Siempre fuiste tú. Capítulo 11.La noche estaba cargada de electricidad, resultaba propicia para que el amor qué estaba oculto desde que se divorciaron pudiera renacer con más fuerza que nunca. Él la miraba de una forma especial, y ella no podía resistirse al encanto natural que ese hombre poseía.– Espero que las cosas con tu prometida se hayan solucionado – dijo Elisa de repente.– No quiero hablar de ese tema ahora – contestó él.– No veo de qué podamos hablar tú y yo, y si saco este tema a la luz es porque resulta necesario, ella no se encontró en tu casa y surgió aquel malentendido, y ya te dije que no me gusta que se piensen cosas de mí que no son– dijo ella.– No tengo que darle explicaciones a nadie Elisa, me conoces perfectamente y sabes que no me gusta que me controlen, y no tengo porque hacer excepciones con Diana – explicó.– Pues deberías, al fin de cuentas te vas a casar con ella y es mejor que las cosas estén claras entre los dos – contestó.– ¿Por qué te preocupa tanto
Siempre fuiste tú.Capítulo 12.Elisa estaba bastante molesta, no entendía cuáles eran las intenciones de Luke al llevarla a esa casa donde habían tantos recuerdos.–¿Qué es lo que pretendes trayéndome aquí? –reclamó Elisa.- Tenemos que hablar, ya te lo dije – contestó Luke.- ¿En qué idioma te digo que no quiero hablar contigo?, todo está dicho entre nosotros –inquirió ella.- Debiste buscarme para aclarar las cosas entre nosotros, jamás debimos permitir que nuestro matrimonio se terminara por un absurdo malentendido –señaló él con tristeza.- Es muy fácil reclamarme y justificarte, pero te recuerdo que tampoco hiciste nada por intentar solucionarlo –le recriminó.En los ojos de Luke se reflejaba una profunda tristeza al escuchar las palabras de Elisa, sabía que ella tenía toda la razón, y le dolía demasiado darse cuenta de que lo echó todo a perder debido a sus celos enfermizos.Por otra parte, Clarisa y Ana acababan de regresar del viaje que Luke les había regalado como pretexto p
Siempre fuiste tú.Capítulo 13.Luego de dejar a Elisa en su casa, Luke fue de inmediato a buscar a su prometida, necesitaba hablar con ella acerca de la determinación que había tomado.No quería seguir ilusionándola y era mejor romper el compromiso, sabía que no le sería nada fácil, pues Diana siempre fue una mujer acostumbrada a hacer su voluntad, no obstante, su amor por Elisa estaba primero y no pensaba permitir que nada ni nadie le arrebatara la posibilidad de ser feliz junto a la mujer a la que siempre ha amado.Una vez sonar el timbre, el ama de llaves le abrió la puerta y lo condujo a la sala donde ya lo esperaba Diana, perfectamente peinada y maquillada para recibirlo, lucía un vestido de diseñador que resaltaba su espectacular figura, lo saludó con un beso y un abrazó efusivo al cual Luke correspondió sin mucho afán.-Me encanta que hayas venido a verme cariño-dijo Diana con su acostumbrada zalamería.-Necesitamos hablar –contestó él.- Espero que sea para hablar sobre la fe
Siempre fuiste tú.Capítulo 14.A Elisa le dolió profundamente la traición de Tony, ella lo consideraba un amigo leal y pensar que la hubiera lastimado de aquella forma la hacía no querer saber nada más de él jamás.- No quiero volver a verte nunca más Tony, desde este momento puedes dar por terminado nuestro contrato laboral –señaló contundente.- Tú no puedes hacer eso Elisa, tenemos un compromiso y no te voy a permitir que me dejes tirado el trabajo –contestó preocupado.- No te mereces ninguna consideración de mi parte, y si tú no tuviste ningún reparo en causarme tanto sufrimiento con tus mentiras, yo tampoco tengo porque ser condescendiente contigo –puntualizó Elisa.- Haz lo que te plazca, vete con ese hombre para que te trate como su objeto personal para satisfacer sus deseos, pero cuando se canse de ti no vengas a buscarme para que te ayude- ingrata advirtió.- Cuida tus palabras idiota, y para que lo sepas, Elisa no es ningún objeto, es la mujer que amo – exclamó Luke con ve
Siempre fuiste tú. Capítulo 15.Elisa estaba consternada por lo que le había dicho su madre por teléfono, no podía creer que Ana siguiera aferrándose a un tipo que lo único que quería era jugar con sus sentimientos, le dolía imaginar que su hermana pudiera salir mucho más lastimada en el futuro si seguía tras un hombre que jamás dejaría a su esposa ni la posición con la que contaba para casarse con ella y formar una familia como debía ser, lo más triste es que Ana no era la única culpable, sino también su madre, quien se había empeñado en solapar aquella relación mal sana con tal de lograr sus oscuros propósitos, deseaba con toda el alma seguir teniendo acceso a una buena posición económica y pertenecer a la familia de los Baker sin duda era garantía de un futuro sin privaciones. Tristemente, no le importaba sacrificar a su hija menor, a la que decía amar con todo su ser con tal de tener todos los lujos, y lo peor era que Ana estaba dispuesta a complacerla, pues siempre había sido una
Siempre fuiste tú.Capítulo 16.La pasión que Luke y Elisa sentían era irrefrenable, desde que se reencontraron habían tenido que reprimir todo aquello que estaban sintiendo, pues incluso cuando él tenía tantas dudas acerca de ella le resultaba imposible contenerse cuando estaban juntos.Los besos aumentaron su intensidad y el fuego que se produjo debido al gran amor y a la fuerte atracción que había entre ellos amenazaba con desbordarse.No podían resistirse por más tiempo, ella lo amaba y él estaba arrepentido por el daño que debido a sus celos le causó en el pasado.Extrañaba tanto tus besos, el contacto de tu piel, la fragancia de tu pelo que me vuelve loco.— Dijo Luke con la respiración entrecortada.—También te eché de menos, cariño, y jamás pensé que volveríamos a estar así.— Contestó.—Vayamos a nuestra casa, Hanna y Matt tienen su día libre así que tenemos la casa para nosotros solos.— Musitó en forma sugerente.Ella asintió y le dedicó una mirada de complicidad, para ambos
Siempre fuiste tú.Capítulo 17.El personal de la casa recibió a Elisa a las mil maravillas, todos la adoraban, pues ella en todo momento se comportaba de manera amable con todos ellos llegando a formar fuertes lazos de amistad sobre todo con Matt y Hanna, quienes la apreciaban profundamente y en ningún momento tuvieron ninguna duda de que ellos terminarían por reconciliarse.Por otra parte, Ana había pasado toda la noche fuera de su casa, después de lo que pasó con Billy no había querido regresar, sabía que su madre estaría esperándola y lo que menos deseaba en ese momento era soportar el drama que Clarissa le haría.Abrió la puerta y entró de puntillas procurando evitar que su madre se diera cuenta de que había llegado, pero Clarissa quien se encontraba en la sala de su casa tomando un té y arreglándose las uñas como si nada estuviera pasando, no tardó en percatarse de la presencia de Ana, y tal como era de esperarse, comenzó a actuar como si hubiese estado preocupada por su hija.P
Siempre fuiste tú.Capítulo 18.La llamada entre Tony y Diana no sería en vano, ya que era lo que necesitaban para aliarse y acabar con la felicidad de Luke y Elisa. Tony estaba muy resentido porque por más que insistió, Elisa jamás le hizo caso, pues ella tan solo lo veía como un buen amigo por el cual sentía un gran aprecio ya que él había estado cuando ella más lo necesitaba, no obstante, lo que Elisa nunca imaginó, era que quien le demostraba tanta solidaridad, no era más que el causante de todo su sufrimiento.Tony creyó que al terminar su relación con Luke tras el divorcio, ella acabaría olvidándose de él y de esa forma el camino quedaría libre para poder conquistar a Elisa; pero ella nunca pudo olvidar a Luke, aun estando separados él seguía siendo su gran amor, y el único hombre con el que ella quería estar.Tony era muy insistente, y buscaba por todos los medios conquistarla, pero al tener en todo momento una negativa por parte de ella, este se encaprichó con Elisa y juró te