Me levanté rápidamente, intentando mantener la compostura.-Alfa Lucien… - dije intentando parecer fría. Sin embargo mi voz temblaba.-¿Qué ocurrió? ¿No te gustó tu habitación? -De muy mal gusto, la verdad – dije seria.-¿De verdad lo crees? Pensé que disfrutarías de una habitación más sofisticada. Pensé que sería de mal gusto dejar la decoración de cachorra que tenías en tu antigua habitación.-¿Qué pretendes, Lucien?-A decir verdad, no pretendo nada… solo estoy apelando a la misericordia de la diosa de la Luna… es válido reconocer mis errores ¿No crees? – se acercó, mi corazón se aceleró. Yo retrocedí - ¿Qué ocurre? Retrocedes… esa no es la Ayla que yo conocí.-La Ayla que conociste ya no existe. -Yo no lo creo, aun hoy, puedo ver tu espíritu fuerte y tu empeño en imponerte por sobre un Alfa – intenta acercarse nuevamente.-No te acerques – le dije con fuerza en mis palabras y creé una barrera de agua entre los dos, con mi magia. Lucien observó con algo de impre
Volvimos a la casa de la manada Luna Zafiro. Caminé rápidamente hasta mi habitación, pero ellos ya no estaban allí. Pasé al despacho de Lucien, pero él tampoco se encontraba en ese lugar; sobre el escritorio tenía un libro abierto, sobre magias elementales. Volví hasta la sala de estar, casi al mismo tiempo que Violet regresaba del ala contigua de la casa.-No están aquí, sólo está mi madre recostada, descansando – dijo Violet agitada.-¿Qué ocurre? – Preguntó Beth, saliendo desde la cocina. -¡Beth! ¿Donde están todos? – pregunté-Lucien fue con Alan y Darius al bosque… ellos querían conocer la cascada.-¿Y Emil? ¿Y Darien?-En la frontera esperando a recibir a los Alfas.-Oh… por la diosa – dije tapando mi rostro con mis manos – debemos irnos.-¿Qué ocurre? – dijo Beth-No hay tiempo – replicó Violet tomándola de un brazo.Salimos rápidamente llevando a Beth, que nos seguía sin comprender. -¿Se fueron hace mucho? -Pues no en realidad… - nos sujeta y se detiene
Durante el tiempo que permanecí fuera de la casa de la manada, sólo llegaron dos manadas, las que fueron muy bien recibidas por Emil, Darien y Beth, por lo que mi ausencia no fue especialmente notoria. La mayor cantidad de invitados no hicieron su entrada, sino, hasta llegada la tarde y posterior noche. A cada momento que podía escaparme unos segundos, subía hasta la habitación de Ayla, para ver si se encontraba bien; una gran dificultad de amar a un ser elemental, es tener la incertidumbre de si en algún momento despertará y simplemente desaparecerá. Sin embargo, para cuando fui en la noche a verla, ella estaba de pie frente a la ventana observando la Luna. Me acerqué, suavemente junto a ella y puse mis manos en sus hombros. Ella bajó la mirada. Besé su cuello y le hablé suavemente. - ¿Crees que podrás perdonarme? - … - tardó en responder – todo lo que ocurrió en el pasado, quedó atrás, Lucien. Me puse frente a ella para mirarla de frente. - Si me aceptas, seré el lobo más feliz d
Esa noche, después de cenar, Lucien despidió a los que estaban allí. Y yo me quedé un momento hablando con Beth.-Mañana Lucien llevará a los Alfas y sus Lunas a conocer la ciudad. Tal vez sería un buen momento para tener una salida nuevamente tu y yo. Fue muy divertido la última vez – me dijo Beth-No quisiera dejar sola a Violet... tal vez lo mejor será que me quede aquí con ella.-¿Qué ocurre, Ayla? Te noto preocupada – preguntó-Beth… mañana cumplo los dieciocho años… no sé que pensar. Ahora que estoy sola, temo ser reclamada por algún Alfa.-¿Y si Lucien te reclama? ¿Se lo has dicho ya?-¡Claro que no! En realidad no quiero que nadie se entere. No me siento preparada para esto aun. Lo de Alan es demasiado reciente y… todavía tengo cosas que resolver – aún no sé como reaccionarán todos cuando sepan que soy una loba sin pareja y embarazada.-… - me miró fijamente con su agudeza – mmm… pues, vamos con Violet. Será bueno para ti relajarte un poco, yo me encargaré de que
Bajamos al gran salón. En esta gran gala lobos de todas las manadas invitadas buscaban pareja, por supuesto, la noticia de la hembra Alfa vurmita sin pareja se había extendido en todas las manadas, por lo que al llegar al gran salón muchos lobos jóvenes se agolparon a hablarme. Jamás en mi vida sentí lo que era ser acechada por una multitud, como si fuese una gran estrella de cine. Sonreí cordialmente, sin sabes como reaccionar o que decir frente a esa situación; sin comprender por qué, mi loba llamaba a Lucien. Caminé entre la multitud, sin encontrarle. Beth estaba junto a su pareja Darien, Emil abrazaba a su pareja Cyrille.“¿Donde esta Lucien?” – replicaba fuertemente Alira en mi interior. Empecé a sentirme algo sola y ahogada con todos a mi alrededor. Caminé hacia las compuertas que daban al patio interior de la casa de la manada y allí estaba Lucien. Al verle, mi corazón saltó; sonreí sin poderlo evitar. Alira saltaba de emoción en mi interior, cada célula de mi cuerpo reaccionó
-¿Qué estás pensando? – me preguntó Lucien, al verme ensimismada. -Pienso en todo lo que pasamos en este corto período de tiempo… definitivamente no somos los mismos de hace tres meses.-Sin embargo, todo nos ayudó, mi amor. Tu hoy eres Alfa de una manada, eres toda una loba, maravillosa, segura de sí misma, admirable… -¿A sí? ¿Consideras que ya estoy a la altura del gran Alfa Lucien?-Siempre estuviste a la altura, hermosa… soy yo el que no supo ver la maravillosa loba que tenía frente a mi. Tu tenías razón… yo era un lobo con muchos conflictos… gracias a que me hiciste ver la verdad, tuve la oportunidad de hacer cambios.-Y, dime. Tu sabes muy bien lo que pasó con mi antigua pareja… pero ¿Qué hay de la tuya? Aprendiste todo esto con ella… - indiqué la habitación a mi alrededor.-Ay… - sonrió mirando la habitación – Esto solo era una forma para suplir tu ausencia… jamás fue suficiente, me hacías falta tu. Contigo es con la única loba que puedo sentirme completo. A part
-Alan… ¿Tu qué haces aquí? – dijo Lucien-Él es la pareja de nuestra Alfa – dijo Beta Teo.-Ya no lo es… - dije firme-Esperaba que al llegar, pudiésemos arreglar las cosas y conversar con más calma – dijo Alan calmadamente y algo entristecido – sin embargo… veo que alguien más se adelantó-Sabes que la diosa de la Luna siempre tiene la última palabra – dijo Lucien firme.-Claro… puedo verlo. Luna reanudó vuestro lazo ¿No? – suspiro con una sonrisa de resignación y tristeza en los labios.-¿Qué esperabas, Alan? Me engañaste – dije - Intentabas matar a Lucien… -Darius intentaba hacerlo… - dijo Alan excusándose-Darius no conocía la verdad… ¡Tu sí! – repliqué – Tu sabías que nuestras madres eran hermanas, y lo callaste… permitiste que su odio lo llevara a querer asesinar a Lucien y no lo impediste. Estabas dispuesto a permitir que nuestra familia estuviera ligada a una herencia de sangre. Sabes que es lo que he querido eliminar de nuestras vidas desde que asumí como A
El silencio se apodero del lugar por unos segundos y después los murmullos se dejaron escuchar. -Les daré el tiempo que requieran para tomar la decisión. Estaré en mi oficina. Salí de la sala de reuniones, Lucien me siguió hasta mi oficina. Estando allí logré respirar largamente. Observé por el ventanal, el hermoso paisaje; ese lugar había sido mi refugio estos últimos meses. Me es difícil imaginar mi vida fuera de la manada Luna Amatista… ¿Qué decidirán? ¿Mi presencia en esta manada será necesaria? ¿O preferirán al lobo con más experiencia, en vez de a mi? La voz de Lucien me sacó de mis cavilaciones.-¿Qué piensas, Ayla?-Analizo las cosas. Tal vez este sea mi último día aquí…-¿De qué hablas, Ayla? ¿De verdad crees que preferirán al lobo que te traicionó-Él desempeñó el rol de Alfa dos años antes que yo, tiene más experiencia.-Pero tu eres infinita, insuperablemente mejor que él – se acercó a mi y me tomó de la cintura con una mirada ardiente en sus ojos.-Lucien… e