"A veces, envidio a Morfeo porque creció con al menos uno de sus padres. A nosotros, los guerreros, nos sacan y nos entrenan sin emociones. No debemos encariñarnos demasiado, y aprendimos a controlar nuestras emociones, pero yo pienso que esas emociones no están controladas. ¿Si no, por qué mi papá se enamoraría de una humana, pero sería tan cobarde como para rechazarla por algunas reglas?".

"Admiro cómo luchaste por Laika. Te respeto mucho por eso".

Sonreí por primera vez desde que llegué aquí. "Laika era mi mundo. Cuando la conocí, me debatía entre aceptarla como mi pareja o rechazarla porque era una Omega. Pero cuanto más pensaba, más me atraía. ¿Sabes por qué juré hacerla mía?". Miré a Claudia, sonriendo. Ella negó con la cabeza. "Porque fue la primera mujer, hombre o bestia que me conquistó. Era la esclava asignada a mi carpa, y cuando le pedí que abriera las piernas y me dejara hacer lo que quisiera, se negó cortésmente".

"¿Otras lobas habrían clamado por acostarse contigo, ve