Al oírlo, Natalie se mordió el labio inferior.

Cuando era agente de Bryan, sabía que su padre los había abandonado a él y a su madre cuando era pequeño, por lo que a lo largo de los años Bryan tenía el deseo de tener una familia con la persona que amaba.

En el momento en que se lo había dicho, Natalie no sabía que la persona a la que quería era ella, así que le había animado.

—Hablemos cuando tus piernas estén curadas.

—Bueno, voy a seguir rehabilitándome. No te molesto más, tú ocúpate.

Tras colgar, Natalie dejó el móvil y se enredó.

Ella no quería que el accidente de coche tuviera nada que ver con Bryan, pero a través de estos días con Bryan, creía que no iba a gustarle.

Pero fue ella quien se comprometió con él en primer lugar, y era demasiado tarde para arrepentirse.

Se llevarían más tiempo y tal vez podrían cultivar una relación.

Con eso en mente, Natalie dejó el asunto a un lado y ahora lo más importante era encontrar a Silvia y conseguir que Mafresa se curara.

Al día siguiente, n