Emmett se acercó hasta donde estaba Joseph, —¿Porque has traído a Maya contigo?— le cuestiono con frialdad.—¡Porque me preguntas a mi… que no eres tú el anfitrión del evento!. Porque sería yo el que trajera a esa mujer— respondió con molestia, giró su mirada para buscar a Selene, pero la miró muy entretenida charlando con Alejandro.¿ realmente ellos seguían teniendo buena relación ?, se preguntaba así mismo.—¡Es tu novia!… crees que la invitaría este lugar solo para causarle molestias a mi esposa, ambos sabemos lo que sucede con ella , solo llévatela de aquí— le ordeno Emmett, sacando de sus pensamientos a Joseph, el cual lo fulmino con la mirada.Masón permaneció en silencio a espaldas de Emmett, al mirarlo molesto no pudo evitar culparse,— Señor Kattán, fui yo el que se encargó de enviar las invitación, como la señorita Howard y usted eran buenos amigos en el pasado, no creía que fuera malo incitarla esta vez en nombre de su familia — hablo con la cabeza gacha.Emmett sintió que
—No te mereces mi respeto, mucho menos llamarte tío… ¡ Tú hija es la principal acosadora de mi hermana… yo no soy Marcos, para perdonar… soy Joseph y créeme que yo no perdono quien lastima a mi familia !— sentenció el. Dio la vuelta para marcharse, sus ojos se posaron en el balcón del segundo piso las personas empezaban a causarle dolor de cabeza, decidió subir y buscar a Selene desde la altura, tampoco quería arruinar la fiesta de Emmett… mucho menos molestar a su padre con la noticia de su hija.Alejandro sintió como la sangre le hervía en el interior, le arrebató una copa de vino a la mesera y no dudo en llevárselo a la boca para beberlo de un solo trago, su rostro estaba teñido de ironía,—¡Soy el malo !— murmuro riéndose así mismo, era el malo , tal vez era cierto, pero quería cubrir esa mentira con un favor.*** En el momento en que Emmett se iba a acercar a Selene, un mesero vertió una copa de vino en la camisa blanca de él , las gotas burdeas escurrieron por su perfecta camis
La mente de Joseph se nublo, ella acababa de mencionar un hijo…¡ ella estaba embarazada!.Giró su cabeza por última vez en la dirección de la cual ella venía, la miró subir, pero así de rápido ella se fue.Tenía muchas preguntas que hacerle, pero mirar la sangre escurrir, le hacía detenerse.—¿Que sucedió?…¡Debería llamar a tu esposo para que te lleve al hospital !— hablo sin despegar su mirada de la mujer.Selene forzó una sonrisa,—¡No deberías molestarle ahora!..apuesto que esta demasiado ocupado para pensar en mi— se burló así misma. Y es que ella tampoco quería creer lo que miró, pero la ropa de ambos estaba tirada en el suelo…¡y de ellos desnudos, ni hablar!. Y luego recordó las palabras burlonas de Alicia…¡ Ella también lo sabía!.El tono lleno de ironía de la mujer lo hizo desconcertarse, un ligero brillo de frialdad cruzó sus ojos,—¿ Lo viste con alguien?—le increpó el .Selene desvió su mirada mientras trataba de mantenerse sobria, el dolor le estaba comenzando a nublar la me
El auto había salido disparado por la carretera, el hospital más cercano estaba a dos horas aproximadamente.Y en el asiento del conductor, las manos del hombre temblaban con temor.—Acelera el maldito auto, carajo—se escuchó el rugido de Joseph.En la parte de atrás Selene iba acurrucada sobre el asiento. Por otra parte Joseph se pegaba más a la puerta del automóvil para darle más espacio a su hermana. Pero la sangre en sus piernas no dejaba de fluir, y el asiento ya había quedado empapado.—Me…me du…ele mucho— apenas y decía, pero su cuerpo estaba temblando incontrolable. Sus ojos de Selene se cerraban de vez en cuando, y podía ver claramente el rostro de su madre cuando sonreía,—¡Pro…prometí ser fuerte!—.Un nudo se formó en la garganta de Joseph, —Lo siento hermana… fue mi culpa , yo te abandoné, debí cuidarte mejor…¡lo siento, lo siento!— decía una y otra vez.Selene tenía la mente nublaba por el dolor, tanto que no presto atención a lo que decía Joseph.—¡Papá está vivo Selene!,
Selene fue trasladada a una habitación. Cuando al fin abrió sus ojos sintió un dolor punzante en la parte baja de su abdomen, las voces de hombres discutiendo fuera del lugar apenas y se escuchaba, pero estaba tan agotada para prestar atención.Ni siquiera sintió cuando las lágrimas salieron por sus ojos, miró fuera de la ventana y se sintió inmensamente triste.—¡Mi bebe!— fue el único pensamiento que atravesó su mente en medio de esa crisis.El médico empujó la puerta con una carpeta en su mano, miró a la mujer en la cama y se acercó a ella,—¡Todo fue un éxito!— dijo el.Pero en ese instante la puerta fue abierta de nuevo, Emmett y Joseph entraron al mismo tiempo, ambos apresurándose a donde está Selene.—¿Dime cómo te sientes, estás bien ahora?— fue lo primero que dijo Joseph, pero una mirada penetrante se posó en el, rápidamente se giró sobre Emmett y señaló la puerta,—Márchate ahora, ni siquiera mereces estar aquí, ¡ o no era que estabas muy ocupado!.Cuando Emmett separó los lab
El celular de Selene comenzó a vibrar, tomó aquella llamada sin mirar el nombre que relampagueaba en la pantalla.—¡Mmmm!— murmuro ella.—Estoy frente al hospital, en realidad vine a verte pero ni siquiera me atrevo a preguntar en qué piso estás…¡ Solo quería ver si te agrado mi regalo!— dijo con sorna Kristen.—Eresss….una…..— gritó eufórica Selene, pero se contuvo a decir una grosería.—¡No les encantó el regalo a ambos !, por cierto mire a tu esposo bajar del hospital tan enfadado, ¿ Que hiciste para que se pusiera de esa manera?— dijo con sarcasmo.—Cuando salga de este maldito lugar, te haré pagar diez veces más el dolor— gruño con los dientes apretados.—¡Naaahh!… Estoy frente al hospital, ven a verme, ¡Quiero ver tu cara ahora mismo!, no fue necesario subir para enterarme que ya no podrás tener hijos en el futuro, ¡es justo, tienes al hombre que quieres a tu lado pero no podrás darle más una familia!.Selene quedó blanca, el mundo a su alrededor se detuvo por unos instantes, pe
Cedric miró atónito a la mujer frente a él, trago nudo ante esa pregunta. Por suerte los últimos dos meses días había investigado el nombre de la mujer y sus datos, pero cada día que pasó junto a esa cama del hospital le había tomado cariño, y aunque sabía perfectamente que era la esposa de Emmett, se negaba a decírselo.—Esposa, te has despertado—dijo Cedric al instante que se acercaba a ella para estampar en sus labios un beso.—¡Yo soy tu esposa!— dijo con incredulidad la joven, pero por más que intento forzar un recuerdo, su cabeza no le mandaba ninguna imagen,—¿Que me sucedió, por que no puedo recordar nada?, ¡ no recuerdo mi nombre !.—Eres Selene…ese es tu nombre, cuando cruzaste la calle un auto se estampó contra tu cuerpo , ya pasaron dos meses, te extrañé mucho — respondía al mismo tiempo que se paseaba por la habitación rogando a Dios que ella no recordara nada.—¡Lo siento!, lo siento mucho —lloro ella de frustración, seguía tan confundida, —No recuerdo nada, ni siquiera
—¿Te irás de nuevo?, ¿ puedo ir contigo?, hace mucho que no salgo de aquí, también me gustaría conocer Seattle — dijo ella con voz suave , pero el hombre frente a ella se negaba por décima vez.—La ciudad es muy ruidosa… te prometo que regresaré en dos días,— respondió el con voz seria, tomó el rostro de la mujer en sus manos y depositó un suave beso en su frente,—Cariño sabes que no puedes venir conmigo .Selene permaneció callada en aquella esquina de la cama. Los últimos cuatro años los había pasado viviendo en un pequeño departamento lejos de la ciudad, para el colmo ni siquiera sabía cual era el nombre del lugar donde vivía , y los vecinos interactuaban muy poco con ella, realmente todos parecían muy extraños.—Está bien — soltó con melancolía,— Te esperare aquí.Cedric asintió, el departamento en Cambridge era lo suficiente seguro para que Selene no escapara, y la primera idea que tuvo fue aislarla de los lugares que conocía para evitar que estos le trajeran recuerdos.Condujo l