...Andrew Alexander Black Hace poco más de media hora que regresamos del paseo, lleve a Ji a la playa que está cerca de la casa.El sol ya se estaba ocultando, ver los tonos rojizos contrastar con el aceano azul genera una paz que en verdad necesitaba.Estar con mi esposa, jugar en la orilla de la playa, besarla. Hacer cualquier cosa pero con ella, es algo único.Beso su cuello, el agua de la ducha cae en mi espalda mientras ella y yo hacemos el amor, está ocasión en diferente, más lento y cálido. Sus gemidos ahogados por el sonido del agua, el ambiente sexual se mantiene aún cuando hemos llegado al orgasmo.Beso su mejilla, termino de bañarme y la ayudo a lavar su cabello. Poco después salgo del baño, me dirijo al armario a escojer un pantalón de pijama.Al ponerme la ropa abro el lado del armario de Jung-Li ya que escuche que algo se cayó. Frunzo el ceño al ver un pequeño cofre un poco abierto, en el hay algunas flores secas y cartas. Tomó la que está encima y recojo el cofre, lo
...Min Jung-Li.Unos brazos fuertes se pasan por mi cintura, me siento un poco mareada así que no hago más que dejarme llevar por ellos, sabiendo que estaré bien. Que él nunca me lastimaría, o al menos físicamente. ***Suelto un suspiro al tirarme en la cama. Son exactamente las diez con veintitrés minutos. Ayer desperté a media noche en mi cama, completamente sola como la noche antes. Después de que Andrew me dejará en la habitación, salió de esta con la misma rápidez que entró. Agradezco haberlo encontrado en el elevador o no sé qué hubiese pasado. Intento no lamentarme. Ayer me sentí desvanecer de la nada, seguramente tengo anemia o algo así, esto solo me pasó en mi adolescencia, según los doctores era normal, aunque yo sabía que no era así. Ignoro mis recuerdos y me acomodo nuevamente, abrazo una almohada y cuando estoy por tomar la sabana, siento una enorme pesadez que me impide moverme. La pereza me está ganando.Pienso en volver a dormir otro poco, pero tengo que asistir a
...Min Jung-Li —Estoy lejos de serlo, su razón es el dinero, siempre lo ha sido. —Me alejo de su toque con tristeza, no quiero más mentiras e ilusiones. —No es así, ellos, sus padres, han estado discutiendo desde hace unos días a gritos —expresa en susurro, como queriendo que nadie más que nosotras dos escuchemos. —¿De verdad? Ellos casi nunca lo hacen...digo, quizás si tienen problemas como en cualquier matrimonio pero, llegar a los gritos. —siento mi cabeza empezar a doler, no quiero que esto empeore. —Si, su padre le ha dicho a la señora que si firmó para que usted se casara con su esposo fue porque sabía que usted sería feliz con eso, que quería que usted fuera libre y amada —al escuchar sus palabras, lejos de sentirme bien, siento un hueco en mi pecho, algo que no me deja respirar bien. Es que es imposible que mi padre supiera de mi amor por Andrew, muy aparte de eso, las condiciones en las que nos "unió", no fueron las mejores. Aunque quisiera mi bienestar, entregarme a un
... Narrador omnisciente.El choque entre ambos vehículos no es tan fuerte pero logra hacer que el auto de Jung-Li derrape y vaya a quedar fuera de la pista. Todo sucede muy rápido y nadie logra comprender.Dentro del auto, ella está desmayada y con una torcedura en el cuello, unas leves heridas en el rostro, su labio partido suelta un poco de sangre. La bolsa de aire hizo que el resto del cuerpo no saliera tan afectado. Gritos se escuchan en el lugar, personas pidiendo que llamen una ambulancia o si no, alguno de los conductores de ambos vehículos morirá.Poco después llega el servicio de emergencia llevándose a una Ji inconsciente y a él conductor simplemente lo revisan, notando que no tenía heridas más que un moretón en la rodilla y uno en el pómulo derecho. La sangre en las piernas de Jung-Li hace que los paramedicos empiecen a revisar su cuerpo, buscando alguna lesión. Pero no hay golpes ni hematomas ahí, solo en su rostro y cuello. —¡Hay que atenderla de inmediato o puede mo
...Andrew Alexander Black Ya han pasado dos horas desde que mi hermano se fue a casa. Le llamé hace unos minutos para pedirle que fuera a la empresa a revisar que todo estuviera bien. No tengo cabeza para pensar en trabajo cuando mi esposa sigue sin despertar.—Por favor despierta, necesito que lo hagas—mis lágrimas caen en su rostro.No quiero que esté así. Me duele tanto como a ella, solo quiero creer que no fue mi culpa esto y que ella nunca asistió a ese hotel.La culpa se cola en mi pecho, ¿por qué tuvo que pasar esto? Merezco sentirme así por como la he tratado, pero, al final si ella no me ama no se sintió mal, ¿o si?Salgo de mi nube de pensamiento cuando escucho una queja. Me alejo de su rostro viendo como su ceño está fruncido y parece que se está esforzando en despertar.—Tranquila, llamaré a la doctora—murmuro limpiando mis lágrimas.Toco el botón en la habitación para que la doctora venga y en menos de 5 minutos ella está aquí.—Oh, parece que ya despertaste—veo con ate
...Andrew Alexander Black Veo su rostro con algo de arrepentimiento, parece en espera de algo, la tristeza es muy perceptible. Sus ojos brillan, y en esta ocasión no es de alegría. Sé que teme perder al bebé, también tengo ese miedo muy presente, mentiría al decir que estoy seguro de que podré cuidarlos a ambos, pero sé que me esforzaré para que ellos estén bien. Ahora, viéndola aquí, me he dado cuenta que, quizá estábamos destinados a estar juntos, pero ¿por qué hasta ahora? ¿Por qué no antes? ¿Por qué ella tiene que amar a otro? Siento que estoy justo en ese laberinto del que mi padre hablaba cada que discutía con mamá, él no la amaba. Entonces, ¿cómo sabía lo que era sentirse cómo yo me siento ahora? No creo tener una respuesta para todas mis preguntas. Y sería estúpido ponerme a buscarlas en lugar de intentar desanudar el tumulto de problemas desconocidos y conocidos en los que estamos metidos mi esposa y yo. Ya no quiero sobrepensar, tampoco quiero mantener distancia con Jun
... Min Jung-Li La suave brisa entra por la ventana de mi habitación, hace dos días me dieron de alta, el encierro al igual que el frío que está haciendo, me están estresando.Nisiquiera puedo bañarme sola, ni comer sola. Bueno, claro que puedo, pero Andrew no me deja hacerlo, lo que me genera aun más extrañesa. Él volvió a ser el mismo de antes, pero los recuerdos de mi mente no se borran. Las imágenes vivas de su sombra entre sábanas ajenas a nuestra cama. Nuestra cama.No es "nuestra", es suya. Estoy usurpando el lugar de Daniela. Lo peor, es que nisiquiera nos parecemos. En todo el tiempo que estuve enamorada de él, jamás quise parecerme a ella, ni ser ella. Lo único que quería era que él notará mi presencia, o quizá el brillo en mis ojos cuando lo veía a lo lejos. Ahora, que "lo tengo", duele mucho más que cuando no había siquiera acariciado sus labios con los míos. Desearía haberme quedado con la duda de a qué sabían sus besos, de cuales caricias me harían amarlo más de lo q
...Andrew Alexander Black Dejo a mi esposa en el sofa con cuidado de no lastimarla. Sus ojos están llorosos por la llegada de los bebés. —Él llora mucho más cuando tú lo cargas—Nicoll le reprocha a mi hermano quien no quiere dejar a su hijo en la cuna. —Es mío, tengo derecho a cargarlo—la respuesta de él me hace sonreír levemente. Me acerco a la cuna que está siendo ocupada por Nathanyel, es el que nació primero. Tiene sus manitas hechas puño mientras duerme. Ambos bebés son idénticos; cabello castaño claro con pequeños rizos, sus ojos son de un azul oscuro y sus piel es tan blanca como la su padre. Mi hermano se nota muy orgulloso de que sus hijos sean tan parecidos a él, lo único en lo que se parecen a su madre es su nariz y quizá en que el cabello de los pequeños es más oscuro que el de mi hermano porque está combinado con el de ella. Salgo de mi ensoñacion al ver a mi hermano dejar al pequeño Leonardo en su cuna, la que está al lado de su hermano. —Se ha dormido—susurra par