Capítulo 1

"El silencio es la conversación de las personas que se quieren. Lo que cuenta no es lo que se dice, si no lo que es necesario".

-Albert Camus

Fecha 21-Agosto-2020

Keisy

Maya Fox - desaparecida el 20 de agosto -

Una desaparición más en el pueblo de Wellsbury, la gente ya no salía después de las 6 de la tarde, ya que últimamente había desapariciones sin explicación alguna.

La gente se volvió paranoica cuando la primera víctima apareció afuera de la iglesia de Wellsbury.

Y esa no fue la peor parte, la gente le temía a las calles de Wellsbury, a la iglesia la catalogaban la iglesia maldita, aunque yo estoy segura que estas desapariciones tienen una explicación.

Siempre hay que recordar que los monstruos tienen vecinos y las personas se disfrazan de personas nobles, cuando en realidad la gente no lo es.

-ATENCIÓN -

NO ENTREN AL BOSQUE DESPUÉS DE LAS 6P.M.

NO LLEGAR AL RÍO, ES PELIGROSO.

NO IR SOLA

Y aunque las indicaciones dicen que no vaya, hace un año llevo intentando llegar al río.

Aunque cuando estoy apunto de llegar parece que te regresa al inicio y eso más de una vez me a frustrado.

Hoy cuando llegue al bosque, estaba muy raro.

Cuando entré sentí mucho frío, más de lo habitual aquí en Wellsbury, seguí caminando hasta que escuché un ruido atrás de mi.

Lo ignore y seguí caminando.

De nuevo ese ruido.

Trate de seguir pero de nuevo ese ruido, aunque está vez era diferente.

-Ya sal de hay, me fastidia tu torpeza-.Dije molesta.

No era necesario que volteara para saber de quién se trataba.

Era Rhett, mi vecino de a lado, el era todo lo contrario a mi, era sociable, tenia mucha confianza de si mismo, yo era muy linda pero mi personalidad no ayudaba mucho.

-¿Qué haces aquí?-. Dije en tono serio.

-¿Tu que haces aquí? -. Dijo cruzándose de brazos.

-Eso no te importa, respóndeme -. Me puse las manos en la cadera.

-Si que eres odiosa, solo quería saber a dónde ibas siempre a esta hora-. Lo fulminé con la mirada y el me reto con la mirada.

-Pues ya viste a donde voy así que adiós-.le dije seria, empecé a caminar hacia el río dejándolo atrás.

Empecé a correr para perderlo de vista, pero fue demasiado tarde, sentí que una mano me tocó el brazo.

-Espera, espera...te acompañó -. Me dijo con la respiración agitada.

Rodee los ojos y antes de decirle algo se volvió a escuchar ese ruido desesperante, lo ignoré ya que parecía no afectarle a él.

-Bien, como quieras -. Me dí la vuelta y seguí caminando, la verdad venir a este bosque me tranquilizaba, el olor a madera y a vegetación era algo que me encantaba, pero ahora mismo solo quería irme a mi casa ya que un poste de 1.85 estaba detrás de mí tarareando una canción de Oasis, el silencio no era incómodo, era tranquilo, algo que me asustó ya que yo no solía salir con nadie y eso me puso un poco nerviosa así que decidí romper el silencio.

-No creí que escucharas ese tipo de música-.dije abrazándome a mi misma, estaba haciendo más frío.

-No sabes nada de mi -. Si lo sabía, pero no lo admitiría en voz alta.

-Pues no es algo que me importe -. Dije elevando mis hombros, restándole importancia.

-Eres misteriosa, me agradas -. Dijo elevando la comisura de sus labios

-Pues tu a mi no, hablas mucho-. Dije soltando una pequeña risa.

-Sabía que si sonreías-. Me dijo deteniéndose a amarrarse las cuerdas de los tenis.

¿Porque sonreí?

-Pues quizás soy un extrarrestre y tu no lo sepas-. Lo mire dándole un pequeño golpe en la frente.

El soltó una pequeña risa mostrando su perfecta sonrisa.

-¿Conoces The fray? -. Dije jugando con mis manos.

Una costumbre que tenía, cada que estaba nerviosa.

-Claro, es una de mis bandas favoritas -. Sonreí porque también era una de mis bandas favoritas.

-También es una de mis bandas favoritas -. Respondí cortante.

-Eres bipolar -. Dijo mirándome de arriba hacia abajo.

-Tu eres estresante -. Me encogí de hombros .

-¿Oye te puedo preguntar algo?-. Dijo mirándome serio

-Ya estás preguntando -. Dije restándole importancia

-¿Por qué estas aquí?, es peligroso y no quiero que te pase nada-.dijo entre risas nerviosas y pude notar como se sonrojaba.

-La verdad no creo que desaparezcan sin ningún motivo -. Empecé a caminar un poco más rápido ya que vi algo a un lado de una cabaña, Rhett empezó a seguirme pero cuando llegue no había nada ni rastro de que alguien estuvo ahí.

-También pienso lo mismo, no es casualidad que haya tantas desapariciones sin una razón -. Me dijo rascándose el puente de su nariz

-Pero estoy aquí porque siempre he querido llegar al río pero no he podido llegar-. Dije triste, tenía 1 año intentando y no había tenido suerte, siempre salía con un moretón que no sabía dónde me los hacía.

-Si quieres puedo acompañarte, creo que también quiero conocerlo-. Voltee a verlo y estaba sonrojado.

-Bien, como quieras-. Dije forzando una sonrisa y seguí con mi caminata pero como la suerte no estaba de mi lado tropecé con una rama que estaba en el suelo.

«De ahora en adelante eres mía pequeña»

De nuevo esa horrible voz en mi interior que me atormentaba desde años.

-Maldición-. Dije poniéndome de pie

Rhett comenzó a reírse al momento mientras yo trataba de recomponerme del golpe.

Cuando me puse de pie, pero sentí un temblor y ambos caímos por un hueco.

Cuando levanté la mirada, me quedé fascinada.

-Wow-.Dijo Rhett con cara de asombro.

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