—La inesperada provocación de Teresa me tomó por gran sorpresa. Aunque tengo experiencia en danza, hace muchos años que no bailaba, y en ese momento no tenía ni idea, por dónde empezar. Además, no tengo la rica experiencia en el escenario como Teresa. Cuando estaba sentada en la audiencia, me sentía muy confundida y pensé en subir al escenario para recitar una poesía.

—Pero de repente, Teresa propuso que bailara, lo que me llevó a tener una idea bastante audaz. Recordé la noche de ensayo, la vi bailar en el escenario, una y otra vez, incansablemente. Mientras la veía desde la audiencia, aprendí un poco superficialmente, y resulta que eso me fue muy útil. Espero que este aprendizaje superficial no cause problemas ni afecte a Teresa y a sus compañeros de equipo.

Dicho eso, Yaritza mostró una amplia sonrisa llena de culpa.

En cuanto a la precisión de sus palabras, fue perfecta. En esa competencia de palabras, Teresa nunca fue rival para Yaritza.

El presentador a un lado quedó totalmente