"Samantha Sánchez"
Si esto fueran otras circunstancias estaría bueno poder tomarle una foto y guardarlo para siempre, lo sigo viendo detalladamente desde su cara hasta su torso desnudo, pasando a sus brazos en donde veo dos tatuajes medianos en cada lado de su brazo, pero el show se acaba cuando siento que quita la mirada de la ventana y hago como si no lo hubiera visto por tanto tiempo, me dirijo hacia mí maleta y sacó una pequeña cartera color negro de ahí, en la cartera pongo mi dinero, mi labial que me pongo antes de guardarlo y mi cédula.
Después de que terminó de hacer eso me paro de donde estoy, volteo y veo que Ethan está muy cerca de mí, retrocedo poco a poco pero es inútil, él se acerca cada vez más, haciendo que nuestros alientos se mezclen entre sí, logrando que se me pongan los pelos de punta y mi corazón valla a mil por horas, tanta cercanía por parte de él hace que me ponga nerviosa y que mi respiración sea irregular, pero no me doy cuenta cuando sus labios están rozando los míos a casi nada de dar un beso, solo un paso en falso y nos estaríamos devorando los labios, no he despegado mi mirada de sus labios carnosos hasta que algo me ínsita a hacerlo y veo como me mira con pasión en los ojos y las ganas que tiene de besarme, pero antes de que pase algo más, me suelto de su agarre en mi cintura que no sabía que había puesto ahí y salgo corriendo hacia el baño.
Cierro la puerta y levantó la mirada hacia el espejo que tengo enfrente y me veo agitada y ruborizada, pero que tonta he sido como se me ocurre caer de nuevo tan bajo, pero es que están difícil dejarlo ir, se siente tan difícil no poder estar al lado de él, no sé qué me hace pero siento que esto está mal, por el momento trato de respirar hondo y calmarme, abro el grifo para echarme en la nuca ya que si me hecho en la cara voy a arruinar lo poco que tengo de maquillaje, cuando ya estoy relajada, abro la puerta lentamente hecho un vistazo a la habitación y veo que no hay nadie en ella, salgo cuidadosamente y agarro mi celular para ver si alguien me había escrito y en eso siento que se abre una puerta, volteo hacia la dirección del sonido y veo a Ethan vestido con su ropa normal es la primera vez que lo veo así lleva un suéter y un jeans color negro con zapatos bajos y se ve realmente sex... ¡NO SAMANTHA NO PIENSES EN ESO AHORA! quito la mirada de encima de él y sigo viendo mi celular.
- ¿Ya estas lista? -dijo mirándome serio y hablándome cortante ¡Wau! pero que cambió drástico de humor.
-Si-dije seca sin mirarlo, si me va a tratar así yo lo haré también.
-Bien, entonces salgamos antes de que se haga más tarde-dijo agarrando su cartera y llaves de un ¿auto? ¿cuándo consiguió un auto? que no lo vi comprarlo o alquilarlo.
Agarro mi pequeño bolso, salimos de la habitación, nos dirigimos al ascensor, nos adentramos a él, pongo planta baja, esperamos unos minutos en un silencio nada agradable, cuando llego el ascensor a la planta baja nos dirigimos hacia la salida y ahí es donde veo un hermosos carro color rojo vino. Es realmente hermoso no cabrían las palabras para decir lo hermoso que es.
Pero antes de que llegáramos a tocar el auto se nos acercó una mujer como de unos 29 años, pero la verdad las apariencias engañan y puede tener como unos 40 años uno nunca sabe, ella parecía realmente una cualquiera, lo digo por el modo en que miraba a Jonás, una forma a la cual quisieras llevártelo a la cama y hacer con él lo que sea, ella es de cabello castaño con ojos azules y cuerpo de plástico, sus pechos no eran tan voluptuosos pero no llevaba sujetador y eso hacía ver que sus pechos no se veían caídos, pero en la parte de atrás si se notaba lo voluptuoso, lo que quiero llegar en todo este asunto es que literalmente se olía a plástico, porque es demasiado notorio sus cirugías y más en la parte de atrás.
La chica le comenzó a coquetear y él ni le prestaba atención a lo que ella le decía a él, lo que más le prestaba atención eran a sus senos ya que tenía un escote escandaloso.
Rodé los ojos y me dirigí al auto para esperarlo apoyada en él, cuando terminó de "hablar" o mejor dicho ver a esa mujer suela, largue un suspiro porque la verdad es que para mí demoro una eternidad viéndole los senos a esa mujer y me subí al auto, después de unos minutos que parecieron eternos, él se subió a su auto con una sonrisa y un pequeño papel que al parecer tiene ¿números? escritos en ella, creo que es mi imaginación no lo sé.
Enciende el motor del auto y yo le indicó donde queda el restaurante en donde vamos a cenar, pasa algunos minutos y por fin llegamos a nuestro destinó se estaciona y nos bajamos del auto.
Caminamos hasta la entrada del restaurante, me abre la puerta y yo paso- que le pasa primero es comprensivo, después es coqueto, después es frío y ¿ahora es caballeroso? ¡A este que le pasa! - pensé, lo mire raro por unos momentos y comenzamos a caminar de nuevo hacia la entrada en donde nos encontramos con un mesero, le damos las buenas tardes y antes de que nos guíe siento una mano en mi espalda.
Ese tacto lo reconocería en cualquier lugar, siempre logra que me estremezca, que mi corazón vaya a mil por horas y que me ponga nerviosa, volteo hacia la persona y es.
"Samantha Sánchez"Es Ethan alias el iceberg quien tenía posada su mano en mi espalda baja, lo miré con el ceño fruncido para darme cuenta de que no me miraba a i sino hacia un señor al cual me miraba demasiado, si no fuera por mi Jefe no me habría dado cuenta de que el señor me miraba con descaro, solo atine a rodar los ojos y seguir avanzando.Él se percata de que ya no estoy a su lado asiendo que se asuste un poco, pero al verme sentada en la mesa y tratando de reprimir una sonrisa divertida por la forma en la que me busco desesperado, se acerca con rapidez a la mesa, sentándose en el transcurso.Después de unos minutos llega el mesero y pedimos, cuando ya tiene anotado lo que pedimos se va el mesero a buscar nuestra comida en eso el iceberg me mira buscando una explicación a mi comportamiento hacia él, pero yo trato de no prestarle aten
"Samanthan Sánchez" Después de que se fue, estuve pensando en cómo voy a conseguir un novio en tres días, no se me ocurre a nadie quien conozca que quisiera hacer algo como esto, dejo ms pensamientos a un lado cuando siento mi celular vibrar en la mesa, llegándome una notificación de mi jefe. Espera eso es, ya sé quién puede ser mi novio de mentira, espero que acepte en verdad necesito a alguien para hacer esto y mi única oportunidad de enfrentar a mi “madre” es que él lo haga conmigo, reviso el mensaje y decía que viera hacia afuera, algo confundida levanto mi cabeza y mirando hacia todos lados para después encontrarme con los ojos del susodicho, él estaba ahí con una rosa roja acercándose a mí con pasos lentos pero decididos. Cuando ya estuvo cerca de mi mesa me levanto de la silla y lo miro esperando a que diga algo-Ten esto es para ti-dijo entregándome la rosa y lo acepo con gusto para acércalo a mi nariz y oler el
"Samantha Sánchez" Debería de molestarme porque Ethan tiene su mano en mi muslo, pero soy tan tonta que dejo que lo tenga ahí, si lo se me debe de respetar, pero se me hace tan difícil que deje de hacerlo si sigue apretando mi muslo con suavidad, eso hace que me ponga nerviosa sin saber que hacer al respecto. Veo como aparca el auto en uno de los estacionamientos privados de la empresa, eso hace que me relaje un poco al saber que ya quitara su mano de ahí. Bajamos del auto en silencia, agarro mi cartera poniéndomela en el hombro y Ethan bloquea el auto, entramos a la empresa dándole los buenos días a la recepcionista quien nos sonrió con amabilidad y nos regresó el saludo, caminamos hacia el ascensor, nos adentramos a ella, esperamos unos minutos en los cuales para mí se hicieron muy largos y cuando se abrieron las puertas del último piso caminamos hacia la secretaria a la cual no está haciendo nada más que limarse las uñas mi
Ya adentro de ella, nos sentamos en un puesto cerca de la ventana que daba hacia la calle, el lugar no es tan formal y ni tan informal, llega un mesero a nuestra mesa a darnos la carta del menú, le agradecemos y él se va. - ¿Qué vas a pedir? –dijo Ethan con interés, levanté mi mirada de la carta de menú y vi que me miraba, eso me tomo desprevenida haciendo que me ponga nerviosa. -Mmm…aun no sé, todo lo que leo y veo se ve muy bien-dije bajando la mirada de nuevo hacia la carta de menú sin dejar de lado que estoy algo nerviosa por su mirada. -Bueno yo pediré pasta, si quieres pedimos lo mismo-dijo restándole importancia y solo asentí con la cabeza, me parece buena idea, además esto se estaba volviendo un poco incómodo, ninguno de los dos ha hablado hasta que llega el mesero y nos pregunta que vamos a pedir, Ethan le dice y el mesero asiente para después irse y nosotros quedamos de nuevo en un silencio incomodo hasta que el decide
"Samantha Sánchez" Desperté por la luz que daba en mi cara, quisiera seguir durmiendo un poco más, me remuevo incomoda en la cama sintiendo el agarre de Ethan en mi cintura, me volteo lentamente hacia él y veo a Ethan con los ojos cerrados durmiendo plácidamente, me siento tan bien es sus brazos que me asusta que de alguna manera esto pueda acabar mal, quito esos pensamientos de mi cabeza y me concentro en ver su cara angelical como si no matara a ninguna mosca ¿porque el muy desgraciado tiene que ser tan guapo? Lo sigo mirando e inconscientemente le comienzo a tocar su cara con suavidad, veo que abre sus ojos color miel lentamente y quito mi mano de su cara al instante con miedo a que me haya descubierto.- ¿Sabes que estaba despierto ya no? Pero espere a ver qué hacías-dijo Ethan con la voz ronca y con una sonrisa que mata a cualquiera-esa fue una muy buena manera de despertarme, pero estaba esperando el beso-dijo en un tono burl
"Samantha Sánchez" Flash Back Estaba en mi escritorio firmando algunos papeles para después llevárselos a Ethan, estos 2 meses que llevo trabajando para él han sido excelentes me siento súper cómoda con él y no le tengo que decir Sr. Jonás a cada rato porque se siente raro decirle a alguien casi de tu misma edad Sr. Cuando ya están listas las hojas, me levanto de mi silla, salgo de mi oficina y me voy hacia la de Ethan, cuando llego toco la puerta y espero el pase, entro a la oficina y lo veo entretenido en la computadora escribiendo algo, cuando cierro la puerta detrás de mí él alza la mirada de lo que estaba haciendo para mirarme. - ¿Ya están listos los papeles? –pregunto Ethan alzando una ceja sin dejar de mirarme, ok no sé lo que le está pasando, pero es muy raro que él me esté hablando así. -Si aquí los tienes-dije entregándole los papeles en
"Ethan Jonás" Habíamos llegado a la habitación del hotel después de haber pasado toda la mañana y medio día con la madre de Samantha, pero cuando llegamos ya era de noche asique nos tendríamos que ir a dormir de una vez, aunque pensándolo bien debería de hablar con Samantha sobre lo que paso el día antes de su cumpleaños. Cuando estoy dispuesto en hablar con ella siento como mi celular vibra en el bolsillo de mi pantalón, camino hacia el balcón que hay en la habitación y acepto la llamada sin ver el nombre de la persona. Inicio de llamada - ¡Bueno! Habla con Ethan Jonás-dije a la persona que estaba del otro lado de la línea. -Ya ni a tu propio padre reconoces-dijo mi padre fingiendo indignación y solté un bufido por eso, pero ocultando las ganas de reir. -lo siento padre no sabía que eras tú el que me hablaba, acepté la llamada sin ver quien era-dije explicándole sonriendo
"Samantha Sánchez" Esto de estar viajando en jets creo que me está comenzando a gustar, ya estábamos aterrizando en el aeropuerto de Nueva York, me abrocho el cinturón y veo que Ethan tiene el suyo todavía, asique no me preocupo, dejo la revista a un lado, ya que estaba leyendo unos artículos de moda, al parecer Victoria secret sacara una nueva colección de ropa interior, después tendré tiempo para comprarme algunos conjuntos, que les puedo decir me gusta su ropa interior. Cuando aterrizamos, desabrocho el cinturón, me paro y veo que Ethan está quieto, creo que se metió en lo más pero más profundo de sus pensamientos, le tocó el hombro para que salga de lo que haya estado pensando, cunado lo hago me voltea a ver de una forma a la que me dice que hable. -Ya llegamos Ethan-dije para volver a girarme y agarrar mis pertenencias. -Está bien-fue lo último que escucha de el para después seguirlo hacia la salida, veo c