[DANNA]
Nos estamos jugando la vida en estos momentos. Yo por mi parte busco la reposera más alejada de todas en este inmenso jardín y pretendo estar entretenida con mi celular, pero en realidad tengo mis minúsculos auriculares puestos y escucho la conversación que esta llevándose a cabo dentro de aquella oficina, y supongo que J.K y toda su gente debe de estar haciendo lo mismo. Los nervios están a flor de piel ya que cualquier mínimo error podría significar nuestra muerte, vivo mirando a mi alrededor asegurándome que ninguno de los guardias de seguridad se acerque lo suficiente como para darse cuenta de lo que estoy haciendo, pero mi paranoia me lleva a creer a cada momento que hemos sido descubiertos aun cuando sé que no es así.
“Mañana se hará una de las entregas más importantes de todas, necesitamos que todos estén atentos”escucho que le di
[DANNA]Los invitados ya han llegado, y con eso todas las puertas de acceso de la casa han sido cerradas con llave incluyendo los portones que dan a la calle haciendo que este lugar se convierta en una fortaleza. Debido a todo esto, salir se ha hecho imposible orillándonos a Mauro y a mi a seguir los pasos del plan “B”, ese que los dos sabemos que es peligroso. Tuvimos apenas cinco minutos para idearlo y fue entre susurros para evitar que alguien nos escuchara.Estoy nerviosa mientras que escucho las conversaciones que surgen alrededor de la mesa y es que según Mauro el reloj esta en nuestra contra, técnicamente la entrega es mañana, pero para se pueda planear un operativo las coordenadas deberían ser dadas hoy… miro al hombre en el que más confió y espero por su señal, los dos sabemos lo que haremos, él distraer a los de seguridad, y yo cancelar el inhibidor, y enviar las coordenadas&hel
[DANNA]Corro lo más rápido que puedo, siento como mi respiración se agita, mis tacones dificultan la tarea, pero no tengo tiempo para quitármelos; apenas pude escarparme después de que me descubrieran en aquel pasillo. Veo mi brazo y sangra, pero no lo suficiente como para preocuparme, sin embargo, no puedo dejar de pensar en Mauro «espero que este bien… tiene que estar bien» miro a mi alrededor, y la oscuridad de la noche me permite esconderme de guardias de seguridad que me perseguían después de haber saltado aquella muralla y apenas encuentro un lugar seguro detrás de unos arbustos, busco el celular y llamo a J.K.—Dime que estas a salvo, que lograste escapar— Me dice del otro lado mientras que escucho ruidos muy extraños.—Si, estoy bien… cuando me descubrieron comencé a correr por los pasadizos y encontré otra puerta y cuando entre ah&ia
[MAURO]A mi alrededor el despliegue del FBI y otras fuerzas locales e internacionales, parece sacado de una película. Se llevan a los involucrados esposados, sacan a las mujeres que aparentemente estaban en una especie de sótano cubiertas con unas mantas, y yo simplemente trato de saber que es lo que esta ocurriendo con Danna. Una vez que el paramédico termina de vendar mi ultima herida, le agradezco y me acerco disimuladamente a J.K y escucho lo que le indica al grupo que esta yendo por Danna.Una vez que oigo la información acerca de la ubicación donde ella esta, miro una vez más a mi alrededor hasta que me doy cuenta de que pasando el portón principal hay un auto que esta desatendido «Tú puedes Mauro» me aliento y escabulléndome entre el gentío que hay aquí, consigo salir del perímetro de la casa hasta subirme al vehículo color negro y ponerlo en marcha con las ll
[MAURO]Tengo la sensación de que todo mi alrededor esta dando vueltas, me siento mal, todo esta oscuro y me cuesta abrir mis ojos, pero cuando consigo hacerlo me encuentro dentro de lo que pareciera ser un cuadrado de vidrio y frente a mi del otro ladro del cristal veo a Danna. La tienen amarrada a una especie de cama de hierro y solo lleva su ropa interior puesta haciendo que mis peores pesadillas se conviertan en una realidad —¡Danna!— Grito con todas mis fuerzas y trato de levantarme de esta silla en la que estoy sentado, pero el ruido de unas cadenas en mis tobillos y muñecas me hacen dar cuenta de la situación en la que me encuentro.—Disfruta del espectáculo— Escucho una voz que retumba por un sistema de sonido que al levantar mi mirada me doy cuenta de que esta en el techo y al volver a mirar hacia el frente, veo entrar a Dimitri junto a otros cuatro hombros.—¡No! ¡No le hagan d
[MAURO]El hotel donde nos han traído los agentes del FBI, pareciera ser una fortaleza de tantos agentes que hay custodiándolo incluso en la puerta de nuestra habitación —Por aquí mi amor— Le digo a ella quien aun tiembla de pies a cabeza.Abro la puerta con la tarjeta magnética y una vez que entramos me aseguro de que la puerta no se pueda abrir mientras que ella sigue caminando hacia el baño y con algo de dificultad por lo lastimados que están mis tobillos, la sigo hasta que los dos estamos dentro del baño. Supongo que el personal del hotel estaba al tanto de lo ocurre porque de otra manera nos hubieran preguntado que nos paso y es que nuestro aspecto es un desastre.Ella se mira en el espejo y empieza a llorar desconsoladamente mientras que con la yema de sus dedos quita lo que queda de sangre de su cuello y luego se quita la camisa que le dio J.K. —Me quisieron violar…— Mu
[MAURO]Al día siguiente: 3 de junioDormir ha sido casi imposible y es que todo lo que paso nos afecto muchísimo y no es para menos, pero estar juntos y abrazados ha sido un gran alivio, nos ayudo a darnos fuerza y dejarnos saber que no estamos solos en todo esto. Lo que vivimos en estos últimos días ha sido demasiado intenso y por más que hubiésemos estado entrenados para todo esto, es imposible poder acostumbrarse a situaciones tan limites como las vividas ayer. Cuando más revivía esas imágenes en mi cabeza, peor eran. Miro la hora en la mesita de noche y ya son más de las diez de la mañana cuando escuchamos que alguien golpea la puerta de la habitación y con algo de dificultad por lo lastimado que estoy, me levanto de la cama. Ella se coloca el albornoz del hotel y se levanta también conmigo para que junto vayamos a abrir.Miro por mirilla y veo a J.K. parado del otro
[DANNA]Nuestro equipaje ya esta listo para marcharnos y así poder comenzar la vida que siempre hemos soñado, no es fácil dejar lo poco que tenemos atrás, pero los dos sabíamos muy bien que esto acabaría así, o al menos lejos de todos porque en cuanto a estar juntos no estaba nada seguro. Todavía no me recupero de todo lo que paso y asumir que mi padre esta preso es difícil, no quiero imaginarme lo que debe estar pasando mi madre al darse cuenda de con quien estaba casada, ni mucho menos que es lo que le pasara cuando se de cuenta de que yo tampoco volveré.—¿Te encuentras bien?— Me pregunta Mauro antes de salir de la habitación y asiento.—Si, solo pensaba en mi mamá… se le va a hacer muy difícil quedarse sola— Explico.—Lo sé, yo también pensaba en mi mamá y en mi hermano, no sé que van a hace
[MAURO](Horas después)Cuando J.K. nos notifico que nuestro destino para comenzar nuestra nueva vida sería Italia, imagine muchísimas cosas distintas, pero no que llegaríamos a un sitio como este. Después de que el avión aterrizara en el aeropuerto de Génova, nos hicieron subir a una camioneta y de allí recorrimos varios kilómetros hasta llegar a un pueblo llamado Portofino ubicado al pie de esta provincia, y no puedo negar que sus paisajes son de ensueño. Según nos ha contado el conductor de la camioneta, la economía del pueblo se sostiene principalmente por el turismo y ahora entiendo que si nos hicieron llegar aquí es porque saben que tal vez aquí podamos rehacer nuestra vida con lo que sabemos hacer.—¿Imaginaste que estaríamos aquí juntos?— Me pregunta ella de repente y voltea a mirarme con esos ojos que son mi vida entera.