Por la forma en que la llama Parrow, sabe que el hombre está sumamente furioso.—¡Lo que me espera!— susurro, retomando su compostura —¡Selene!— Parrow la está llamando y cada vez su voz se escucha más cerca Ella sale del baño, y al verlo de espaldas regañando a los empleados por estar murmurando, se acerca con un temple serio en su rostro.—¿Me llama, señor Parrow?Massimo deja de reprender a los empleados para voltear a mirar a la mujer que lo dejo atado en la barandilla de la terraza y de paso con ganas de sexo.—¡¡Sí!!— afirma a gritos y ella se mantiene serena —¡A mí oficina, ahora!— le grita en toda la cara y ella se aguanta la cóleraAl ingresar a la oficina, escucha como Parrow cierra la puerta de un portazo.—¿Qué desea, jefe?— ella sigue controlando su temperamentoY eso le molesta a Massimo, que ella actúe como si nada.Él se para frente a ella y la mira fulminantemente. Sin embargo, no le reclama por lo que pasó, y eso entro, la inquietud en Selene, siente que algo trama
—Massimo no pierde el tiempo. Aunque no lo acepté, Tatiana siempre le ha gustado, lo que pasa es que él es frío con sus sentimientos. Y creo que esos dos tendrán una seria relación, ya que serán padres— dijo Jorge sin dejar de mirar a la pareja que se está besando, mientras que Selene, siente un fuego ardiente en su corazón, siente esas ganas de ir hacia Tatiana y agarrarla del cabello para que se aleje de MassimoSin embargo, Selene se comporta normal aunque se esté muriendo por dentro. Un mesero se acerca. —bienvenidos— hace una mini reverencia y le entrega a cada uno, una copa de vino Selene se la bebió a fondo y Jorge se percata que le afectó haber visto a Parrow besarse con Tatiana.—¿Estás bien?— pregunta —estoy perfecta, deberíamos bailar, a pesar que es de trabajo, debemos divertirnos un poco— Selene lo agarra de la mano, y lo lleva hacia el centro, para bailar Lo peor de todo es que al pasar otro mesero, ella agarra la copa de vino y la bebió a fondo, por lo que Jorge le d
—tengo calor...— Selene siente que todo le da vueltas, y cada vez su cuerpo se siente más y más caliente sin poderlo controlar—calma, ya casi...Massimo está pensando qué hacer. No puede llevarla a una clínica o hospital, porque claramente la familia Villarreal se daría cuenta y eso sería tener problemas o que quizás piensen que él la drogó.Lo único que se le viene a la cabeza, es llevarla a su apartamento privado, lo cual es loco, ya que él jamás ha llevado a una mujer a ese apartamento, pero no tiene opción.Al llegar a su auto, se acerca Randy.—¿Señor?— le habla, ya que siente temor al ver a Selene en ese estado y no le conviene que su jefe se meta en problemas, serían problemas para él también —necesito que alejes a Tatiana y a Jorge, no quiero que salgan de aquí, no quiero que me vean salir —sí señor —Massimo, ¿Eres tú?— pregunta Selene mirándolo con extrañeza —ven, sube al auto— Massimo la ayuda a subir y le coloca el cinturón de seguridad—señor ¿Seguro que está bien?
Parrow deja caer el vaso de cristal que contiene poco whisky, al suelo.El cigarrillo que estaba a punto de llegar a la colilla, lo deja caer, para tener sus manos libres, tomarla de la cintura con determinación y colocarse de pie.—quiero más de tí— Selene lo empieza a besar y siente su cuerpo arder. Parrow la lanza a la cama con sutileza para luego subirse encima de ella sin aplastarlaSelene aprovecha para enrollar sus piernas en la cintura del cruel hombre, del hombre de sus pesadillas, y Parrow no duda en hacer movimientos exquisitos. Rozar sus intimidades provocando más lujuria mientras se besaban con desesperación.Ella ni siquiera sabe, no tiene idea de lo que está haciendo, así que dejándose llevar por lo que siente, empieza a desnudar a Massimo.—me encanta su abdomen— dice y posa sus manos, para sentir esos cuadritos definidos —Selene, no quiero hacerlo, tú me odias, dijiste que perderías tu virginidad con cualquier hombre que no sea yo, aunque quiero follarte y dejarte si
—¡¡Respóndeme, Massimo!!— Selene, muy enojada, se coloca de pie mientras cubre su cuerpo con la sábana, y justo en ese momento, sintió un dolor en su entrepierna. Con preocupación mira hacia atrás, buscando con desesperación la mancha de sangre en la sábana blanca que confirme que ha perdido su virginidad.—te estás comportando como si hubiera sido lo peor del mundo— Massimo se cruza de brazos, mostrando más los músculos de sus brazos definidos, esos de los que provocan meterle un mordisco, el muy condenado está pasando de guapoSelene lo voltea a mirar, y luego le propina una fuerte bofetada que lo hizo aterrizar, sin embargo, lo que hace él, es tensar su mandíbula y controlar su temperamento para no ser un gruñón con ella.—¡No soy tu burla, maldición! ¿Cómo, carajos llegué aquí?—baja tu tono de voz, porque si sigues así, te juro que seré peor que tú, así que toma asiento y vamos a hablar, agradece que estoy controlando mi demonio interno— Parrow toma asiento, está que estalla, l
—¿Cómo puedes defenderlo, Selene?— Jorge se acerca a ella —Nena conozco a Massimo y es un demente, te has dejado lavar el cerebro por él—¡Cállate Jorge! ¡Padre por favor, no le hagas daño!— súplica Selene, intenta acercarse a Massimo, pero Jorge la agarra y no se lo permite—¿¡Estás ciega Selene!?— la reprende su padre —dime la verdad ¿Abusó de tí?—¡Ya basta con todo esto!— grita Selene, pero un grito a todo pulmón —¡Soy tu padre y me respetas!— ordena Maskyn con determinación —¿Cómo puedes defender a un hombre que te ha humillado como se le ha dado la puta gana? ¿¡Acaso te enseñe eso!?— Maskyn está terriblemente poseído por el diablo —¿Eres ciega? ¿Todas las mujeres Villarreal te han dado consejos? ¿Cómo puedes defender a este miserable?—esto debe de tener una explicación— Interviene Selene y mira que Massimo está intentando respirar—¡Ya investigué!— le grita Maskyn a su hija —al revisar las cámaras de seguridad, observe como el barman estaba drogando tu bebida, Selene. Ya inter
A Massimo lo tienen, detenido en una celda mientras agilizan su caso. Anastasia Parrow, su madre, movió cielo y tierra para poder hablar con él por 5 minutos. Mientras que su esposo espera impaciente junto a su cuñado Leandro, en la sala de espera.—¡Massimo!— lo menciona Anastasia acercándose a él rápidamente—¡Madre!— se conmueve al verlaEl oficial abre la reja y le permite a Anastasia ingresar.—¡¡Te estan culpando de haber abusado de Selene!!—te lo juro madre, no lo hice. Todo es un gran puto mal entendido—¡Todos los medios de comunicación están hablando de esto!—¿¡Qué!? No, no, eso no puede ser posible— Massimo niega con la cabeza Pero lo que recibió fue una fuerte bofetada de su madre. —¡Dijiste que no la ibas a lastimar!— lo señala con furia Massimo hace silencio. —¿Qué cara le voy a dar a sus padres? ¡Le prometí a su madre cuidarla y que tú no le ibas a hacer daño!—¿De verdad creés que abusé de ella?— Massimo le alza la voz a su madre, la cual lo iba abofetear nuevame
Jamás en la vida, Selene le había sacado a su padre en cara el pasado.—Selene...— interviene Johana, ella conoce perfectamente a su esposo Maskyn, y por su silencio, sabe que las palabras de su hija le dolieron. Ya que él se arrepiente de todo el daño que le hizo a su esposa años atrás. Lamentablemente no puede devolver el tiempo para no haberse equivocado tanto—¡Es cierto mamá! Es que mi padre debe entender que todos nos equivocamos— ataca nuevamente Selene —no es que aplauda a Massimo. Estoy dolida con saber que él quiere destruir mi vida, pero más se la destruye él, porque a pesar de todo, no soy tan tonta para permitir que me lastimen tanto, para eso tengo espejos, como el tuyo mamá, todo por lo que tuviste que pasar con mi padre. No quiere decir que mi vida amorosa vaya a ser perfecta, pero sí seré más precavida. Les pido por favor que en mi vida privada no se metan—¡No te permito que hables de esa manera!— Maskyn vuelve a su temperamento infernal —eres mi hija, y no me import