Cuando terminaron de besarse, Ashley se acercó a Austin para abrazarlo, ella no entendía porque él estaba actuando de esa forma, porque de repente se acercó a besarla en privado, sin cámaras que los estuvieran grabando y extraños tomándoles fotografías. No le importaba las razones, y ella que era tan simple, aceptó la muestra de cariño sin chistar, porque la pelinegra no podía ocultar lo mucho que le gustaba ese hombre a pesar que él hacia lo que le daba la gana con ella. Sin embargo, lo que Ashley no sabía, era que en ese momento, mientras el rubio correspondía el abrazo que ella le estaba dando, él prefirió dejar de pensar, de reprimirse porque se sentía cansado de vivir siendo un hombre infeliz por tantos años, es por ese motivo que Austin también abrazaba a Ashley con fuerza mientras decía:
—Vamos a casa&hell
Cuando terminan de hacer el amor Austin y Ashley se mantienen en la cama acostados. La joven aprovecha para acercarse a él acariciando su pecho, y luego aprovechando para tocar su torso desnudo viendo que en sus costados el rubio también tenía tatuajes, y cuando lo tocaba en esas zonas, podía sentir áreas abultadas. La pelinegra de inmediato recordó cuando él le mencionó que sus tatuajes eran solo para cubrir cicatrices, y aunque deseó preguntar que le había pasado en esas zonas que tocaba, prefirió no hacerlo porque ese momento ella se encontraba en el cielo y no iba a bajar, hasta que decidió confesar diciendo:—Austin…—¿Dime? —pregunta el hombre, volteándose para verla.—Esta fue mi primera vez… si vistes que no supe moverme o algo, es por eso —confiesa Ashley, al instante que
Al día siguiente: Ashley se había levantado temprano en la mañana, y cuando se sentó en la cama, sentía como si hubiese corrido una maratón, de lo mucho que le dolía el cuerpo, principalmente sus piernas. La pelinegra con sumo cuidado se levantó llevándose una mano a sus caderas mientras caminaba como una anciana de sesenta años, sabiendo que el responsable de sus achaques era Austin. Jamás imaginó que su primera vez iba ser de esa forma, pero lo peor de todo, es que ella le gustó las “dos versiones” de Austin: la sutil, y la ruda. Pero ella no quería admitirlo abiertamente porque se sentía impura por tan solo pensarlo, ya que durante toda la noche, recordó cuando Austin limpiaba sus partes íntimas, su cuerpo tonificado y tatuado, su hermoso rostro, su voz, la forma como… —¡Que me sucede, yo no soy así! —exclama Ashley sintiendo que en ese momento, había abierto una caja de pandora.
Steven observaba desde la ventana de la tienda, como Ashley se iba con su prometido millonario. No iba a negar que sintió celos porque él sabia que no tenia ninguna posibilidad con la pelinegra, y además sintió molestia porque era evidente que ese hombre estaba haciendo toda una escena, solamente porque ella estaba hablando con él. ¿Tan inseguro era?, pensaba Steven porque él logró darse cuenta, que la forma de actuar de Austin Collins por él, era movida principalmente por los celos.«¿Realmente un hombre como él, puede sentirse inseguro con una persona como yo? »piensa Steven sintiéndose sorprendido, ya que eso solo significaba que la relación entre Ashley y él, no era tan sólida como ellos aparentaban ante el mundo.Por otra parte, cuando Ashley y Austin salieron de la tienda, la pelin
Cuando la joven terminó de hablar, Austin emitió una risa regresando la atención a su comida diciendo: —Tu forma de hablar me recuerda mucho a tu padre… —Soy su hija, algo debo haber sacado de él —responde Ashley sin saber que esa respuesta, hizo que en ese instante, algo cambiara dentro de Austin. —Si… después de todo, tienen la misma sangre aunque no te parezcas en nada a él físicamente —responde el rubio regresando la atención a su comida —cuando termines de comer, nos iremos a casa —dice, con su vista enfocada en su almuerzo. Ashley emitió un resoplido respondiendo: —¿Quién te dijo que yo deseo regresar ahí? —responde Ashley, notando como Austin estaba actuando demasiado tranquilo. —Vamos a regresar los dos a casa… —responde Austin, limpiando sus labios con una servilleta —No sé si leíste el contrato que te hice f
Luego de la bofetada recibida, los ojos de Ashley comenzaron a llenarse de lagrimas ¿Eso significaba que Austin durante todo este tiempo la estaba usando a ella, para destruir a su padre? ¿Por qué hacia esto?, se preguntaba Ashley viendo como la mejilla del hombre en ese momento se encontraba enrojecida, por la bofetada que ella le había acabado de dar a Austin.—¿Entonces todo era mentira?, tú me dijiste que si nos casábamos, la reputación de mi padre mejoraría y las acciones volverían a subir.Cuando Austin escucha las ingenuas palabras de Ashley, una vez más comienza a reírse negando con la cabeza. Ashley siente como sus ojos comienzan a inundarse de lágrimas, pero rápidamente las remueve, porque no deseaba llorar frente a ese hombre que en ese instante desconocía.«Espera un momento »se dice Ashl
Al día siguiente: Austin se encontraba en su oficina leyendo unos documentos que firmaría, cuando en eso entra su secretario Daniel, porque Austin lo había llamado para hablar con él. Cuando el hombre entró, el rubio le pidió que tomara asiento y él simplemente obedeció viendo como su jefe en esta ocasión alzó su vista para mirarlo. —Ejecutaremos en plan B —dice Austin sin entrar en demasiados detalles, viendo como su secretario abría sus ojos por la sorpresa. —Esta bien, le indicaré al señor Hong que debe actuar de inmediato —responde Daniel, sacando su Tablet deseando preguntar porque ejecutarían el «plan B» sin embargo, temió hacerlo porque a su jefe no le agradaba hablar demasiado de su vida privada, desde aquella ocasión hace quince años que era el tiempo que él tenia conociendo a Austin. —Le conté a Ashley lo que pienso hacer con su padre —confiesa Austin leyendo los pensamientos del se
Tres semanas después:Ashley se encontraba en la cama, viendo como Austin se levantaba completamente desnudo para ir al baño a asearse, como siempre hacia cada vez que terminaban de tener sexo. Había transcurrido casi un mes desde que ella se enteró de los planes del rubio, pero a pesar de eso, ellos durante ese tiempo continuaron intimando porque por muy loco que sonara, ella todavía lo seguía deseando de forma carnal, amándolo, y odiándolo por todo lo que hacía a pesar que ella ya sabía las intenciones y los verdaderos motivos del por qué continuaban juntos. El hombre siempre iba a visitarla, discutían, ella le gritaba que se fuera, terminaba llorando, y después toda esa escena culminaba con ellos dos acostados en la cama copulando como conejos. Su ciclo no era nada sano, pero Ashley y Austin no podían escapar, ya que era como si ambos fuesen el vicio del otro y c
Durante la fiesta de inauguración, Ashley observaba impactada como Austin hablaba con su padre como si fuesen los mejores amigos. Entre risas y una conversación amena, Austin bebía junto con Brandon y Ashley apartada de ellos, los veía en la distancia acompañada con Steven, porque ella realmente no quería ser participe del enfermo juego del rubio que Ashley en algunas ocasiones olvidaba. ¿Por qué Austin odiaba su padre?, siempre se preguntaba la pelinegra deseando saber esa verdad. En eso, mientras Steven continuaba hablando con ella quien sabe qué, porque la joven no lo estaba escuchando, observa a lo lejos al secretario Daniel comiendo un pedazo de pastel, mientras estaba en su Tablet anotando algo.«Nunca he hablado en privado con Daniel… tengo entendido por Doris, que él es el trabajador mas antiguo de Austin, al igual que su chofer, qui