RogelRetomamos el camino, me la he pasado toda la noche mirando el paisaje y reflexionando en que le diré a Sahar. Puedo crear tantos escenarios en mi cabeza, tan variados en su respuesta, en sus gestos. Uno de los que más me gusta, es que se gire hacia mí al decir su nombre y me sonría, para luego correr a mis brazos. En donde la recibiría al estilo de una película romántica, alzándola en mis brazos para luego acercarla a mis labios y al fin besarla. Tomar sus labios sin que nada ni nadie nos detenga, acariciar sus cabellos y sentir su aroma. Creo que mejor detengo mis pensamientos, aquí no hay baño para resolver el problema si se alza la carpa del circo. Me rio para mí mismo, esta mujer me ha vuelto un descarado.Avanzamos sin problema, gracias al mapa que lleva Maciel hasta la próxima gasolinera, donde justo a unos metros hay un motel. Luego de recargar combustible, nos dirigimos al lugar, en donde al llegar a la recepción le preguntamos a una señora mayor por la descripción de Sah
SaharAbro mis ojos y no reconozco dónde estoy, me incorporo con calma mientras observo todo. No hay nadie conmigo, trato de escuchar el exterior, pero hay total silencio. La oscuridad me cubre, pero pronto mis ojos se adaptan para dejarme percibir algo. Me observo y tengo puesto un pijama, si esta fuese la casa de mi tío u otro lugar donde me tuviesen prisionera de seguro no perderían su tiempo vistiéndome. Me muevo al borde de la cama y coloco mis pies en la alfombra, es una habitación bastante espaciosa, al menos eso puedo reconocer.De repente las imágenes se agolpaban en mi cerebro, había olvidado que lo último que vi ayer fueron esos ojos marrones. Estoy inquieta con esto, pues quizás fue una ilusión.“Me pregunto sí, ¿realmente pudo haber aparecido por mí?”Me muevo hacia el gran ventanal que hay, me siento algo mareada, pero logro llegar y apartó un poco la cortina, la luz me ciega por un momento. Es normal, siempre me pasa cuando paso de la oscuridad a la claridad acabada de d
SaharCuando mi familia me vio descender las escaleras se abalanzaron a mis brazos, sonriendo las abrace a ambas, era un alivio tan grande verlas a salvo. Y lo mejor, era volver a comer comida hecha por mi madre, sentada en una mesa enorme, llena de gente buena y querida.—Sahar… —Mire al lugar de donde me llamaron—. Es agradable ver que puedes sonreír de esa manera. Me alegro mucho de que te veas tan libre.—Gracias, Fernando, yo también estoy contenta de volver a mostrar los dientes. —Todos rieron en la mesa—. Lo que más feliz me hace, es que mi familia está bien y eso se lo debo a ustedes, así que gracias a los cuatro por esto.—¡Pfttt! No hicimos nada.—No tienes que agradecer.—Amiga, todo está bien, era nuestro deber.Ro solo negó, lo cual me hizo reír.—Igual, es algo que me gustaría hacer de la forma correcta.Me levanto tomando a mi hermana y nos ponemos al lado de mi madre. Las tres, colocamos la mano izquierda sobre la derecha en el pecho, inclinamos nuestras cabezas y damos
SaharLos días comenzaron a pasar, el trabajo en el lugar era fuerte, pero lo adoraba porque estaba produciendo con mis manos. Sí, trabajo, al principio mi novio se negó, pero al final tuvo que ceder. Y debo decir, que ahora entendía la felicidad de mi familia al estar aquí, era libertad y pura pasión por lo que hacíamos.Me encantaban los caballos, así que Ro me permitió empaparme en todo lo que tenía que ver con ellos y ayudar en el establo. Al principio tuve que insistir para que me dejara, mas, lo logré al final. En cuanto a los horarios en que podía verlo, pues pocas veces lo veía salir de su despacho, tenía planes fijos para eso, a no ser que fuese por una necesidad, no los rompía. Los amigos siempre estaban asistiéndolo y los trabajadores de la finca eran muy leales a él. A veces me preguntaba cómo podía un guardaespaldas tener semejante sitio, debe ser un hijo ilegítimo. No es broma, esto es inmenso, hasta un lago tiene, los campos para cabalgar son enormes. Animales de varios
SaharTomé rumbo a las caballerizas, allí preparé un caballo y me fui a cabalgar, necesitaba que el viento golpeara mi cara. Bueno, la golpeo demasiado, tanto que no vi una rama y me caí estrepitosamente del caballo. Sé que golpeé fuertemente mi cabeza, sentí algo caliente cayendo por mi frente, pasé la mano y al mirar percibí sangre. Me viré boca arriba y exhalé con cansancio, incluso me reí de mi suerte.El aire movía las hojas de los árboles que me rodeaban, me pareció un escenario tan pacífico que no tenía deseos de levantarme. Solo un pensamiento lleno mi cabeza, todos mis recuerdos pasaron ante mí y no iba a morir. Supongo que mi conciencia se activó y esa fue su manera de demostrarme, que no tenía derecho a sentirme herida. Porque al final, quien era más mentiroso, él o yo. Quizás deba pedirle disculpas a Maciel por reclamarle cuando he pecado igual.Cierro mis ojos y respiro fuerte, siento algo en mi rostro y veo que es el caballo, había vuelto a mi lado. Al verme acostada se
SaharDe repente sus ojos color chocolate se fijaron en los míos y tragué en seco, mientras apartaba la mirada. Dolía, era muy difícil esconder tanta confusión y rabia. Como pude retire mi mano de las suyas, el contacto con él no era nada bueno, no me dejaba pensar con claridad. El solo tener su aura rodeándome era suficiente para que mi mente perdiera todo sentido de realidad y dejara a mi corazón ganar la batalla.Sentí que se levantó despacio y no me miro, de reojo lo vi salir para luego regresar en compañía del doctor. El cual sonrío al verme despierta o al menos lo vi que sentía alivio. Me atendió muy bien, siempre atento a como me sentía, si veía doble y cosas así para estar seguro de mi recuperación.La verdad sea dicha, no le estaba prestando mucha atención, sin querer mis ojos buscaban a Ro quien tenía la mirada fija en el suelo. Eso me molestaba, pero a la vez me decía que para qué lo quería viéndome cuando estaba tan molesta con su engaño. A veces ni yo me entiendo, debo de
Rogel Estos días han sido maravillosos estando con ella, no voy a mentir en que he tenido que aguantar mis deseos, pero de verdad quiero esperar a que esté lista. No voy a forzar esto después de haber logrado al fin su aceptación. Aunque hay algo que me preocupa y es que debo contarle la verdad de nuestra relación. De lo cual no tengo ni la menor idea de cómo hacerlo. Nada más espero que no me explote en la cara todo este asunto, porque no sé qué haré si pierdo a Sahar. Estoy tan enamorado de ella que quisiera saltar todos estos estados de noviazgo y citas para hacerla nuevamente mi esposa. Pero como decía mi abuelo, la paciencia es una de las hermosas virtudes que debes poseer. Lo cual estoy intentando con todas mis fuerzas, como mismo también estoy tratando de que no se entere por nadie más quien soy, pero parece una misión imposible. Como el otro día que mientras estábamos en los establos comenzó a pedirme que la dejara trabajar en ellos, sin embargo, me negaba; no la quería rodea
RogelNo me hablo en ningún momento, en el camino me llegó un mensaje al teléfono, como lo tenía en modo silencioso, ella no lo escucho. Al leerlo, era Maciel diciéndome que me confiese, fue entonces cuando todo encajo, mi pitufa lo sabía. Lo que tanto quise evitar paso y me hizo sentir culpable, su caída del caballo fue mi culpa. Debíamos hablar, tenía que explicarle que nada de esto fue intencional, que todo fue en parte para protegerla. Por eso me desvió del camino y la llevo a un lugar que me gusta mucho, es un sitio muy relajante. Está tan metida en sus pensamientos que ni cuenta se da hasta que me detengo.Le pregunto si actúa así porque ya lo sabe y sus gestos me lo confirman. No sé cuánto tiempo estuvimos hablando, dando explicaciones, contándole mis razones y debatiendo lo pasado. El hecho es, que al final mi chica me ha dejado. Simplemente, termino todo, como si fuese nada, ella solo me dejo libre y herido. Lo acepte o me hice el que lo acepte, porque en realidad, estoy dest