“Orgullosas”
Missie se quedó en Toronto, pero Juanne viajaba cada vez que podía. Lois Vincentes estaba en proceso de expandir sus empresas con sede en el mismo Toronto. La ayuda que le brindó Juanne le dio el empuje que necesitaba y ahora estaba en su mejor momento. El haberse unido a Naty le estaba ayudando a superar su adicción al alcohol y ahora era un hombre renovado con nuevos sueños y viviendo un amor verdadero y únicamente para él.
Ese día Missie no se fue directo al laboratorio de la fundación sino que pasó por la oficina de su padre. Tenía una idea en mente.
–Buenos días –saludó al entrar y como de costumbre se acercó a su padre quien ya estaba de pie esperándola con los brazos abiertos. Le dio un apretado beso en la frente y le dijo:
–Te ves radiante, hija. Ese rostro tan rozagante da envidia. S&iac
“Ya no más”Después de la operación de Elizabeth Leanders, Missie y Juanne se dedicaron a los preparativos para el matrimonio junto a los padres de Missie.Ya casi estaba todo preparado para la boda, a sólo un mes de la misma Missie se fue al rancho, ya que, Juanne aún seguía en la preparación para la entrega anual del ganado en terneros para la cría en Suramérica, mientras tanto Missie se encargaba de los laboratorios junto al profesor Alfred y Andrea.Esa tarde Juanne estaba en su faena cuando le llamaron del hospital psiquiátrico de Toronto para informarle que la señora Helen había sido dada de alta a solicitud de ella misma. Ya tenía más de dos meses recibiendo tratamientos y lo solicitó porque se sentía bien. Tras varios exámenes se constató que bajo tratamiento en casa y revisiones médicas perió
“El juego de los Ninjas”Juanne y los policías fueron hasta el anexo, al tocar a la puerta, Helen salió con la enfermera, ambas fueron interrogadas al igual que los vigilantes que tiene en su puerta, las declaraciones coincidieron todas. Ella sólo Salió a tomar sol en la mañana y según los vigilantes, todos hombres de confianza de Juanne, ella se quedó cercana a la poza todo el tiempo. Luego igual cuando salió a jugar con el niño.Juanne y Missie se pusieron de acuerdo para investigar ellos por su cuenta, mientras tanto hicieron los movimientos necesarios para conseguir los terneritos que faltaban. Con la ayuda de Gordon lograron enviar el pedido a tiempo a Suramérica.A pocos días del matrimonio llegaron los trajes de los novios.Elizabeth revoloteaba dando por toda la casa. Ya caminaba mejor con la prótesis en su pierna.<
“Por todos mis Padres”Tras la sorpresa del traje Ninja de Helen, Juanne y Missie se devolvieron a la casa. Juanne llamó a las autoridades y requisaron de nuevo el anexo donde ella estaba e interrogaron de nuevo a los vigilantes. Todo indicaba que no había nada más allá que un juego de niños. Sin embargo Juanne tomó medidas severas de seguridad en todo el rancho.Missie aún se mantenía inquieta. El niño jugaba en el carrito y ella se fue con él hasta la poza artificial.–Joan, vamos a jugar al ninja. El niño comenzó a correr y a lanzarse en el piso con movimientos torpes por su edad. Missie Reía. Despúes lo detuvo y le dijo–Los ninjas no pelean así. Tú mamá no sabe pelear ninja – Y sus ojos se aguaron ante el rostro tan tierno del niño –. Vamos a ver una película
“El rústico”Juanne miraba con tanto dolor como había quedado el rancho que con tanto esfuerzo junto sus padres y hermanos muertos había levantado. Se tambaleó de dolor.Cuando lograron extinguir la última llama encendida entraron al anexo donde estaban los fuegos artificiales traídos especialmente para esa noche en el matrimonio. Los especialistas recogían todo lo que pudiera ser indicio de un que el fuego había sido provocado. En medio de los escombros y esqueletos de todo lo que había allí estaba el rústico que Joan le había recién comprado. El especialista lo levantó y Juanne se extrañó.–Eso no debería estar aquí –dijo abriendo sus ojos desmesuradamente.–Exactamente aquí estaba el detonante y fue activado desde un radio de unos 400 metros.Juanne se p
“Por los hijos”Nick, el forastero, estaba nervioso desde que se dijo que el rústico de juguete era donde habían puesto e detonante que incendió las cajas que contenían los fuegos artificiales dentro del anexo.–Joven Juanne fui yo quien metió el rústico en el anexo –Había dicho Nick.Para Juanne el golpe fue terrible, al darse cuenta de la inconsciencia de Helen por querer destruir todo lo que él poseía, sin importarle la vida de nadie, pero peor aún la vida de su propio hijo.–¡Qué mujer tan mala! –dijo Juanne.Llamó a Eva nuevamente.–Dígame Joven Juanne –le contestó la mujer–Eva, dígale a la mamá de Helen que la necesitamos aquí, que se preparé que Nick va por ella en este momento.Nick regresó con la
“Infiltrados”Todos los rancheros se unieron al llamado de Gordon y Juanne. Los ranchos, secretamente, estaban siendo custodiados por hombres de las policías privadas infiltrados como cualquier ranchero más los de seguridad de cada rancho.Dos semanas después e l rancho estaba tomando forma nuevamente. Missie junto a Elizabeth se habían encargado de los colores y la decoración interior del rancho, a la fachada no quisieron cambiarle nada.Llegó la hora de despedir a Lorain, quien tenía ya muchos avances en la terapia y había recobrado el habla casi que en su totalidad, sin embargo aún seguía bajo control médico psicológico, ya que el trastorno de culpabilidad es uno de los más difíciles de erradicar del ser humano. Para muchos el más temible y destructor.Estaban preparando el viaje a Viena cuando recibieron
Nick–Nick, no quiero que se estén arriesgando más. Eso es suficiente. Podemos averiguar por cuenta de las autoridades que rancho sería y que se haga el cerco allá. Eso sería lo ideal.–Eso no será suficiente y los vamos a perder otra vez. Déjeme actuar a mi Joven, yo sé cómo hacer las cosas.–Espera y hablamos mañana en la mañana o yo te mandó respuesta con Eva, temprano. Déjame discutirlo con Gordon y otros rancheros cercanos que están involucrados en esto.–Bueno listo joven. Mañana hablamos.Juanne mandó a Eva al anexo de Andrea y Nick temprano, pero cuando ésta regresó le dijo:–Ya el muchacho tomó, el solito, la decisión, se fue a la movida de hoy. Ese fue el mensaje que dejó con la señorita Andrea.–Eva en cuanto lo v
“Cuestión de cotidianidad”Juanne y Missie llegaron al Bar “Mis recuerdos” y todos los recibieron como de costumbre con mucho entusiasmo.Se acercaron varios de los trabajadores y luego hicieron un grupo ameno. Pasado un buen rato llegó Nick el forastero y echándole un ojo afuera señaló a Missie y a Juanne. Los muchachos esperaron un rato y se despidieron de los presentes. El viejo Curry le dio un grito a Nick.–Nick, el patrón ya se va para el rancho, aprovecha esa cola hasta allá –se rió fuerte comentando a la vez –a ver si hoy me libro de tener que llevarte a cuestas y me duermo temprano.Los demás en el bar, le rieron la broma.Nick salió corriendo del baño aún subiéndose el cierre del pantalón.Cuando arrancaron. Missie miró a Nick dudosa.–Nick, ¿eso es verdad