Incluso después de que Howard se fuera, Sharon no era capaz de calmarse.

No estaba enojada porque Howard investigara su enfermedad, sino por el problema de su madre.

A pesar de que tenía claro que había heredado el gen de su madre, todavía era perfectamente normal en ese momento y no estaba en lo más mínimo preocupada de que Howard estuviera buscando información sobre su enfermedad. Sin embargo, se había excedido al hablar de la enfermedad de su madre.

Sebastian entró corriendo en ese momento y preguntó: "Mami, huelo el pescado a la parrilla. ¿Podemos comer ahora?".

"Solo dame unos minutos más. ¿No se supone que deberías estar pescando?". Cuando su hijo corrió a la cocina, ella reprimió todos los pensamientos amargos en su mente.

Sebastian suspiró desganado y dijo: "Quizás el gerente Weiss tenía razón. No hay pescado en este momento. Tenemos que esperar hasta la noche, ya que es el mejor momento para pescar". Él no había podido pescar ni un solo pez en todo ese tiempo.

"Me sient