”Tienes razón". Fern le devolvió la sonrisa a él.

Mientras hablaban, Parker y Yuki se acercaron a buscar a Jeremy.

"Jerry, ¿estás bien? ¿Escuché que te lastimaste la mano?". Cuando Yuki vio que el brazo de Jeremy en verdad estaba enyesado, ignoró por completo el hecho de que la había enviado de regreso al centro de detención y sintió pena por él.

"¿Te rompiste el brazo? ¿Fue por Fern?". La joven vio que Fern estaba justo al lado de él y su ira salió al exterior. "¡Maldita rata! Primero, me lastimaste, y ahora, lastimaste a Jerry. ¡¿Por qué no te pierdes ya?!".

"Yuki, cuida tus modales", le gruñó Parker a su hija.

Yuki infló los cachetes y respondió: "¿Acaso me equivoco? ¡Eso es exactamente lo que ella es!".

Jeremy frunció el ceño y estaba a punto de decir algo cuando Fern habló primero con una mirada seria en su rostro: "No lo soy, y no le hice daño a nadie. Te enviaron al centro de detención por tus acciones, así que deja de culparme por eso. ¡Tienes que hacer algo con tu tempe