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Capítulo 250 Me estás rogando o …
Bip. Cuando el frío y profundo tono sonó en la fría oficina, el sonido no solo rompió la silenciosa atmósfera de la oficina, sino que también rompió la extraña atmósfera de allí.El hombre delgado miró la pantalla del teléfono en el escritorio. "¿Le importa?".Levantó la mirada y miró al maravilloso hombre al otro lado del escritorio que estaba sentado en la silla.Aunque era una pregunta, era obvio que no le importaba si a la persona frente a él le importaba o no.Antes de que la persona pudiera decir algo, los largos y delgados dedos del hombre ya habían cogido el teléfono en el escritorio.Después de que Ray presionara el botón de marcar, la pantalla mostró que la llamada se había realizado. Pasó silenciosamente el teléfono que estaba en espera a la frágil mano que lo estaba alcanzando.La mano de Jane estaba temblando. No dijo nada. Sus ojos estaban rojos por tratar de contener sus emociones.Dentro de la oficina del Director General de Industrias Stewart, el hombre detrás
Capítulo 251 Ella sabe mejor que nadie
La mano que sostenía el teléfono temblaba como una hoja caída en otoño. Ray nunca había visto una mujer como ella antes. Ella necesitaba contarle a todo el mundo su tristeza. Ella podía sentarse allí y uno podía sentir su tristeza.La Sra. Dunn sintió que su pecho se volvía más apretado. Ella no conocía este tipo de emoción. Nunca se había sentido así antes. Lo que le preocupaba en ese momento era..."Jane, ¿cómo te fue? El Sr. Stewart..."."El Sr. Stewart dijo que dejará libre al Grupo Dunn". La mujer en la silla de ratán cerró los ojos e hizo que la Señora Dunn dejara de preguntar. Había alegría en la cara de la Sra. Dunn. "Jane, sé que eres...". ‘La del corazón más suave’."Sin embargo, yo seré la persona a cargo de la Casa Dunn". La voz de la mujer no era ni ligera, ni rotunda. "¿Qué?". Era como si un trueno hubiera caído sobre ella. La penetrante voz de la Sra. Dunn rompió el silencio de la orilla del río en Erhai. Señalaba con el dedo, incrédula, a la mujer que tenía los
Capítulo 252 Un vistazo hacia Haydn Soros
Haydn estaba en Yunnan. Vio a esa mujer.Quiso acercarse a ella... pero sintió que sus pies estaban hechos de plomo.Esa nocheA veces el viento era muy fuerte en Erhai por la noche.Siempre había un auto estacionado junto a la carretera frente a la Casa de Huéspedes Memory.A veces era un taxi, a veces era un auto privado. Las matrículas eran siempre diferentes, pero la persona que estaba dentro era siempre la misma: Haydn Soros.No se atrevía a acercarse más a esa casa de huéspedes. Después de todo, ella estaba dentro.El viento de esta noche era muy fuerte.El conductor del Didi se sentía bastante impaciente. "Señor, ya está en su destino". Este era un cliente extraño. Era la tercera vez que el conductor aceptaba el pedido de este hombre para llevarlo.Cada vez, el destino era el mismo.Cada vez, no decía una sola palabra en el camino.Cada vez, cuando llegaban a su destino, miraba con anhelo en cierta dirección."Señor, si quiere quedarse aquí, puede ir al mostrador
Capítulo 253 El Grupo Dunn cambia de manos
¡El Grupo Dunn se estaba hundiendo!Esas eran las noticias que circulaban salvajemente por Ciudad S últimamente."Ese Sean Stewart". Cuando las élites ricas bebían demasiado en sus lujosas fiestas privadas, eso se convertía en su tema de conversación."Tsk, tsk, es tan despiadado, abandonando el pasado de esa manera. Sin importar lo que haya ocurrido, Joseph Dunn fue una vez su suegro".Zach sonrió sin decir una palabra fumando su cigarrillo en la reunión. Los hilos de humo convirtieron todo en un blanco nebuloso.No tenía paciencia para estos banquetes, pero para cualquiera en este círculo, tenía que lidiar con estas reuniones sociales sin importar cuanto te disgustara.En cuanto a los otros presidentes y directores generales sentados alrededor de la mesa, no eran tan diferentes de las viejas damas del mercado una vez que estaban borrachos. "Sr. Lucas, qué tal, ¡veo que ha fumado medio paquete de cigarrillos! El ambiente se está poniendo bueno. ¿Por qué no se une a la conversa
Capítulo 254 Ella nunca sería una tonta de nuevo
Al día siguiente, ¡los principales periódicos todos tenían sorprendentes titulares!‘¡Golpe en el Grupo Dunn! ¡La misteriosa heredera regresa vengativa!’.‘¡Regreso de bajo perfil de la 'Heredera'! ¿Está aquí para salvar al Grupo Dunn de la crisis, o busca algo más?’.‘¡Impactante! El liderazgo del Grupo Dunn cambia de la noche a la mañana, el funcionamiento interno está desordenado. Ningún otro Dunn puede hacer el trabajo, ¡tiempos desesperados!’.¡Una fortuna de miles de millones cae! ¡La Srta. Dunn abandona a su familia y lanza una adquisición despiadada!’.Estos aterradores y llamativos titulares salpicaron los principales periódicos prácticamente de la noche a la mañana.Alguien, con un motivo oculto, incluso, había filtrado a la prensa que el heredero de los Dunn, Jason Dunn, estaba en su lecho de muerte. Revelaron que tenía leucemia, y que la Srta. Dunn, la única compatible, ¡se había negado a donar su médula a su hermano mayor!En un instante, la mala publicidad sobre Ja
Capítulo 255 Los Dunn en caos
Residencia DunnJoseph Dunn apuntó con el dedo a la nariz de la Sra. Dunn, furioso: "¡Esa es la hija que criaste! ¡Qué maravillosa hija filial!".Estaba furioso. No quería renunciar al Grupo Dunn, pero si no aceptaba la petición de Jane, el Grupo Dunn se desmoronaría.Sabía muy bien que mientras el Grupo Dunn siguiera en pie, seguiría siendo un hombre rico con una casa, autos y sirvientes. Sin el Grupo Dunn, no era nada.No importaba lo reacio que estaba, Joseph Dunn solo tenía que apretar los dientes y darle la mayoría de las acciones del Grupo Dunn a Jane.Sin embargo, no tenía donde desahogar la ira de su corazón.Así fue como la Sra. Dunn terminó convirtiéndose en su saco de boxeo.Sin embargo, había una cosa que había olvidado. Para la Sra. Dunn, él ya se había convertido en una basura inútil que había traicionado a su esposa cuando la engañó."Joseph Dunn, ¿qué derecho tienes de acusarme así?”."¿Fui yo quien enseñó y crió a Jane Dunn?”."¡No, fue tu padre!”. "Si tien
Capítulo 256 El colapso de Jane y la locura de Sean
Todo el cuerpo de Jane estaba rígido. El calor de ese hombre la alcanzó claramente a través de dos capas de tela.Ella no se atrevió a moverse. Estaba asustada.Al menos, aquí y ahora, no podía aceptar algo así.Decían que el tiempo curaba todas las heridas, pero a menudo, todo lo que hacía era destilar algunas cosas en un dolor tallado en los huesos.La superficie del hombro de ella estaba aterradoramente ardiente. No era solo su mano, sino su pecho y todas las demás partes de su cuerpo. Todo estaba espantosamente caliente.La mujer apretó los dientes con fuerza. ¿Se estaba conteniendo o era otra cosa? Había furia en sus ojos y mantenía los dientes apretados.Al mismo tiempo, apretó los puños con fuerza, con las uñas clavadas en las palmas de las manos.Hizo todo lo posible por ignorarlo. Se dijo a sí misma que solo tenía que aguantar un poco más, solo un poco más.Pero al instante...Sus ojos se abrieron de repente con terror.Finalmente había otra emoción en sus ojos apart
Capítulo 257 Él era el insignificante
Su voz chirriante le suplicaba, sonando completamente humillada. Sean hizo una pausa, su cuerpo se puso tenso. “¡¿Qué tonterías estás diciendo?!” Él la reprendió. La mujer inmovilizada debajo de él giró su cabeza, sus ojos luciendo heridos y obstinados. “Sean Stewart, tu pasatiempo siempre ha sido humillarme, ¿no?” Sus ojos se llenaron de lágrimas. “¿Quieres que yo suplique como una perra? Haré lo que quieras”. ¿No era eso lo que él quería? “No". La voz del hombre era ronca, sus ojos brillaban con un dolor agudo. Él miró a la mujer debajo de él y dijo, “Yo…” lo siento.Él la abrazó con fuerza por detrás, sosteniendo a la delgada mujer con fuerza en su abrazo. Su garganta se sintió apretada. ¿Cómo podía ella decir algo tan indecoroso? ¡¿Cómo podía ella decir algo así sin una pizca de honor?! ¡No! ¡Incorrecto! ¡Era él! ¡Todo era su culpa! ¡Él la estaba forzando de nuevo! ¡Estaba usando la fuerza sobre ella de nuevo! Su largo cabello cubría su cuerpo empapado. La
Último capítulo
- Capítulo 331 Historia extra: El final
- Capítulo 330 Él encarceló su cuerpo, ella encarceló su corazón
- Capítulo 329 Jane Dunn, todo lo que haces es correr
- Capítulo 328 Obligarla, paso a paso
- Capítulo 327 Un visitante no invitado
- Capítulo 326 Estoy cansado de este juego
- Capítulo 325 Te amo
- Capítulo 324 Jane finalmente consiguió lo que quería
- Capítulo 323 Él le construyó otra prisión