Al oir aquellas palabras, Selena se quedo paralizada de miedo. Disparar. Alexander habia hablado de aprender a disparar con tal diligencia que sintio como todo su cuerpo se contraia de miedo, al recordar otro momento en su vida, donde la violencia habia tenido pase libre a la mas deprabadas y horrorosas cosas.—No digas algo asi—comenzo a decir la bella prostituta con los dientes apretados—. Ni por un instante vuelvas a decir algo asi.El hermoso millonario de cabello dorado pestaneo un par de veces, ante la sorpresa y la duda que le probocaba aquella reaccion de Selena. Sin embargo, rapidamente comprendio que se trataba de algo que ella habia vivido, un momento pasado de su historia que preferia no recordar.—Lo lamento, Selena… yo solo estaba bromeando—comenzo a decir el con cierto temor—. Para que conste, no se disparar ni me interesa hacerlo… por el contrario, me aterra la idea de usar un arma.La prostituta lo observo directamente a los ojos antes de asentir lentamente con la cab
El corazon de Alexander dio un pequeño brinco, mientras no podia evitar contener una sonrisa que lograba iluminar su mirada verde esmeralda.Aquel hermoso y apuesto hombre se quedo petrificado, estatico, olvidando por completo que se suponia que debia hacer.Selena rio con suavidad, mientras comenzaba a servir la comida en el plato de ambos.—¿Que se siente?—pregunto Alexander en tono bajo.—¿A que te refieres?—dijo la bella prostituta mientras probaba un bocado de la deliciosa comida.Las mejillas del millonario se sonrojaron un poco.—Estar embarazada—agrego el con el mismo tono de voz resquebrajado.Selena parpadeo sorprendida, ciertamente no se habia detenido a pensar aquello desde que la prueba habia dado positiva.—En realidad no me siento muy diferente—comenzo a decir ella con delicadeza—. Pero es increible pensar que una vida nueva crece dentro de mi.Alexander sonrio, mientras decia sin poder evitarlo:—Te ver mas hermosa que nunca— al instante se arrepintio de sus hozadas pa
El millonario de mirada verde cerro los ojos, mientras se inclinaba hacia adelante para dejar un delicado y gentil beso en la mejilla de la bella prostituta. El contacto fue ligero, casi inexistente, sin embargo logro acelerar el latido del corazon de Selena, mientras se dejaba maravillar por la calidez de aquel dulce contacto.Alexander se retiro casi al momento de que sus labios hicieron contacto con su piel, como si no fuera capaz de contenerse a si mismo. Un instante mas cerca de la piel de Selena y el la hubiera besado en los labios, hechando al drenaje su plan para conquistar su corazon.—Lo lamento, no debi hacerlo—dijo Alexander con la gargante algo seca, sus mejillas sonrojadas y la voz ronca.La bella prostituta lo observo durante algunos segundos, siendo capaz de leer lo que moraba en su alma y corazon. Exponiendo una suave sonrisa ella respondio:—No te preocupes, Alexander… me gusto el beso, fuiste muy gentil y amable—.El corazon del millonario se acelero, mientras su me
—Esa primera noche, mi primera vez con un hombre como mujer fue… atroz—comenzo a decir ella, reprimiendo las lagrimas que se aglomeraban en sus ojos, mientras que un nudo se apretaba en su garganta.Selena trago duro, intentando digerir el nudo y las horribles emociones que la abordaban al recordar aquella noche, aquel momento lleno de tristeza y desesperacion.>—El era mucho mayor que yo, tenia mas fuerza y era extremadamente violento—solto ella con un hilo de voz—. Fue un milagro que no muriera esa noche, ni ninguna de las otras hasta que nos cruzamos.Los ojos del millonario brillaban con una luz especial, mientras la miraba y sentia dolor y tristeza por ella, de un modo que jamas habia experimentado.Alexander extendio una mano hacia ella, tomandola con delicadeza, mientras le obsequiaba una sonrisa triste.Selena se limito a apretarla en respuesta, logrando llenar su corazon de fuerza para continuar con el relato.—. Conforme fui creciendo, mi imagen sobre el amor y todo lo que e
Cuando Selena se desperto al dia siguiente, un ataque de nauseas fue su saludo vespertino. Asqueada, sintiendo que su estomago estaba en constante movimiento como dentro de una lavadora, ella salio de la cama corriendo y se dejo caer frente al retrete.Alexander no demoro en aparecer detras de ella para recoger su cabello y acariciar su espalda en grandes y prolongados circulos.—No tienes que hacerlo—logro decir ella luego de algunos minutos, haciendo la cabeza hacia atras para respirar algo de aire fresco.—Claro que si, es parte del contrato—respondio el mientras sacaba el celular del bolsillo y comenzaba a buscar algo en ese.—No recuerdo haber leido esa parte—se quejo ella cerrando la tapa del retrete para sentarse sobre esta, mientras observaba al millonario con detenimiento—¿Que estas haciendo?—Busco el numero de algun medico que te venga a ver ahora mismo—respondio Alexander de manera tajante.Las cejas de Selena se alzaron durante algunos segundos antes de que esta liberara
Por instinto y meramente curiosidad inocente, Selena atendio el celular, llevando la bocina de este a su oreja.—Hola ¿Alex? Lamento mucho lo de hoy… pero no puedes negarme que te gusto—comenzo a decir la extraña al otro lado del celular. Su tono de voz era igual a un suspiro en mitad de la noche.Selena no dijo nada, se limito a apretar con fuerza el celular mientras una vaga nocion de lo que podia haber llegado a ocurrir se plasmaba en su mente.>—¿No diras nada?... perfecto, eres un idiota… ¿Primeros quieres que te la chupe y ahora no respondes?Pasos resonaron al otro lado de la puerta del baño, y un par de minutos despues, aparecio Alexander, llevando consigo un vaso de agua fresca.Al instante, cuando su cuerpo ingreso al baño, su mirada se clavo en el rostro de Selena, quien tenia el celular en su oido.—¿Ocurre algo?—pregunto el millonario temeroso de que la bella prostituta no se encontrara bien.Selena se incorporo, y con tono seco dijo:—Es para ti, de tu amante—mientras em
Cuando Alexander ingreso a la habitacion, Selena estaba recostada en la cama, fingiendo dormir.El millonario, con rostro palido y algo demacrado, avanzo por la habitacion hasta detenerse junto a ella, tomando asiento a su lado.—Se llama Alessa, es mi secretaria—dijo el en tono bajo, notando que la bella prostituta en verdad no estaba durmiendo.Con sus ojos aun cerrados, sin querer mirarlo, ella simplemente dijo:—No quiero saber, no me interesa saber de tu relacion con ella—su tono era aspero y algo agresivo.Alexander trago duro, mientras el dolor se hacia carne en su mirada verde esmeralda.—Selena…—comenzo a decir el en un susurro casi inexistente.Pero la prostituta abrio los ojos, respiro profundo y esbozo la mejor sonrisa falsa que puso convocar en aquel preciso instante. Una que fue lo suficientemente capaz de engañar al millonario.—No tienes que decir nada, Alex, no es necesario… tienes una amante ¿Y que? ¿Cual es el problema de eso?—pregunto Selena con tono un poco mas ca
Cuando Alexander ingreso a la habitacion, Selena estaba recostada en la cama, fingiendo dormir.El millonario, con rostro palido y algo demacrado, avanzo por la habitacion hasta detenerse junto a ella, tomando asiento a su lado.—Se llama Alessa, es mi secretaria—dijo el en tono bajo, notando que la bella prostituta en verdad no estaba durmiendo.Con sus ojos aun cerrados, sin querer mirarlo, ella simplemente dijo:—No quiero saber, no me interesa saber de tu relacion con ella—su tono era aspero y algo agresivo.Alexander trago duro, mientras el dolor se hacia carne en su mirada verde esmeralda.—Selena…—comenzo a decir el en un susurro casi inexistente.Pero la prostituta abrio los ojos, respiro profundo y esbozo la mejor sonrisa falsa que puso convocar en aquel preciso instante. Una que fue lo suficientemente capaz de engañar al millonario.—No tienes que decir nada, Alex, no es necesario… tienes una amante ¿Y que? ¿Cual es el problema de eso?—pregunto Selena con tono un poco mas ca