En medio de la noche.

Jane caminaba sola por su área residencial. Ella subió al segundo piso y notó que las luces del pasillo no estaban funcionando.

Ella miró a su alrededor y pensó que solo las luces de ese piso no funcionaban, así que se dirigió con cuidado hacia arriba. Cuando llegó al tercer piso, las luces de allí tampoco funcionaban.

Ella sacó su teléfono y usó la luz de su teléfono para iluminar su camino. Ella regresó lentamente a casa.

Finalmente, llegó a la entrada de su unidad. Jane tembló. “Sr. Callen, ¿por qué está aquí?”

“Te he estado esperando mucho tiempo.”

“…” Ella le preguntó por qué estaba aquí y no cuánto tiempo había estado aquí.

“¿Qué sucede?” Jane tomó la llave en su mano, pero no abrió la puerta enfrente de Callen. Ella aún se sentía a la defensiva. Callen entendió por qué se estaba comportando así. Hubo un destello de emoción en los ojos de él.

La sensación de dominar a una presa defensiva era asombrosa.

“Tengo hambre.”

“¿Ah?”

“Dije,” Callen se frot