"He dicho que ella no es la única que puede darte un hijo. Hay muchas mujeres que pueden darte uno"."Ella es la única persona que quiero que me dé un hijo. ¡Nadie más tiene derecho a dar a luz a mis hijos!". Dayton exudaba una fría y opresora aura.Hayley podía percibir su rabia, así que añadió: "¿Y si no consigue quedarse con su hijo?"."¡Cierra tu despreciable boca! ¡Seguro que podrá dar a luz al niño sin problemas!", gritó Dayton con frialdad.Hayley notó la expresión rígida y enfurecida del rostro de él. Se rio burlonamente y dijo: "Por supuesto, rezaré para que consiga dar a luz al niño sin problemas".Después de hablar, se levantó y dijo: "Se hace tarde, así que me voy a dormir. Será mejor que la vigiles de cerca para evitar cualquier complicación con su embarazo".Dayton la ignoró. Cuando ella se fue, él se quedó sentado en el sofá sin moverse.¡El niño que les pertenecía a él y a Quincy debía nacer sano y salvo!Mientras Quincy estaba sumida en su sueño, sintió de pron
"Shar, vuelve después de asistir a la boda, ¿de acuerdo?", dijo Quincy mientras sostenía la mano de Sharon. No quería que se fuera tan pronto. "Sí, vendré a hacerte compañía si estoy libre". Ella pudo darse cuenta de que la condición de Quincy estaba mejorando gradualmente. Además, la boda de Eugene iba a celebrarse pronto. Podía volver sin preocupaciones. Quincy se quedó al lado del coche mientras charlaba con Sharon. Dayton las miraba desde la distancia. No había nadie más junto a ellos. Quincy bajó la voz y le dijo: "No te olvides de lo que me prometiste. Será más conveniente que investigues el accidente de coche cuando estés de vuelta en casa". Sharon sabía que Quincy se refería a su petición de que la ayudara a averiguar la verdad sobre el accidente de coche de sus padres. Una complicada combinación de emociones bañó su mirada. En realidad, ella no necesitaba investigar en absoluto. Sabía que Dayton era quien estaba detrás de todo. Sin embargo... No podía decírsel
"¿No tienen una hija? Su hija es bastante grande. No creo que sea tan simple como reavivar un romance pasado". "Debe serlo. Si no, ¿por qué el presidente Eugene se casaría con ella después de divorciarse?". "Ains, tal vez el primer amor de cada hombre siempre será el que anhelan". Los invitados seguían murmurando sobre ambos. Sharon estaba ayudando en la sala de maquillaje. Después de trabajar en el maquillaje de Fern durante casi medio día, finalmente terminó de maquillarla. Fern también se había puesto el vestido de novia. "Cuñada, debo admitir que hoy estás realmente muy guapa. Si yo fuera un hombre, mi corazón palpitaría por ti", exclamó Sharon. "Estás exagerando". Fern se rio de sus ocurrencias. "No estoy exagerando; te estoy diciendo la verdad. Mi hermano tiene buen ojo, y el vestido de novia que diseñó para ti se ve muy bien". Si Sharon decía que se veía muy bien, debía verse realmente increíble. "Se ha gastado demasiado en él". Fern pensó que con un ve
Fern perdió el aliento cuando él la besó. Lo apartó con fuerza y dijo: "Me estás arruinando el labial". Eugene se quedó mirando a los labios de la mujer, los cuales estaban pintados con lápiz labial. Le habló en voz baja: "Te ayudaré a ponértelo de nuevo". Ella lo miró con desconfianza. "¿Sabes cómo hacerlo?". Él negó con la cabeza con sinceridad y dijo: "No, pero no debería ser una tarea difícil". Después de hablar, tomó el lápiz de labios de la mesa del tocador y se dispuso a ayudarla a retocar su maquillaje. Fern creyó en él y se quedó de pie sin moverse para dejar que le aplicara el lápiz de labios. Eugene la miró fijamente a los labios como si estuviera a punto de firmar un contrato de más de cien millones de dólares. Utilizó el lápiz de labios para delinear meticulosamente la forma de los labios de su mujer. Luego aplicó el lápiz labial en los labios con cuidado. "¿Has terminado?". Ella quiso mirar su reflejo en el espejo. "Pronto habré terminado. No te mue
Fiona era la que acababa de gritar. Estaba empujando al Viejo Amo, quien estaba sentado en su silla de ruedas, hacia ellos.Fern sabía que al Viejo Amo no le agradaba ella. Siempre había estado en contra de que Eugene y ella se juntaran. ¿Estaba allí para impedir su matrimonio? Eugene frunció el ceño al ver la aparición de su abuelo.Antes de la boda, había invitado a su abuelo a asistir, pero el Viejo Amo no le respondió. Pensó que el Viejo Amo no asistiría a la ceremonia. ¿Se había presentado de repente para impedir que se casara con Fern? Eugene tomó la mano de Fern para darle fuerza y hacerle saber que definitivamente completaría la ceremonia con ella sin importar lo que el viejo dijera. "El Viejo Amo Newton está aquí". "He escuchado que el Viejo Amo no aprueba esta boda. El presidente Eugene fue el que insistió en casarse con esta mujer a la que no podía olvidar". "¿Significa esto que el Viejo Amo está aquí para detener su boda?". Los invitados bajaron la ca
En ese momento, la atención de todos se centró en el Viejo Amo. El Viejo Amo todavía tenía una expresión irritada y rígida en su rostro. Parecía molesto. "Fernie ya te ha llamado su abuelo. Tienes que mostrar respeto a tu nieta política delante de tanta gente", le susurró Eugene al oído al Viejo Amo mientras se ponía a su lado. El Viejo Amo lo miró de reojo y resopló. "¿He permitido que se dirija a mí de esa manera?". "Ya está aquí para asistir a nuestra boda. Eso significa que la has aceptado. ¿No debería ella dirigirse a ti de esa manera?", preguntó Eugene con una sonrisa. El Viejo Amo miró a Eugene, quien estaba siendo amable y cortés con él. Resopló. Sabía que ese sinvergüenza solo hablaba con un aire tan digno para que se quedara. Rue se acercó y tomó la mano del Viejo Amo. "Bisabuelo, me molestaré mucho si no te quedas". Luego hizo un mohín y le mostró una expresión triste. El Viejo Amo los miró. Sabía que le estaría faltando al respeto a Eugene si se iba en
El Viejo Amo fue llevado a la sala de emergencias. Todos lo esperaban en el pasillo. Fern seguía vestida con el traje de novia cuando acompañó a Eugene al hospital. El Viejo Amo se desmayó durante su ceremonia de boda. Era lógico que lo acompañara.También se presentaron en el hospital algunos tíos y tías de la familia Newton. Miraron la puerta bien cerrada de la sala de urgencias y luego a Fern, quien seguía vestida con el lujoso traje de novia. Uno de ellos no pudo evitar hablar: "No es de extrañar que haya escuchado que al Viejo Amo siempre le ha caído mal en el pasado. Esta es la razón. Ella es un mal presagio". "Yo también he escuchado eso. El Viejo Amo piensa que no es una buena mujer. No es un buen partido para Eugene, pero Eugene no lo escuchó e insistió en casarse con ella". "Parece una seductora. De lo contrario, no habría sido capaz de encantar a Eugene hasta este punto". "Creo que el Viejo Amo no la aceptó realmente. Simplemente tenía miedo de que le pasara
Eugene vio al Viejo Amo tumbado en la cama tras entrar en la sala de urgencias. Tenía un respirador que le cubría la nariz y la boca, pero jadeaba con fuerza. Parecía estar en estado crítico."¡Abuelo!". Eugene se acercó unos pasos y tomó la mano del anciano con fuerza. Una sensación de abatimiento le envolvió el pecho. El Viejo Amo Newton fijó su turbia mirada en su nieto. Le sujetó la mano con todas sus fuerzas. Sus labios temblaban mientras hablaba: "Eugene...". Lo había estado esperando. "Abuelo, soy yo. Los médicos te van a tratar. Te pondrás bien". El Viejo Amo comprendía bien su propia situación. "Entiendo mi cuerpo mejor que ellos. Escúchame... Después de que yo fallezca, debes cuidar de la casa de los Newton...". Cuanto más hablaba, más empezaba a jadear erráticamente. El corazón de Eugene se estremeció dolorosamente. "¿Qué tonterías estás diciendo? ¡No te va a pasar nada!". "¿Has escuchado lo que he dicho?". El Viejo Amo le sujetó la mano con fuerza. Estaba pe