Me encuentro revisando un proyecto que le presentaré mañana a Vladimir, pero no logró concentrarme porque alguien está dedicado a besar mi cuello mientras intenta despojarme de mi blusa.—Te ves muy sexy concentradaReí fuerte —Ya déjame trabajar, Fer.—Mi amor en el último mes no has tenido tiempo para mí. Todo es el trabajo y los niños.—No seas celosito —Me senté en sus piernas y uní mis labios a los suyos en un beso efusivo el cual él me correspondió. —Sabes que tengo muchísimo trabajo Me percate de que resbalan lágrimas de sus ojos y lleve mis manos a sus mejillas.—No llores Fer.Estoy haciendo un gran esfuerzo para no reírme de él. El fin de semana ocurrió lo mismo cuando estábamos en el cine con nuestros hijos y al ver una película el término llorando, Aarón lo consoló diciendo que solamente era un dibujito y no era real.—Mierda —El limpia sus lágrimas con sus manos—Definitivamente me hizo daño la cebolla de la ensalada —Seguramente —Deje un beso en sus labios —Sabes que te
Me encuentro desayunando o más bien estoy tomando un té mientras observó desayunar a mi familia.Siento un inmenso asco al observar la forma en la cual desayuna mi marido como si no hubiera un mañana. No entiendo como puedes comer de esa manera y Aarón es otro atrabancado para desayunar.—Fer tú odias el cereal mi vida.Él ríe —No sé que tiene este pero me fascina Gracias al cielo que va muy seguido al gimnasio porque de lo contrario estaría rodando. Hace más de una semana que come lo que se encuentre y yo siento repulsión al verlo así.Creo que incluso los cachorros mastican mejor que él.Sé que dicen que después del matrimonio los hombres se descuidan y también las mujeres, pero ya es el colmo.Luego de asegurarme que mis pequeños desayunen, estén vestidos y hayan cepillado sus dientes los adentre en la trafi para que los lleve al colegio.—Me encanta— Expresa Vladímir mientras charlamos en mi oficina —Muchas gracias trabajé mucho en ese proyecto —Siempre te he dicho que eres una
Me desperte acelerada y muy agitada, es como si se tratará de una terrible pesadilla, pero al darme cuenta de que me encuentro en la habitación de una clínica me percató de que todo es real. —Mi amor al fin despiertas —Me habla papá mientras toma mi mano —¡Dónde está Fer!—Tranquila por favor, te hará daño alterarte. —No deberías estar conmigo sino con el papá —Se resbalaron un par de lágrimas sobre mis mejillas —No puede ir a la cárcel, él no hizo nada. —¡Belinda, calma o tendrán que sedarte! Negué con la cabeza entre lágrimas —Fernando no irá a prisión. Ya un abogado se está encargando de su caso, él me pidió que me encargué de ti en lo que se resuelve el asunto. —Pero ¿Pasará la noche en ese horrible lugar? —Están investigando, necesito que estés tranquila porque Meg quiere verte. En menos de media hora terminé de vestirme y me dirigí hacia la habitación de la pequeña a quien veo mucho más tranquila. —Mami—Ella extiende sus manos hacia mí y yo me acerqué para dejar un beso
No sé cómo me siento ni que haré fin respecto a la noticia que me acaban de informar.Luego de notificarnos la Doctora nos explicó como debo seguir el embarazo y que debo realizarme controles. Ya conozco esa información porque he llevado dos embarazos.En este instante miles de lágrimas se resbalan sobre mis mejillas mientras hundo mi cabeza en la almohada de mi cama.No puedo evitar sentirme mal, pero no es físico sino emocional.No me siento lista para tener otro bebé y el terror me invade al pensar que me pueda volver a ocurrir lo mismo. No soportaría soportar el dolor de perder a otro hijo.-Bell, amor. -Él lleva su mano a mi cabello -Ya te pedí que me dejes sola, Fernando.-No entiendo por qué no estás feliz. -Él lleva su mano a mi estómago plano -Es la mejor noticia del universo, tendremos otro hijo.-¡Tú nunca me entenderás! ¡Yo no quería otro bebé y no entiendo por qué esas estúpidas pastillas fallaron!.Solamente veo enojó en su mirada lo cual es extraño en el porqué nunca me
Me encuentro abrazada a Fernando quién no deja de besar mis labios acariciar mi cabello.—Te felicito por tus logros, nena, pero creo que deberías dejar la empresa. Nuestra situación esta mucho mejor gracias a ti.Negué con la cabeza —Aún no entro a los seis meses.—Pero no falta demasiado, amor. —Él deja un beso en mi estómago y el bebé comienza a patear.—Allí está mi nena.Reí —Será niño, amor.—¿Apostamos, hermosa?. Yo estoy seguro de que tendremos otra princesa tan hermosa como su mamá. —Él deja besos en mi estómago.—Otro príncipe —Insistí—Faltan tres meses y no decido el nombre.—Me encantaría que se llame como mi padre.Negué con la cabeza —Aarón se llama Alexei y no quiero que mi hijo se llame Fernando.—¿Qué tiene de malo mi nombre?Reí —Bebé tú te llamas Fernando y se llamaba tu padre. No me gusta repetir los nombres.—¿Entonces que sugieres?.—No lo sé, Emiliano.Él ríe y niega con la cabeza —Muy graciosa, muñeca.—Aarón se llama así por un niño que me gustaba.—No me lo re
Me encuentro sentada en el sofá con Fernando abrazando mi cintura.Estamos reunidos con mi padre y nuestra familia debido a que estamos celebrando la futura boda de papá y Catalina. En el lugar también se encuentra su hermano, cuñada y sus sobrinos, solamente falta Emi.No suelo salir de la cama debido a mi estado, pero está vez hice una excepción.—Debes estar aterrada —Ríe maliciosa Mariana refiriéndose a mis bebés —No la pongas peor —La regaña Fernando mientras deja un beso en mi mejilla. —Nuevamente, los felicito —Me dice papá —No puedo creer que muy pronto tendré dos nietos.—Belinda no tienes nada que temer—Me dice Catalina —Te lo digo por experiencia Es verdad que además de Emi ella tuvo otro hijo, pero esté desgraciadamente murió.—Buenas noches —Fuimos interrumpidos cuando llegó Emiliano al lugar.—No te levantes —Me pide cuando se percata de que intente levantarme del sofá y el dejo un beso en mi mejilla. —¿Cómo estás, Fernando?—Muy bien —Percibo la incomodidad entre ambo
Belinda Siento el dolor más inmenso que he sentido en mi vida. Mi respiración está agitada y mi abdomen me duele.Me aferré a la mano de Fernando la cual está entrelazada con la mía.—Mi amor tú puedes hacerlo.Cuándo voltee la vista me percaté de que también Emiliano se encuentra aquí acompañado de mi partera y algunas enfermeras quienes la asisten.—Vamos Bell —Me anima EmilianoEjerzo presión en la mano de Fer y comienzo a pujar con todas mis fuerzas, llevo más de media hora intentándolo sin obtener resultados.Mi presión se subió a las nubes cuando escuche ese disparo, pero gracias a Diosito mi esposo no resultó herido sino Tamara quien recibió un disparo en el pecho el cual fue mortal.De hecho dos policías están esperando a Fer para que de su declaración de los hechos, pero él les aclaro que no se perdería el nacimiento de sus hijos.Salí de mis pensamientos cuando escuche un llanto. En ese instante observe que la partera tomó entre sus brazos a un bebé pequeño y se lo entrego a
Cuando reaccione me percaté de que me encuentro en una habitación pequeña con las paredes de un color gris. Todo el lugar me resulta extraño.Intente moverme, pero no pude hacerlo porque mis muñecas están esposadas en la cama al igual que mis tobillos —¡Ayuda! ¡Por favor! —Grite con todas mis fuerzas—Nadie te escuchará — Ríe un hombre quien sale rumbo del cuarto de baño.Cuando escuche su voz tenía sospechas, pero al mirar su rostro confirmó su identidad.Solloce con fuerza al mirarlo y él simplemente ríe a carcajadas.—¡No! ¡Esto no puede estar pasando!.—Tranquila, chiquita —Diego se acerca a mí llevando sus manos a mis mejillas—Te aseguré que muy pronto volvería por ti—¿Cómo?.—Eres muy ingenua, Belinda. En este país el dinero compra todo. No tienes una idea cuanto disfrute matar al perro de Mario porque el asesino a nuestra beba y comprar a los forenses que lo identificaron fue pan comido. —Él lleva su mano a mi cuello —Durante estos meses te he observado todo el tiempo.—Algo e