Cuando volvieron del supermercado, Jane estaba con cara de póquer todo el camino.

Su coche se detuvo en el estacionamiento subterráneo. El hombre llevó de buena gana las necesidades diarias cuando se bajaron del coche.

Originalmente se suponía que era un simple viaje para comprar algunas necesidades, pero después de haberlo llevado allí, ella...

Jane miró el montón de artículos con cara de póquer.

Ella realmente sintió que haber asentido con la cabeza para aceptar llevarlo al supermercado era el mayor error que pudo cometer.

El hombre, con las dos manos llenas de comida, se paró frente a ella, sonriendo y diciéndole con los ojos que estaba de buen humor.

Sin embargo, ella estaba de mal humor. ¡De muy mal humor!

Entraron en el ascensor uno tras otro. El hombre se inclinó tímidamente hacia ella. Ella dio un pequeño paso hacia atrás, asqueada. Una persona normal habría dado un paso atrás más consciente. A nadie le gustaba que le dieran la espalda.

Sin embargo, Sean no tenía esta