—Sí puedo creerlo, es una cosa bárbara — comento sonriente.Noto que ninguno de los dos me da paso al departamento. Están bloqueándome la puerta.—Necesito mi tableta. La dejé olvidada en tu estudio — miento ya que estamos de mentirosos esta noche.—¿Sí? No la he visto, ni… — menciona confundido Mat
Narrado por Luciano BrownHe hecho lo que debía hacer. Es lo que me repito con constancia para no recaer en arrepentimientos inútiles. No escogí un camino fácil, pude, pero no lo hice. Así era la vida, sacrificabas, apostabas y podía que ganases o perdieses. Qué yo que estuve dispuesto a perderlo to
—Canibalización de empresas. Pasa todo el tiempo — comenta como si fuese evidente.—¿No es mucha coincidencia que ellos también colaborasen con nosotros?Antes del escándalo de Belmonte Raíces, los Nichols tenían información privilegiada sobre SMB que fue dada por nuestras agencias. Fue un intercamb
Narrado por Luciano BrownPor más que los años pasarán algo que no había cambiado en Marianne era su capacidad para sorprenderme. Tenerla a mi lado en el auto no estaba en lo programado, más bien pensé que me insultaría las próximas cinco veces que me viese, pero no. Estoy conduciendo al hotel donde
—Puede que la sensación de que estuviese creciendo, fue lo que te lastimase — le vuelvo a servir, menos que la última vez.—Una parte de mí lo sabía — sonríe con tristeza — No es como que Amanda se haya desentendido de su hija. No la había visto tan motivada por nadie antes. Siento que ha tardado un
Narrado por Luciano BrownOdiaba a Mateo con un ahínco y una repugnancia inauditas. Odiaba imaginar el tiempo que vivió con Marianne, odiaba pensar en los besos que compartieron, odiaba saber que ella lo dejó entrar en su cuerpo. Pero, sobre todo, odiaba el siquiera vislumbrar que él fuera su esposo
El alcohol es una especie de escape, una forma de desahogar tus sentimientos, y esos deseos que están reprimidos en lo más profundo, salen a flote con una borrachera. Es decir, sea lo que haya pasado anoche, probablemente yo me lo busqué.Apenas despertando puedo darme cuenta de un par de cosas. Una
—¿De qué… de qué querías hablar conmigo? — digo algo temblorosa. —¿Cuán grande fue la pelea que tuviste con Mateo como para que te vengases de él acostándote conmigo? — cuestiona con un toque de tristeza y auto desprecio.Por primera vez desde que me levanto pienso en Mateo. En cómo “su tiempo” se