Liz.
De un momento a otro decidimos viajar, pero sin Dylan, ya que él se encargará de todo lo que quede pendiente, pensé que al llevar a los niños a que conozcan a Rafael y Samantha todo estaría bien, pero me equivoque. Cuando llegue a casa de Rafael fui a buscar a Samantha para decirle que por un tiempo estaría cerca de ella, pero jamás me imaginé que estaría con Rafael y por tonta me pasan las cosas, me debo imaginar que Rafael se puso furioso porque le arruine el momento o porque pensó que le estaba reclamando y eso ni al caso, jamás tendría celos de esa pareja, Samantha es una chica bonita, simpática y Rafael es un chico genial de buen corazón, ambos se merecen ser felices y yo que pensaba ayudar pero al parecer no podré porque Rafael se desquitó conmigo todo lo que le he hecho sentir durante años y tiene todo el derecho de enojarse.
Dylan.Ya tengo a la soplona de la perfecta, ya que ella estaba trabajando para la D.E.A, maldita mujer no sabes con quién se está metiendo y ahora toda su familia pagara por todo, yo personalmente me encargaré de ella y ya mandé un gran regalito para su familia y que más regalo que de mandarlos al cielo.Los muy hijos de puta de los de la D.E.A, llegaron allanar la casa y a tiempo, Liz se fue con los niños no me gustó la idea que se fuera dónde está viviendo Rafael pero es mi única opción de seguridad para mí familia, ya le avisé a Dominik de todo lo que estamos pasando y le dije que fuera apoyar a Liz con los niños y que no me la dejará sola en ningún momento porque después que me encargue de este trabajo me iré directo con mi familia.
Rafael.He tratado de comunicarme con Dominik, pero él no me quiere recibir llamadas y eso me tiene muy inquieto, me debí imaginar que Liz le contó todo lo que pasó espero que él no tome represalias conmigo porque necesito de su alianza.Dominik ha sido mi ayuda durante estos años, él es como mi Hermano y no quiero que por mí culpa sé arruine todo lo que he logrado.—Contigo quería hablar —hablando del Rey de Roma.—Dominik, hermano que te ha pasado porque no te quieres comunicar conmigo.—Por qué tú hijo de puta corriste a mi hermana y a mis sobrinos a la calle —sabía que era por
—Es Liz —no, Diosito, no quiero que esté momento se arruine.—Cálmate Rafael, no tienes que ponerte mal —la reacción y el gesto de Rafael me preocupa porque eso me dice mucho.—Estoy calmado solo que estoy sorprendido de que ella esté aquí —miente porque su pulso está acelerado y su rostro pálido me dice que está nervioso.—Salgamos y la recibimos juntos —sé que lo que le estoy ofreciendo es una aniquilación, pero tengo que ver que él tenga fuerza de voluntad.Tiene que intentar olvidarla aunque su corazón no quiera o decirle lo que debería hacer, dado que yo tengo una experiencia terrible y reciente. Liz.De un momento a otro decidimos viajar pero sin Dylan, ya que él se encargará de todo lo que quede pendiente, pensé que al llevar a los niños a que conozcan a Rafael y Samantha todo estaría bien, pero me equivoque, cuando llegue a casa de Rafael fui a buscar a Samantha para decirle que por un tiempo estaría cerca de ella, pero jamás me imaginé que estaría con Rafael y por tonta me pasan las cosas, me debo imaginar que Rafael se puso furioso porque le arruine el momento o porque pensó que le estaba reclamando y eso ni al caso, jamás tendría celos de esa pareja. Samantha es una chica bonita, simpática y Rafael es un chico genial de buen corazón, ambos se merecen ser felices y yo que pensaba ayudar, pero al parecer no podré porque Rafael se desquitó conmigo todo lo que lCapítulo 15
—Perdón Samantha, es que Liz tiene graves problemas y yo que no le permití que hablará.—Está bien Rafael, pero después de que solucione los problemas que tiene ella tú y yo hablaremos de lo de nosotros.—Samantha no solo son los problemas que ella tiene, son todo lo que su familia tiene y solo te diré una cosa Samantha lo que te dije esta mañana de lo que pienso de ti y de lo que pasó ayer es toda la verdad, tú eres una chica muy sensual y me has llamado mucha la atención y lo que tenemos que hablar tiene que ser en un lugar especial para los dos —no es que le esté pidiendo matrimonio, pero no voy a negar que una cosa me lleva a la otra.Estoy pensando intentar las cosas con Samantha y espero que no salga las
—Así será jefe, ahora aquí le paso una llamada del encubierto —mi atención esta totalmente en el móvil, lo agarro.—Aló, qué pasó, me tienes buenas noticias, ¿como esta mi esposa y mis hijos?—Jefe, su esposa no está aquí —escucho temblor en su voz—, le explicó, ella vino con sus hijos, pero se tuvo que ir porque tuvo una fuerte discusión con Rafael y ella se fue junto con sus hijos, pero por suerte Dominik vino a tiempo y él se la llevó a un hotel mientras mañana le entregan la casa de seguridad—maldita sea, sabía que no debía dejar que mi Liz se fuera sola con mis hijos, qué le habrá dicho ese bastardo.—Pero maldita sea, dime qu
Daniela.Mi nombre es Daniela y todos me llaman Rosalinda por ser la mera, mera, en mi trabajo, mi trabajo es agente encubierto de la D.E.A. Y me encargo de atrapar a todos los hijos de puta que corrompen este mundo, todos aquellos que contaminan el ambiente, desde pequeña soñé en ser una mujer poderosa y ser alguien que perteneciera a la justicia.Mis misiones son seducir a los traquetos más poderosos y que ellos caigan con mi sensualidad y todo sea por el bien del mundo, me he propuesto limpiar toda esta basura y soy una huevona guerrillera, si me propongo que alguien duro caiga es porque va a caer, para mañana tengo una invitación de una gran fiesta que ahí estarán los más duros de la organización, no saben lo que les espera, tengo un plan preparado y estoy dispuesta a seducir al señor de señores
—Buenas noches, señorita, disculpe que la interrumpa, pero me tendré que robar a esta bella dama —la mujer extravagante se ríe y levanta la ceja.—Gracias por lo de bella.—Disculpe señorita, pero no es que sea grosero, dado que a la única persona que le dije es a mi novia Samantha —¡boom!, y está que se le cae la cara de vergüenza, pero en eso yo no tengo la culpa quien la manda que tenga una autoestima alto y que se crea la mujer más perfecta en el mundo.—Adiós señorita Rosalinda, la conversación pendiente la dejaremos para otro día —ese nombre me parece muy conocido, pero realmente no sé dónde, estaré pensando dónde.Último capítulo