—¿No es hermoso? —habló Gabriela bajándose del lomo del lobo de Jose.
Jose se transformó, apareció detrás de Gabriela y la abrazó por la espalda haciéndola sonreír.
—No conocía esta parte de la isla —dijo Jose besándole la mejilla—. Nunca me había adentrado tanto.
—Una vez, Bael y yo tomamos sin permiso las motos de mi papá y mi tío Alex, condujimos como locos hasta que se acabara el combustible y llegamos hasta esta cascada —Gabriela se dio la vuelta abrazándolo—. Es un lugar secreto.
Jose acaricio su rostro y la beso animosamente, Gabriela se separó, lanzó su mochila al suelo y empezó
—Quién diría que estaríamos en la misma clase —dijo Jessy sonriendo ampliamente emocionada—. Y que tengamos la misma edad y que las dos seamos becadas .Leia acomodaba sus cuadernos y libros en su casillero, estaba intentando prestarle atención a la chica nueva y en intentar no caerse por intentar alcanzar un libro que estaba en la parte superior de los casilleros. Una de las cosas que le habían sorprendido de la escuela, eran sus enormes y modernos casilleros.—Yo también me alegro mucho —dijo Leia sinceramente.—Estaba tan aterrada esta mañana cuando llegué a la isla —dijo Jessy acomodando sus lentes—. No tuve una buena experiencia en mi anterior escuela y me habían dicho que est
Restregaba una y otra vez el trapo en el mármol liso y pulido, podía pasar horas ahí limpiando la lápida de Bonnie. Venía más seguido de lo que le gustaría. Pero se sentía tan solo últimamente que no podía evitarlo—Eres patético.Bael suspiro al reconocer la voz que provenía de alguien detrás de él.—¿Qué quieres Estefan?Bael volteo y se asustó cuando vio a Estefan, su querido primo tenía una cara demasiado pálida y con grandes ojeras, también estaba demasiado desaliñado.—¿Y a ti qué te pasa? —¿Qué es lo que está pasando Joon?Bastian lo retuvo del brazo, Joon intentó irse como pudo, pero Bastian tenía más fuerza que él.—Suéltame, todos nos están mirando.Joon noto las miradas curiosas de todo el lugar.—No me importa, vienes con un aspecto terrible, preguntando por el idiota ese ¿Como no quieres que me preocupe?Joon suspiro demasiado frustrado, solo asintió y Bastian lo guió hacia un lugar más apartado. Fueron hacia lo que seguro era una de las habitaciones de la mansión.—¿Por qué estás así Joon?<CAPÍTULO 20.- primer fragmento
—Empezaremos quitándoles sus tarjetas de débito por un mes —hablo Oliver con aspecto cansado y desilusionado.—¿Un mes entero? —Gabriela miró atónita a su tío Oliver.—Callate Gabriela —Alan miraba muy enojado a sus hijos y sobrinos—. Que si vuelven a hablar serán dos meses.—Si fuera por mí, sería todo un año —habló Jaime.Gabriela se mordió su lengua y miró con odio a Estefan y Bastian. Pensando cómo hacer que se la paguen.—Será lo mismo para ustedes tres —Oliver miró a Bastián, Joon y Natsuki—. Hablé con sus
—¡¿Estás saliendo con Taylor?! —Noel lo miraba con gran sorpresa—. ¡¿Cómo?!, ¡¿Cuándo?!, ¡¿Dónde?!—¿No puedes gritarlo más fuerte? —Theo miró a todas las direcciones de la calle ya que iban de camino a la escuela.—Lo siento —Noel lo miraba expectante—. Solo es que me muero de que me cuentes todo, ¿Cómo lograste conquistar a Taylor?Theo empezó a explicarle sus acercamientos, hasta el día anterior que la había encontrado en la azotea de la escuela y su encuentro en el bosque.—Son la pareja más loca del mundo —Noel lo empuja amistosamente—. ¡Me
Estefan empezaba a plantearse si Bael tenía una especie de poder parecido al hombre araña, para escalar por las paredes y meterse a las casas por las ventanas. En ocasiones lo había visto aparecer en las habitaciones de los pisos más altos del palacio. También empezaba a cuestionarse si de verdad tenía algún retraso mental al encontrar divertido hacerlo.Estaba mirando la ventana de la segunda planta de la casa de Joon, por donde podías entrar a su habitación. Su querido mate no quería hablar con él, había cambiado la cerradura de la casa, su celular estaba apagado, todas sus ventanas estaban cerradas. Pero Estefan estaba seguro que estaba adentro de la casa aun molesto con él.Miro las paredes para escalar hacia la ventana, de cerca podías notar que
—Yo… —escucho por un momento la respiración entrecortada de Theo—. Yo solo me siento tan perdido y solo sabia que queria hablar contigo.—¿Entonces solo me buscas para consuelo?—¡No! —Theo gruño frustrado—. Te extraño Gabriela, por la diosa luna Gabriela, te juro que a veces no puedo ni respirar de lo mucho que te extraño.Gabriela intentaba controlar sus emociones, que amenazaban con explotar pronto.—Yo no te he extrañado —mintió intentando herirlo—. Yo te olvide tan rápido como te fuiste.—Lo dices como si yo hubiera querido irme… —Esto te hará sentir mejor.Gabriela recibió la infusión caliente que le había dado Jose para que tomara.—¿No se supone que deberías estar enojado conmigo? —dijo casi susurrando—. ¿Dolido tal vez?Jose se sentó enfrente de ella y la miró curioso.—¿Por qué debería estarlo?Gabriela suspiro algo frustrada.—Ya sabes por qué.Jose también suspiro mirando un momento a la nada, meditando cuál debería ser la respuesta correcta.—CAPÍTULO 21.- tercer fragmento