Cuando llegamos al centro del pueblo, la familia conoció a toda la gente del lugar, incluso a mi vieja amiga Gretel Stone la cual estaba frente a una venta de chocolate en el centro comercial al que habíamos ido. Mi amiga, a quién no había podido ver en los últimos días debido a que ella se encontraba con un proyecto de arquitectura. Ahora, se encontraba ahí de pie, vistiendo unas botas altas, jeans negros, una playera blanca y un abrigo, me sonrió en cuanto me vio. Corrí hasta ella para darle un fuerte abrazo.―¿Por qué te ves más guapa de lo normal? ― Su cabello que ahora estaba de un color marrón resaltaba sus ojos avellana. Sonreí a de oreja a oreja cómo si le hubieran dado la mejor noticia de su vida.―¡Eso no es cierto! ―Se quejó mientras notaba cómo se sonrojaba. ―Es más, tu te ves super hermosa. No me digas, ¿tuviste sexo?―Muy graciosa. ―La golpeé mientras le daba un golpe en el brazo. ―Pasaron muchas cosas, pero…―¡Sofi! ―Erick se acercó a mí con una bolsa de galletas. Cuand
Decidimos dejar la charla para después. Había muchas cosas en las que pensar y honestamente ahora no podía pensar en ello. Ava y Zoé fueron a por mí cuando habían encontrado un vestido que fuera acorde a la ocasión. Lo miré, la tela, era sedosa y suave al tacto. El vestido era color azul invernal degradado, desde abajo el color más fuerte hasta arriba llegando a un color casi blanco.Era hermoso, por ello decidí probármelo y honestamente valía la pena. Cuando me vi frente al espejo no podía creer que era yo. El corte era impecable, abrazando suavemente mi figura antes de extenderse en una falda fluida que rozaba el suelo con gracia. La parte superior tiene un escote ilusorio adornado con encaje intrincado que se asemeja a delicados cristales de hielo. Los hombros, elegantemente descubiertos, añaden un toque de sensualidad sutil que me hacía ruborizar.Las mangas largas, confeccionadas en encaje transparente, se extendían hasta las muñecas, proporcionando un contraste encantador con mi
Una vez en casa, m di una ducha para luego salir con mi pijama puesta y secadora en mano. Me senté en la cama y encendí el aparato. Pronto llegó Austin para tomar asiento a mi lado y agarrar la secadora.―Déjame a mí. ―Sonreí de lado agradecida y me acomodé para que él comenzara a secar mi cabello. Sus manos recorrieron mi cabello mientras lo sostenía para secarme el cabello. Luego le pase el peine y con eso el trató de estilizarlo. La verdad era divertido y tierno que hiciera esto por mí.―¿Cómo estás?―Estoy bien ¿y tú?―Igual. Pero sé que algo te preocupa. ―Claro que sí. Aun mantenía mi culpa por estarle mintiendo a su familia.―Sí yo… solo quiero decir la verdad.―Podemos hacerlo cuando tu digas. Les diré a mis padres y estaré a tu lado.―¿Crees que se enfadar&aacut
La vida resulta muchas veces un misterio, las cosas que pasan a veces son cosas que deben pasar, otras son consecuencia de las decisiones que decides tomar. Si decides vivir una vida honesta y humilde, tu vida será de la misma forma, puede que desees cosas que no podrás obtener, pero de alguna manera, al elegir una vida sencilla eres feliz. Si decides ser una persona orgullosa, material, pero exitosa hay dos formas en las que puedes vivir, feliz o infeliz. Además, si decides ser una mentirosa que compromete la imagen de una familia poderosa, bueno no sería una sorpresa que las cosas se salgan de control.Tal y como me sucedió a mí, pero para ello debo detallar lo que pasó.Sí, las cosas habían salido bien entre la familia de Austin y mi persona. Además, el festival navideño había dado comienzo, eso junto al baile que tanto tiempo estuve planeando. Todo estaba saliendo a la perfección. Las personas parecían disfrutar el evento. Sin embargo, hubo un momento donde perdí el control de las
Todo había sido un cuento de hadas para mí. Haber conocido a Austin fue algo muy lindo. Si alguien me preguntara si me arrepentía de haber hecho aquel contrato con él diría que si lo haría aun sabiendo lo que se venía por delante.Jamás debí confiar en Susana, pero ahí estaba yo. En medio de la multitud siendo juzgada y señalada por lo que había hecho. Sentí que la vergüenza me cubría por completo. Miré a Austin y luego a su familia. No podía huir de ahí, no podía darle ese gusto a Susana sin siquiera explicarme. Así que avancé con paso seguro hasta donde estaba la mujer que pretendía arruinar mi vida.―Buenas noches a todos. ―Comencé sintiendo como mi voz temblaba debido a los nervios. Respiré hondo e hice mi mejor intento para poder parecer segura de mí misma. No iba a darle la satisfacción de victoria a Susana, no lo merecía. ―Sé que no esperaban algo como esto esta noche. Después de todo se trata de una gala especial para los que no tienen nada durante estas fiestas. Se trata de a
¿Alguna vez has tenido ese sentimiento de comodidad? ¿De qué todo saldrá bien si no piensas en las cosas malas y crees que no ha pasado nada? ¿Qué la vida se queda en ese momento, sin preocupaciones, sin estrés, sin nada que te arruine la vida?Bueno, de esa forma me sentía al estar en ese sitio, tener a mi padre jugando conmigo, recordando nuestros momentos juntos en el parque mientras se subía conmigo al sube y baja, mientras me empujaba en el columpio, mientras jugábamos a las escondidas. Me sentía como una pluma, sin un peso encima.Ese momento eran risas y diversión, no había nada más lejos de eso.―¡Sophie! ―Una voz extraña hizo que me detuviera en medio del arenero. Miré a mi padre y este simplemente me sonrió.―¿Me llamaste papá?―No cariño. ―Se acercó para tomar mi mano.―¿Qu
La revisión médica comenzó con un médico que me preguntaba mi nombre, fecha de nacimiento y otros detalles básicos de identificación. Respondí con voz débil y temblorosa, luchando por concentrarme mientras lidiaba con la confusión y el dolor de cabeza.El médico procedió a realizarme una serie de pruebas físicas, incluyendo revisión de signos vitales como la presión arterial, frecuencia cardíaca y respiratoria, y la temperatura corporal. Sentí las manos del médico en mi rostro, palpando mi cuello y abdomen, y escuché el sonido del estetoscopio mientras el médico auscultaba mi corazón y pulmones.A medida que la revisión continuaba, el médico me hizo preguntas sobre mi historial médico, alergias, medicamentos que tomaba y cualquier problema de salud previo. Respondí lo mejor que pude, pero la confusión y el dolor me hacían sentir mareada y desorientada.El médico también me preguntó sobre el accidente que me había llevado al hospital, pero no pude recordar nada. Finalmente me explicó q
―¡Te volviste loca! ―Gretel dejó caer el canasto de fruta en la mesa. Yo me hice la loca observando el yeso alrededor de mi brazo. Por suerte era lo único grave que le había pasado en mi cuerpo luego del accidente. Los últimos días me había puesto al día con los conocimientos de los últimos seis meses. Porque ese era el tiempo total que había olvidado por completo.Al parecer habían bajado los ingresos en mi empresa e intenté lo mejor posible para salir adelante. Es por eso que busqué a Austin Jones para realizar un trato. Y por lo que Ana y Mina le explicaron las cosas no habían ido muy bien, ya que al parece maldije a Austin Jones por al menos una semana. Sin embargo, luego de lo que Austin me explicó, entendí la razón del trato. Luego de eso, Steven me contó que obtuve una herencia, Joy Green, de parte de mi madre. Y decidí venderlo, que era lo que le había recién comentado a Gretel, esa era la razón por la que me había gritado.―¿Cómo vas a vender Joy Green? Prometiste que no lo h