...Daniel: Cielo, lo sé. Pero ya lo confirmaron, ven a casa. ¿Dónde estas? Yo voy por ti, solo dime dónde estás...Paola: No, no. Oliver me llevará a casa, no te preocupes voy para allá.Cuelga la llamada y de inmediato ve los mensajes y llamadas perdidas de Evelyn. Oliver le abraza mientras ella está de espalda y cuelga la llamada. Le aprieta fuertemente cuando le escucha llorar. —Leí los mensajes de Evelyn, lo siento mucho—le susurra al oído mientras ella llora y está tomando su brazo.Se termina de colocar su ropa y salen rápidamente del inmueble, Paola se coloca unos lentes y sube el
Tocan a la puerta de una casa múltiples veces. Una señora de mediana edad abre. —Hola, buenas tardes—saluda.—Hola, Soy Jess—responde.—Hola Jess. Me enteré de lo de tu hermana, lo siento mucho—hace una mueca de tristeza. —¿En qué puedo ayudarte?—Gracias, Barbara. Quería para saber si me permites ver las cámaras de tu propiedad, en especial la que está en dirección a la casa de mi hermana—responde ella.Barbara asiente y le permite pasar a su casa. —Los oficiales no han venido a revisar las cámaras, pero tú eras la hermana de mi amiga, por eso te ayudaré. Ven—caminan por las escaleras hasta el estudio donde tienen una PC y las cámaras enlazadas a la misma.—Las grabaciones están aquí. ¿Qué día y hora quieres verificar?—Las grabaciones de hace dos días, desde las 6 PM hasta las 6 PM de ayer, las cámaras solo captan parte del jardín de la casa pero será más que suficiente para ver quienes salieron y entraron—contesta Jess mientra
Evelyn esta estática frente al hombre que le apunta con el arma, con la llegada de patrullas de la policía el hombre baja el arma y se va corriendo por el patio trasero, Evelyn rápidamente intenta seguir a sus amigas, con el corazón acelerado y su mente en blanco, camina hasta donde están ellos.—¿Estás bien?—pregunta Arianna mientras se acerca a ella y revisa sus heridas.—No es nada...—se sienta sobre el pasto, se encuentran detrás de una casa cercana a la de Liz.—Estas como en trance, ¿segura?—inquiere Diana mientras le toma de la mandíbula y le mira a los ojos.—Luis está muerto, y un hombre me apunto con un arma... estuve a punto de morir—contesta mientras intenta ya salir de su shock.—Tenemos que irnos, los hombres ya se fueron y los oficiales llegaron—agrega Arianna.—Liz también está muerta—comenta Ángela mientras se recarga sobre una pared y con una mueca de tristeza.Arianna le abraza. —Lo siento.—N