—El agarre en mi cuello, me dejaba sin aliento y la cara de él no demostraba ninguna misericordia, traté de luchar con mis pocas fuerzas, sentí que aflojo sus manos y caí al suelo. Lo mire con miedo no pensé que el fuera asi, tan dedicado y amoroso con su esposa que no podía creer lo que me estaba pasando
—No vuelvas acercarte a mi hasta que no te lo indique, incomodas a mi esposa y eso no me gusta, si ella se molesta conmigo me desquitare contigo, puta de cuarta con título, la única que me importa es ella las ofrecidas como tu solo son juguetes para mí, algo que se usa y se desecha
—Cada palabra me hería más, llore sin poder contenerme, como pude me levante, me di la vuelta para irme, una mano grande me detuvo
—No dije que pudieras irte, ya que quieres ser mi juguete……Saque un fajo de billetes de mi b
—No quise interrumpir la “amena” conversación de mi esposa con su doctor, esperé pacientemente afuera, entreteniéndome con mi celular—Señor no olvide que tiene una cena con la señorita Lanford—Había olvidado que me tocaba cenar con esa mujer odiosa, no podemos suspenderla—No señor, no podemos ya la ha aplazado dos veces, dijo que olvidáramos su cooperación si es nuevamente dejada a un lado—Que mujer tan odiosa ¿a qué hora es la cena?—A las nueve en el Hilton, el contrato y las condiciones estan en esta carpeta, puede leerlas para que ella no quiera aprovecharse de nuevo—Ella lo que quiere es aprovecharse de mi—Tiene razón, recuerde tener cuidado con su bebida o comida, es muy “jugueto
—Di una vuelta por todo el hospital, hasta que encontré el lugar donde estaba mi víctima, en definitiva, estaba bien pero no le llega ni a los talones a la abogada y siendo tan osada como me conto Oscar es imposible que tenga misericordia—A la niña de los Rengel deben darle de comer cada 2 horas, con la formula indicada anteriormente, podemos irle suministrando la leche materna que las otras madres donan, cuando tenga tiempo lo reviso—¿Se va doctora? Aun no termina su turno y los otros niños necesita que los revise, no puede irse—Ese es mi problema, la doctora soy yo usted es una simple enfermera, haga su trabajo y no se meta con el mío—Como usted diga doctora. La niña de los Rengel necesita cambio de oxígeno y nueva medicación la anterior ya se termino&mdas
—Querido Oscar, me emocioné cuando pediste adelantar la cena, estaba muy emocionada por reunirme contigo, pensé que me estabas evitando, ya que dos veces aplazaste la cena dije imitando irritación—Buenas noches hermosa dama. Cómo cree señorita, eso sería imposible, apenas me senté su mano subía y bajaba por mi brazo haciéndome erizar, pero no del gusto. Trate de evitarla un poco, mire este es el contrato que debe revisar—Podemos esperar un poco, hablemos despues de la cena, por supuesto pedí mi vino favorito mientras esperaba por ti, podemos brindar por estar juntos…. En esta colaboración—Le di una sonrisa fingida, sus palabras en doble sentido me tienen cansado. Cenamos algo rápido al menos yo lo hice, necesitaba irme ya me sentía muy incómodo, pensando que Lind podía escaparse o que
—Creo que deberías ir a visitar a tu hija, sería mejor si ella te tuviera a su lado, está pasando por momentos muy duros, te necesita—No te pedí un consejo Adrián, mi error fue dejar a mi hija a la deriva despues que se fuera a Corea, debí estar a su lado siempre simplemente deje que una niña malcriada la manipule y ahora le haga daño, merezco su desprecio—Lindsay entenderá, lo único que hiciste fue protegerla de algo que pudo haberle causado un gran sufrimiento, enterarse que la hija de la empleada era su hermana no era comer mandarinas sentados en el césped, te entenderá y apoyara, tú también la necesitas, seguir viajando para esconderte no ayuda en nada, Ecuador es grande sin embargo nadie puede saber lo que pasas en ese pais, ni siquiera tienes amigos—¿Hubieras venido conmigo si te
—Moví desesperadamente mi cuerpo pesaba, necesitaba escapar de este lugar. Parecía haber una ligera vibración de la persona moviéndose detrás de mi espalda. Mientras tanto, otro hombre ya estaba muy cerca. Agarré la pared y me puse de pie sin apartar la vista de él. Como si me enfrentara a una bestia, me puse de pie para mirarlo. Podía ver al hombre extendiendo su mano. En el momento en que agarró mi cabello, abrí los ojos con desesperación. Él hombre frente a mi parpadeó y se rio. La fuerza de mi respiración solo empeoraba. El hombre me miró con una sonrisa cruel bailando en sus labios. —¿Por qué quieres escapar belleza? —Eres la esclava de Neptaly, ¿cierto? Dijo que eras hermosa, tan irreal como si fueras de otro mundo, pensé que exageraba, me equivoque eres muy hermosa —Lo mire aterrada era un hombre muy alto el que hablaba, el otro se limitaba a ver mi desnudez, se habían encargado de arrancarme la ropa. Volví
—Al fin me dieron el alta en el hospital, estuve un mes sin ver el exterior, lo primero que hice fue arrastrar a Oscar al registro de la niña, eso era una prioridad para mi—Deberíamos estar camino a la casa para que descanses, el tramite podría haberlo completado Emma por nosotros, tu condición aun no es tan buena—Crees que algo tan importante puede dejarlo en manos de una asistente, estamos hablando del registro de nuestra hija debemos hacerlo personalmente, sin ofender Emma—No se preocupe señora Rengel, entiendo su punto—Gracias, al fin alguien me entiende—No dije nada más, no quería tener una pelea con Lind por esto. Emma tiene listo los documentos—No deje hablar a Emma la inter
—Al fin me dieron el alta en el hospital, estuve un mes sin ver el exterior, lo primero que hice fue arrastrar a Oscar al registro de la niña, eso era una prioridad para mi —Deberíamos estar camino a la casa para que descanses, el tramite podría haberlo completado Emma por nosotros, tu condición aun no es tan buena —Crees que algo tan importante puede dejarlo en manos de una asistente, estamos hablando del registro de nuestra hija debemos hacerlo personalmente, sin ofender Emma —No se preocupe señora Rengel, entiendo su punto —Gracias, al fin alguien me entiende —No dije nada más, no quería tener una pelea con Lind por esto. Emma tiene listo los documentos —No deje hablar a Emma la interrumpí antes de que pueda contestar. Los documentos los tengo yo, pierde cuidado tengo todo en orden —Como siempre la abogada Lindsay Swan tan diligente —No puedo decir lo mismo de usted señor Oscar Rengel —Lind podemos dejar de discutir por un momento, quiero un día pacifico a tu lado ¿Puedo?
—No sé cómo llegamos a esto, lo último que recuerdo es que llegamos discutiendo. Estábamos como perros y gatos desde que salimos de registrar a la niña. Creo que tenemos demasiada tensión sexual entre nosotros, no debería excederme eso dijo Raúl, pero con Oscar es imposible hacerlo su cuerpo se acopla al mío como su fuéramos uno, me hace vibrar con solo tocarme—Lind, no sé cómo pude contenerme todo este tiempo, te ansiaba. Mordí su cuello con vehemencia, lo chupe y deje marcar visibles estaba volviéndome loco, estar dentro de ella me trasportaba a otro mundo—¿Esperabas tenerme asi hace mucho? —Si— Dijo con una sonrisa boba en su rostro cegándome por un momento al ver esa expresión tierna en su cara—Un pensamiento llego a mí, si no tuviéramo