Eugene se tomó su tiempo en responder. Luego de tomar un sorbo de su vino y revolver juguetonamente el vino en su copa, finalmente respondió con una sola palabra: "Sí".Ella sabía que Eugene no era una buena persona. ¡No podía esperar nada bueno de él!La mirada de Eugene se posó en Fern una vez más. Estaba tratando de adivinar qué pasaba por la mente de la mujer. '¿Estará dispuesta a renunciar a su hija a cambio de su supuesta libertad?'."Dame el bolígrafo". Fern finalmente se decidió.Eugene sintió que se le encogió el corazón mientras la miraba con frialdad. ¡No podía creer que ella decidiera firmar el documento, después de todo!"¿Tantas ganas tienes de alejarte de mí? ¿De verdad no puedes esperar a sacarme de tu vida?", preguntó el hombre con los dientes apretados. ¡Él estaba luchando internamente, y su mirada fría parecía capaz de dejarla sin aliento!"Hay algunas cosas que prefiero no responder", dijo Fern.'¿Por qué se molesta en preguntarme esas cosas?'.Ella no creía
Los pedazos de vidrio roto cortaron la mano de Eugene, y su sangre se mezcló con el vino a medida que escurría por su brazo. Parecía no tener sentimientos o siquiera sentir dolor mientras se quedaba mirando los cristales rotos en el suelo.La secretaria, Sydney, entró y vio la escena. Ella gritó: "¡Dios mío, presidente Eugene, su mano está sangrando!".Tan pronto vio esto, la mujer se dio la vuelta para buscar el botiquín de primeros auxilios. Lo encontró rápidamente, ya que, al ser su secretaria, sabía dónde estaba todo en la oficina.Eugene se recostó contra el sofá y permitió que la sangre fluyera de su mano. Él no reaccionó.Sydney se acercó con el botiquín de primeros auxilios y volvió a ver los pedazos de vidrio rotos. "¿Cómo se rompió la copa?".Él no dijo nada, como si no la hubiera oído.Sydney sabía que Fern acababa de irse. Además, había escuchado de Wyatt que el presidente Eugene quería cancelar su contrato con Fern. '¿Acaso Fern lo hizo enojar?'.Ella no siguió mole
Eugene estalló en carcajadas de repente, y sus ojos tenían una mirada burlona. "Si es verdad que soy tan bueno, ella no habría dicho que me odia. No estaría tan apresurada a dejarme".Sydney podía sentir el alcohol en el aliento del hombre. Parecía que sí estaba un poco borracho. De lo contrario, él no le habría dicho todas estas cosas. Durante todo el tiempo que lo conocía, él nunca le había siquiera mencionado sus sentimientos personales a sus empleados."¿Se refiere a la señorita Thompson?", preguntó Sydney con cautela. Sin embargo, él permaneció apoyado en el sofá en silencio, por lo que ella no estaba segura de que Eugene la hubiera escuchado.Ella no le hizo más preguntas. Esperó un rato y lo miró luego de que pasara un rato en silencio, y entonces se dio cuenta de que sus ojos estaban cerrados. '¿Acaso se quedó dormido o solo está borracho?'."¿Presidente Eugene?", exclamó la mujer en voz baja. Él no reaccionó. Entonces, lo escuchó respirar profundamente. 'Parece que ambas c
Cuando Rue la alcanzó, un Bentley negro llegó a la casa. Era el coche de Eugene.Fern vio el número de matrícula del coche con el que estaba muy familiarizada y sintió que se le encogía el corazón. No esperaba que Eugene regresara a esa hora.Tan pronto se bajó del coche, Eugene notó que Fern estaba sacando su equipaje y que estaba a punto de irse. Mientras tanto, su hija iba corriendo detrás de ella desde adentro de la casa.Rue tiró de la mano de su madre y la miró con sus ojos oscuros. Ella dijo ansiosamente: "Mami, ¿te vas a llevar todas tus cosas? ¿Ya no vas a volver?".Aunque Fern no le había dicho la verdad, e incluso había usado su carrera como excusa, Rue seguía siendo una niña brillante. Se dio cuenta de que su madre había empacado su equipaje de manera diferente a como solía hacerlo, por lo que no pudo evitar sentir que algo andaba mal.Fern bajó la cabeza y miró los inocentes ojos oscuros de su hija. De repente, se atragantó y no se atrevió a mentirle a Rue. Pero cuand
Eugene se acercó y cargó a su hija, la cual estaba deshecha en llanto. Él le dio unas palmaditas en la espalda y la consoló suavemente, diciendo: "¿Por qué lloras, tontita? Tu mamá dijo que no te dejará. Ella solo... se va a trabajar".“Pero ella se llevó todas sus cosas, solo dejó lo que no quiere. Hasta dijo que ya no viviría más aquí. Buaa…”. La pequeña sintió que su madre la había abandonado.Las pupilas de Eugene se encogieron cuando escuchó esto. ‘¿Dejó lo que no quiere?’, pensó.'Bueno, supongo que es así. No nos ve como su familia, ¡y definitivamente no nos quiere!'.Fern aún tenía que encontrar un lugar para vivir, por lo que planeaba quedarse en un hotel por el momento.Cuando llegó al hotel y se bajó del coche, Jeremy se bajó de un coche que iba justo detrás de ella."Tú... ¿No se supone que deberías estar en el hospital? ¿Por qué te dieron de alta tan pronto?". Ella lo miró con asombro.Jeremy también llevaba un tapabocas y un par de gafas de sol que cubrían todo su
Jeremy tenía más experiencia que Fern, y además era un actor de primera categoría. No era posible que desconociera las reglas tácitas de la industria. '¿Cómo puede ser tan audaz como para llevarme a su casa e incluso sugerir que me quede con él?'.Jeremy esbozó una sonrisa amable, puso su mano sobre el hombro de Fern y dijo: "Si se difunde la noticia, que así sea. Si los paparazzi nos toman fotos, entonces solo debemos admitir que nos quedamos juntos".Si no fuera por la expresión juguetona en el rostro del hombre, Fern habría jurado que estaba tan loco que ni siquiera le importaba destruir su propio futuro."Puede que estés bien con eso, pero yo no. Si eso llegase a pasar, ¡tus fans me comerían viva!". Fern podía imaginar lo aterrador que sería esto."¿Puedes dejar de pensar tanto las cosas? Nuestros fanáticos ya sospechan que somos una pareja. Si descubren que estamos viviendo juntos, ¿no estaríamos cumpliendo sus fantasías?". Jeremy todavía estaba hablando con una sonrisa."Eso
"¿Oh? ¿En serio?". Fern se quedó pensando en esto por un rato, pero al final no lo encontró raro. ‘Siendo soltero, no es tan raro que no haya traído a ninguna otra mujer a casa’."¡Así es! Entonces, esto debe significar que usted es la novia de nuestro Joven Amo, ¿verdad?", preguntó el tío Brown con una sonrisa de oreja a oreja.Fern agitó su mano. "Noo, para nada. Por favor, no se haga la idea equivocada. Solo somos amigos"."¿Amigos? Entonces me parece que son el tipo de amigos que pronto se convertirán en pareja".Fern dejó caer su cabeza sobre sus manos con impotencia. 'Parece que el tío Brown adora balbucear...'."Déjeme explicarle, nuestro Joven Amo siempre ha sido una persona muy correcta y juiciosa. Nunca ha estado con mujeres frívolas a su lado. Siempre es leal en sus relaciones. Y una vez que pone sus ojos en alguien, esa persona será la única en su mente. Entonces, le pido que trate bien a nuestro Joven Amo y no hiera sus sentimientos, ¿de acuerdo?"."Ajá…". Fern lo en
Fern lo miró a los ojos y no le respondió. En cambio, inclinó la cabeza y lo miró con una expresión de sospecha. Mientras golpeteaba con los dedos la mesa, preguntó con desconcierto: “Primero haces que me quedé en tu casa, después quieres que me una a tu agencia. ¿Qué estás tramando?".Ambos eran adultos y sabían que el mundo no funcionaba de manera tan sencilla, sobre todo considerando que ambos estaban en la industria del entretenimiento. Nadie le ofrecería tanta ayuda sin esperar nada a cambio.Fern ya había cancelado su contrato con Eugene, lo que significaba que había perdido a su mayor patrocinador. No estaba segura de que lograría conseguir trabajos en el futuro.Ni siquiera había podido encontrar un lugar para quedarse. ‘¿Por qué ayudaría a alguien sin nada a su nombre como yo?’.'¿Acaso es verdad lo que decía Eugene? ¿Estaba tratando de aprovecharse de mi situación para acercarse a mí?’.Era como si Jeremy le hubiera leído los pensamientos. De repente, sonrió y se inclinó