- Tranquila, no es tu culpa que tu hermano sea un completo idiota
- Lo sé, pero me siento mal por lo que te dijoContrario a lo que yo había pensado de ella, es muy amable y para nada pretenciosa, en realidad no tenía que haber venido a disculparse y lo hizo, por eso nunca se debe juzgar a un libro por su portada. - Muchas gracias por preocuparte - De todas formas, espero que no hayas tomado sus palabras en serio - No lo hice, no pienso permitir que me afecte - Genial. Eso significa que puedes ir conmigo a una fiesta esta noche ¿verdad? - Espera ¿una fiesta? - Mis amigas están preparando una fiesta para hoy en la noche y estás invitada - Pero yo no soy miembro de tu hermandad –de hecho, no estaba en ninguna - Eso no importa - Si me estás invitando por lástima, no tienes que hacerlo, lo último que quiero es darle la razón a tu hermano - Claro que no, no tiene nada que ver, me pareces una chica estupenda, así que no hay ninguna razón por la que no debas estar en la fiestaCreo que esta puede ser mi oportunidad perfecta para socializar con los demás, darme una oportunidad de conocer a las personas, acabo de darme cuenta que no todos tiene que ser malas. - Está bien, ahí estaré - Dame tu número, así puedo avisarte si hay algún cambioAsí lo hice y nos despedimos hasta la noche. Estuve todo el tiempo demasiado nerviosa y rebusqué en mi closet como una loca para encontrar qué ponerme. Ninguna de mis prendas parecía ser la adecuada, hasta que, al final, encontré una falda de cuero que me había regalado mi madre.Me la probé y en verdad me lucía genial, era negra y llegaba hasta la mitad de mis muslos, la acompañé con un tope rojo vino y unos zapatos no muy altos a juego para poder sentirme cómoda.Cuando terminé de arreglarme, no me reconocía en el espejo. No era para nada el estilo al que estaba acostumbrada a usar, pero me veía estupenda, me gustó demasiado. No sé qué tipo de fiestas hará la hermandad de Charlotte, pero estoy segura que con esta ropa estaré acorde.Estando ya en la parte de afuera, caí en una idea que me aterró, José podía estar en esta fiesta, la da su hermana, es lo más lógico. Calma Paola, no te dejes intimidar por eso. Nada va a lograr que me arrepienta de entrar, lo tengo más que decidido, si ya llegué hasta aquí, ya voy con todo.Abrí la puerta y como mismo lo imaginé, la primera persona a la que me topé fue José. - Vaya, vaya ¿no me digas que viniste a la fiesta? ¿Estás tratando de demostrarme que estoy equivocado? Bueno, como sea, me alegro de que estés aquí, yo sé que perteneces con nosotrosSolamente un tonto me podría preguntar eso viéndome en la fiesta, me parece que ha tomado de más porque está siendo muy amable teniendo en cuenta nuestra discusión de esta tarde. - Deberíamos hablar –continuó diciéndome- tengo que explicarte por qué me comporté de esa manera hoy, es importante para mí y puede ser importante para ti tambiénPuede que esté siendo un poco más gentil, pero ¿en verdad quiero pasar más tiempo con él y escuchar lo que quiere decirme? Precisamente por esa razón llegamos a la discusión de hoy. No pienso morder el anzuelo por más que me quiera endulzar, probablemente me insultará de nuevo. - Lo siento José, pero no estoy interesadaNo le dije nada más y salí caminando hacia la otra dirección. Saco mi teléfono y comienzo a enviarle un mensaje a Carolina para avisarle que ya estaba aquí, unos pocos minutos después, ella me recibe con una amplia sonrisa. - Paola, muchas gracias por venir. Ven conmigo, voy a mostrarte todo y a presentarte a unas cuantas personasMe tomó del brazo sin darme tiempo a nada y comenzamos a caminar entre las personas. Las primeras en presentarme fueron sus amigas quienes no pararon de hacerme cumplidos sobre mi elección de la ropa. Es evidente que nadie esperaba verme de esta forma, normalmente uso un par de jeans gastados y ropas holgadas, todo lo contrario a lo que estaba usando ahora. Las chicas también resultaron ser genuinamente agradables y dulces, no comprendo por qué nunca antes me permití compartir con las demás personas. Siempre pensé que como ellas eran las “populares” de la uni serían altaneras y miraban a los demás por encima del hombro sintiéndose superiores, pero para nada es así.En medio de la conversación, Miriam, no pudo contenerse y me soltó la pregunta: - Carolina nos comentó que tu padre es dueño de un casino ¿eso es cierto?Su pregunta me descolocó un poco y me hizo sentir demasiado incómoda, sobre todo porque eso no era para nada cierto, no entiendo cuál era el objetivo de preguntarme eso, pero supuse que cuando se conoce a alguien, lo más lógico es hacer preguntas para poder saber más sobre ella.Enseguida, Carolina comenzó a tocarme mi codo como señal para que le siguiera el juego, pero no entiendo la razón, si tengo que pretender ser rica para encajar no pienso hacerlo - ¿Qué? No, la verdad es que mi familia está en la quiebra - No le hagan caso –me interrumpió Carolina de inmediato- a ella solo le da vergüenza admitirlo, le gusta mantener un perfil bajo - No puedo creer que nunca antes lo supe –dice Miriam - Bueno, ahora ya lo sabesY así continuó Carolina toda la noche, exceptuando esa mentira que no fui capaz de entender, fue una excelente anfitriona, me hizo sentir realmente bienvenida. Me pasé toda la noche con ella y con sus amigos platicando de todo.No tenía mucho en común con ellos, pero en realidad, me resultó muy agradable sentirme aceptada por el grupo, solo por eso, me olvidé del detalle sobre mi familia del inicio, además, el alcohol también contribuyó a ello.Luego de unas cuantas horas, la fiesta estaba llegando a su fin. Los invitados poco a poco fueron marchándose solos y cada vez la casa estaba más vacía. El agotamiento comenzó a avisarme de que este era mi turno para marcharme yo también. - Muchas gracias por invitarme Carolina, me he sentido genial esta noche, ya me marcho - Espera, no te vayas todavía, necesito hablar contigo - Está bienMe extrañó un poco, pero supuse que quería hablar sobre la mentira del inicio de la fiesta, debería haber sabido que tenía algún tipo de plan entre las manos ¿De qué se tratará todo? - Tengo una pregunta que hacerte –continuó diciendo ella - Bueno, dime - ¿Te gustaría poder ser la novia de un millonario?La cabeza se me quiere explotar de tanto darle vueltas al asunto e intentar darme cuenta a qué se refiere ella con esa pregunta, es que ni siquiera venía al caso, no hemos estado hablando sobre eso en lo absoluto. Decido preguntarle de una vez por todas porque estoy segura de que por mí misma nunca me voy a dar cuenta. - ¿De qué estás hablando Carolina? - ¿Conoces a mi jefe, Harry Gilbert?Es él, ese es el chico con el que literalmente choque esta mañana en los pasillos de la facultad, pero no acabo de poder saber qué se trae ella entre manos y por qué me lo está mencionando - Sí, todo el mundo lo conoce - Pues él necesita una chica que finja ser su novia durante unas cuatro semanas, durante todo ese tiempo revivirías un pago bien generoso cada semana por tus serviciosNo puedo creer que en serio esté escuchando estas palabras ¿En serio me está haciendo esta propuesta? ¿En serio una persona como él tiene la necesidad de pagarle a una chica para que finja se
Al día siguiente no perdí tiempo alguno, me arreglé lo más pronto posible para llegar rápido a la facultad, tenía muchos deseos de encontrarme con las chicas y de hablar con Carolina.En cuanto llegué divisé a Mirna en el pasillo, fui directo hacia ella - Hola - ¿Y tú quién eres? - ¿Cómo que quién soy? Paola, Carolina nos presentó anoche en la fiesta - Ah, sí, cierto, es que vestida así no te reconocíBueno, la verdad anoche me había arreglado como nunca en mi vida, hasta había puesto empeño en mi maquillaje, pero no creo que tampoco sea tanto el cambio como para no reconocerme. - Entonces ¿la estás buscando? –continuó hablando ella - Bueno sí –le respondo ignorando el hecho de que hace solo unos segundos pretendió no conocerme solo por hecho de no estar bien arreglada como anoche - Está en su internado - Ah, ok, muchas gracias, adiósMe despido y en lo que voy caminando hacia el aula, saco mi móvil del bolso, tengo que escribirle un mensaje.*Hola Carolina, sobre el tema del
- Bueno ¿y ahora qué? Le pregunto a Carolina porque Harry todavía no ha llegado - Tienes cuatro semanas de fuerte exposición ante los medios de comunicación por delante y luego, un período de gracia de una semana - Bueno, debo admitirlo, suena como un buen arreglo, será más que suficiente para cubrir mis gastos - Entonces eso es perfecto, ahora si me disculpas, tengo unos recados que hacer, vas a estar bien aquí, te lo aseguroElla me guiña un ojo y sale de la oficina corriendo y toda emocionada. En realidad, solo acabo de confirmar que ella no es una mala persona, se ha portado realmente gentil conmigo y me apoyó tal y como me había dicho.El sonido de la puerta al abrirse me saca de mis pensamientos, levanto la vista de los papeles esperando ver entrar a Harry, pero en cambio, es su primo el que hace su entrada. - Paola ¿tú trabajas aquí? - Bueno, n… no exactamente Comencé a balbucear, no estoy segura si deba decirle, si él esté al tanto o no, así que decido contarle otra co
Paola, espero que sepas bien lo que estás haciendo porque a partir de ahora comienza realmente la actuación de tu vida. Estoy extremadamente nerviosa, no soy nada buena para esto; la interacción con las personas no es lo mío por eso siempre he estado sola, por eso los chicos de la uni han pensado desde que entré que soy una nerd, o una antipática, o una rarita.A partir de hoy mi nombre saldrá en los tabloides, en las revistas, por todo el internet, estoy completamente expuesta a las redes sociales, al criterio público a que se me juzgue por cualquier tontería que haga, por eso debo comenzar a tener extremo cuidado con cada paso que doy.Que todo sea por investigar más sobre el asunto del accidente de mi padre y, por supuesto, por todos los beneficios que implica este nuevo trabajo para mí porque sí, aunque no me lo parezca, he firmado un contrato exclusivo de trabajo, no es nada más que eso.Al salir de la facultad estaba un coche esperando por nosotras, uno bien lujoso, de los que s
Cuando fue la hora indicada, el chofer me llamaba para avisarme que ya había llegado, fue más que puntual, por supuesto que toda la cena estaba perfectamente organizada y, por tanto, la cronometración no podía fallar. Al llegar, Harry me estaba esperando en la entrada y tomando mi mano, comenzó a posar para los flashes de las cámaras que se encendieron justo en el momento en el que el contacto físico entre nosotros se dio.Cuando se cansó de sonreir para las cámaras, me condujo hacia el interior del restaurante más elegante que jamás había visto. Una vez sentados, miro el menú solo para darme cuenta que ni siquiera soy capaz de pronunciar la mitad de los platos que vienen aquí. - Paola ¿estás bien? –pregunta al notar mi expresión de preocupación - Este lugar es demasiado caro –le respondí con notable alarma en el tono de mi voz - Los precios son normales para este tipo de comida en este tipo de restaurantes - Pero por el mismo dinero, se podría alimentar a una docena de personas e
Mi cabeza se pone a pensar en miles de cosas a la vez ¿Cómo me va a estar proponiendo algo como esto? ¿Acaso se le han aflojado los tornillos de su cabeza?Esto no fue para nada lo que acordamos, me encargué personalmente de revisar cada parte del contrato minuciosamente y yo estuve de acuerdo con firmarlo porque todo quedaba plasmado de la forma más seria que se podía.¿Cuál es su objetivo al ofrecerme irme a vivir con él? Es que no tiene sentido. El objetivo de todo esto es montar escenas delante de las cámaras y las personas, o sea, de puertas hacia afuera, no de puertas hacia adentro.Nadie tiene que saber que yo vivo aquí, nadie tiene que entrar hasta mi casa y ver el tamaño de mi departamento, a nadie más que a mí le tiene que interesar si mi habitación y cocina están en la misma área, ni siquiera a él. se ha pasado de los límites, esto no pienso dejarlo pasar.-No puedo abandonar todas mis costumbres, mi tranquilidad para irme a vivir contigo, esto no fue parte del trato en n
Me resulta tan raro que todos, de la noche a la mañana, sean tan amables conmigo, no es que me esté quejando, prefiero esto, aunque sea totalmente falso, a los insultos que me ofrecían constantemente sin yo hacer nada, como los que me daba José cada vez que tenía una oportunidad.No sé ni para qué pienso en él, hablando del diablo, al terminar las clases, vino directo a mi encuentro y con clara molestia reflejada en su rostro me soltó: - ¿Te has vuelto loca? - ¿Cómo dices? - Te he visto en todas las noticias, en los titulares te han apodado como “la amante del millonario” por salir con ese tal Harry Gilbert - No le veo nada de malo - Eso significa que no tienes ni la menor idea de en dónde te estás metiendo, has ido directamente hasta la guarida del lobo - ¡Ay qué miedo! Estoy aterrorizada –le dijo poniendo los ojos en blancos- Mira José, no sé qué decirte, esto tampoco es un tema de tu interés, mi vida es mi problema, no el tuyo, pensé que ya
Solo voy a mudarme con Harry ¿Qué malo podrá pasar?...Después de que firmé el contrato y de que Harry salió de su oficina, Carolina se acercó con gran preocupación reflejada en su rostro: - No pareces muy segura de querer mudarte con Harry ¿Tienes algún problema con él?Ella tiene razón, estoy preocupada, además de estar acostumbrada siempre a vivir sola, nunca he compartido la misma vivienda con un hombre - Es que todo me parece un poco apresurado - ¿A qué te refieres con eso? Recuerda que todo esto no es más que un engaño perfectamente elaborado, su “relación” no se tiene que desarrollar de forma orgánica, mañana mismo podrías estar embarazada y eso sería totalmente normal - Pero el objetivo es que parezca creíble ¿no? - Eso sí, pero es algo que sucede también en muchas parejas, no serían las primeras en declarar que se encuentran felizmente enamorados y avanzan lo más pronto posible, esto podría ayudar mucho con el plan, además, así podrás estar