Eliane BlackActualidad…–¿Quieres que tu vestido sea blanco? –dudó Derek. –No lo sé –murmuré –. ¿Tú quieres que lo sea? Frunció el ceño al escuchar mis palabras. –Amor, ¿qué pasa? –cuestionó –. Es nuestra boda y debemos planear todo. –¿Y si contratamos a alguien para que lo haga? –Eso le quitaría la mejor parte, no disfrutaríamos nada. –Al menos nos ayudaría, es la primera vez que me caso, sabes –bromeé.–Y espero que sea la única –gruñó. Sus palabras me hicieron soltar una carcajada, definitivamente esto iba a ser un dolor de cabeza que disfrutaría mucho. –Por supuesto que sí.–Bien, futura señora Evenson –me dio un beso en los labios antes de levantarse de la mesa –. Porque vas a ser mía por el resto de tu vida. –Eso suena a amenaza. –Será tu decisión como quieras tomarlo –bromeó –. Recuerda que hoy debemos probar la comida para elegir qué van a preparar. –Estaré aquí a la una de la tarde, jefe. Nos despedimos antes de salir al trabajo, gracias a la maravillosa idea de S
Fui directo a la oficina cuando regrese de ese extraño almuerzo, me había retrasado un poco y casi olvido que tengo que hacer unas llamadas para los presupuestos de los inmuebles, tuve una tarde bastante ocupada con Anne, casi al terminar el día Saúl cruzó la puerta y tomó lugar en mi sofá. Sabía que no iba a resistir la curiosidad de lo que pasa con ese chico, guardé todo y tomé mi bolso caminando al sofá, Saúl estaba en silencio viendo todos mis movimientos, sé que está esperando a que le hable sobre Jacques que para su mala suerte me ha caido bien.–Parece que siempre que va a otros lugares aprovecha para hacer turismo y se quedará unos días más aquí –mencioné –. Intento hacerme preguntas sobre Susy, pero las evadí.–Hablaré con Susy cuando lleguemos al hotel –comentó –. No quise decirle nada aquí para no incomodarla.–¿Y la cena? –Quiero que sea cuando regresemos a la ciudad, aquí sería algo muy apresurado e improvisado.–Saúl Harrison tomando las cosas con calma –me burlé.–Su
Eliane Black21 años...'Estoy cerca, otoño'Sonreí al ver el mensaje de Saúl, terminé de arreglarme y salí de mi habitación.–Caperucita, es tarde ¿A dónde vas? –preguntó John. ¿Desde que hora está aquí? Ni siquiera lo escuché llegar, casi no viene desde hace mucho.–Estás aquí –caminé hacia él para abrazarlo besando su mejilla –. Voy a una fiesta regresaré temprano.–Vine a verte, puedes ir otro día.–Las clases acabaron y es la última fiesta, luego me tendrás para tí.No lo había visto en meses, pero solo serán unas horas.–No me gusta que salgas así –me miró bastante serio–¿Qué? –baje la vista a mi vestido negro con mayas debajo –. Regresaré temprano, lo prometo, estaré bien, iré con Saúl –intenté persuadir, ellos se llevan ridículamente bien así que con solo mencionarlo parece tranquilizarlo.–Saúl irá contigo –repitió –. Está bien, pero vuelve temprano –se despidió, estaba por bajar cuando me volvió a llamar.–¿Qué pasa?–pregunté de mala gana.–¿Qué está pasando contigo y Saúl
Eliane Black21 años...SuéltameNo me toquesNo lo hagas, por favor, por favor.Me sacudí de la cama con un grito cuando sentí que alguien sostenía mi mano.–Señorita perdone.–Eliane tranquila, estás en casa –intervinó John–¿En casa?Sentí dolor de cabeza y en mi cintura, no entiendo nada.–Señorita, la voy a examinar, le daré algo para el dolor –dice la desconocida y sin más remedio acepté.Me explicó que es una enfermera, me explicó algunas cosas, me dí cuenta que estoy en mi habitación con algunas máquinas, John hizo esto por mí, para que nadie se enterará.–Caperucita –entró John acompañado por un hombre robusto con cabello canoso y un rostro gentil –. Es el doctor, te ha visto todas estas horas.Mientras el doctor me revisa intento explicarme lo que me pasó, no necesito que lo diga, sé lo que pasó y no quiero escucharlo, al parecer Wilber no hizo bien su trabajo y la droga que puso en el vaso fue demasiada, daño mis órganos, principalmente el riñón y parte del útero. Ojalá el
Eliane BlackActualidad…–¿Cuándo te irás? –dudó Stacy.–Aún no lo sé –contestó Jacques –. Supongo que hasta que la empresa me necesite. Está mañana cuando Jacques visitó la clínica conoció a Stacy que no perdió el tiempo en invitarlo a cenar, hubiera sido fantástico, cuando agradeció a Derek por invitarlo nuevamente y así fue como resultamos en prácticamente una cita doble. Yo estaba feliz porque Stacy había cambiado mucho y parecía que no le había gustado por su dinero, se llevaban muy bien, además, Jacques también se veía encantado con la presencia de Stacy, no habían parado de hablar en toda la cena, él le hacía un cumplido muy coqueto y eso ponía de mal humor a Derek que parecía no disfrutar mucho la cena del restaurante. –Me gustaría conocer la ciudad un poco más. –Stacy podría ayudarlo –propuse –. Ellos han vivido aquí siempre y conocen el lugar a la perfección. –¿Vraiment? Me encantaría conocer algo más aparte de los lugares turísticos, aunque hay muy pocos, pero me he que
–No me gusta dejarte sola –mencionó Derek.–No pasa nada, estaré bien aquí en la casa. –Le dí un beso.–Volveré pronto –me dio un beso suave –. Lo prometo. Sonreí por su ocurrencia. –Y aquí te voy a esperar. Han llamado a Derek a la clínica por una emergencia, siempre hace esto y casi se disculpa por tener que ir, parece que no quiere dejarme sola un par de horas y no voy a ser la novia loca que se va con él al trabajo por mucho de que me lo haya dicho. Cuando salió fui a la cocina a preparar algo de café con un emparedado, luego iré a ver televisión hasta que regrese, por alguna razón no puedo dormir hasta que lo veo entrar.Estaba terminando mi emparedado cuando escuché que alguien llamó a la puerta, me detuve para ver la hora, ¿quién viene a buscar a las once de la noche? Decidí ignorarlo y no abrir, estoy sola en la casa, continuaron llamando con insistencia. Debí haber colocado cámaras de seguridad, así podría ver quien está insistiendo, justo cerca de la entrada lo escuché y
–¡Saúl! –exclamó Ángela al ver a su hermano –. ¡Por Dios! Nos tenías preocupadas, ¿dónde estabas?–¿Ángela? –dudé al verla cuando salí del ascensor.Como si no fuera obvio que estaba frente a mí, es solo que no entendía qué estaba haciendo aquí. –Roja, que gusto verte –me abrazo muy animada –. ¡Uff! Ya sé dónde estabas.Movió su mano alejándose de Saúl por el olor a alcohol, él bajó la mirada sin responder. –Ha bebido demasiado, no tengo idea de dónde ha dejado el auto –indiqué –. Lo traje en el mío. –Muchas gracias, Eliane –sonrió Ángela.Susy estaba viendo al suelo sin decir una sola palabra, supongo que no le agrado mucho vernos así en el ascensor, Saúl caminó a la habitación, aún estaba algo ebrio, pero al menos ya podía caminar solo, Susy caminó a su lado, solo espero que no se vuelva un problema y que Saúl aclaré todo con ella, no creo que sea el tipo de chica que reclama, pero se merece una explicación. –Ángela.Ella se detuvo y regresó conmigo cerca del ascensor, no planea
Susy no apareció el resto de la semana, estaba preocupada, los meses que lleva aquí, ella jamás se había separado de Saúl, me siento culpable y quisiera llamarla para hablar con ella, no sé si me corresponde hacerlo. Saúl se ha quedado a trabajar y Ángela sigue aquí, fue a la clínica con Derek, le ha ayudado mucho con el asesoramiento del área psiquiátrica, espero que para la próxima semana todo esto haya terminado y pueda empezar mis propios proyectos, Susy me dio una idea magnífica de colocar lugares para acoger niños sin hogar, con algunos beneficiarios podría hacerlo porque está claro que después del fin de semana seré pobre y eso pasará está tarde cuando John venga y le entregue los documentos que mande a preparar con el abogado de la familia, necesito terminar con este asunto lo más rápido que pueda. Regresé a casa un poco antes a preparar la cena con ayuda de Julia, mi hermano es delicado con la comida aunque ahora se ha ablandado un poco con la presencia de Lucy, parece que