Hola :D no se olviden de darle amor con puntuaciones y comentarios
La luz del tocador reflejaba mi maquillaje haciéndome parecer una verdadera muñeca. Claire con su poca experiencia me estaba ayudando con mi cabello que habia crecido exageradamente rápido desde el embarazo. —Estas preciosa —su sonrisa sincera iluminando su rostro—. Estar embarazada te da un brillo especial. No pude evitar sonreír de manera viva, sintiendo cómo esas palabras absorbían un poco de la tensión acumulada en mi pecho. Era cierto que mi cuerpo había cambiado, pero me gustaba pensar que la vida que crecía dentro de mí también iluminaba mi espíritu. Giovanni habia hecho que un doctor me examinara en su propiedad, pero además de eso no podia salir para absolutamente nada. —Recuerda, debes estar con Noah la mayor parte del tiempo —sugirió, dejando caer la indirecta con la suavidad de un susurro. Entendí a qué se refería. La fiesta no sería un paseo por el parque, y Noah sería el refugio en este mar de incertidumbres. La imagen de un matadero se formó en mi mente y, aunque el
El aire en la sala de la fiesta de Gala era un torbellino de risas y música, pero todo se desvaneció en un instante. Justo cuando Giovanni se inclinó hacia mí, sus labios a un suspiro de los míos, el retumbar de disparos rompió la burbuja que habia entre nosotros. El sonido era espantoso y, en un parpadeo, siento sus fuertes manos en mi cuello, sujetándome con fuerza.—¡No! —gimoteo sin poder evitarlo, la adrenalina disparándose en mis venas. Aunque intente escapar su fuerza me retuvo. Giovanni, con una sonrisa cruel en el rostro, me utilizó como un escudo humano. Su mirada brillaba con frialdad mientras me apuntaba en la cabeza con el arma que estaba en su otra mano. La risa viscosa que escapó de sus labios era como un eco oscuro en la atmósfera caótica.—¿Qué ocurre, Montenegro?¿Acaso estás celoso? —preguntó con tono burlón, mostrando satisfacción y desafío en su voz. A lo lejos, vi a Derek, su figura tensa y su arma en mano. Lo vi vacilar, su dedo fluctuando en el gatillo mientra
Estaba sentada delante de la televisión, acariciando mi vientre abultado, sintiendo cada pequeño movimiento de mi bebé. La luz parpadeante de la pantalla iluminaba la habitación, y la voz grave del presentador llenaba el aire con una noticia que, a pesar de lo impactante, me dejaba la mente en blanco. Hablaban de un grupo criminal, de tiroteos y enfrentamientos, de muertes. A medida que se desarrollaba la historia, el nombre de Derek Montenegro resonaba en mis oídos como un eco lejano. Se señalaba a Derek como el propietario de uno de los hoteles más reconocidos en California, el cual estaba siendo investigado por su presunta asociación con actividades delictivas, ya que el padre de Derek, había heredado ese negocio tras el fallecimiento.Por igual escuchaba como hablaban de Giovanni Bianchi, el líder del grupo contrario, y cómo ambos habían encontrado su final en un incendio en una sala de gala donde al parecer ambos quedaron atrapados al enfrentarse en un tiroteo. Según la noticia, s
Mientras acomodaba una bandeja de pastelitos recién salidos del horno, sentí cómo el suave viento de la tarde acariciaba mi rostro a través de la ventana abierta de la pastelería. El olor a vainilla y chocolate impregnaba el ambiente, una combinación exquisita que siempre me hacía experimentar una sensación de hogar. Aunque Sebastián me había dado una suma excesiva de dinero, decidí aceptar un empleo de medio tiempo en una tienda de pasteles. Mientras Derrick estaba en clase, era una forma ideal de mantenerme entretenida. Mientras acomodaba los pasteles en su posición, un destello de color capturó mi mirada. De repente, surgieron flores vivas y llenas de color, como un obsequio espontáneo de la naturaleza. Cuando alcé la mirada, me topé con Rune. Siempre que estaba presente, irradiaba una energía vibrante que se percibía en el ambiente. Sonrió de una manera vivaz y seductora, esa sonrisa que hacía que mi corazón latiera un poco más rápido. No quería admitirlo, quería guardar mi co
Un abrazo que pareció eterno, el viento chocaba en mi rostro pero me sentia totalmente relajada. —Te he encontrando…y no pienso perderte…—murmuro levemente. —Derek yo tampoco pienso perderte.—Pequeña gatita, llámame Rune. He luchado con muchas personas y no quisiera ponerte en peligro sin saber.Con suavidad, volvía a tocar su rostro mientras sonreía con una leve expresión de melancolía. —¿Sentiste dolor?—Es en exceso. —sonrió con una ligera mueca—Pero lo que mas me dolió fue quitarme mis tatuajes.—Sí, me lo puedo imaginar, dejar atrás esa imagen de bravucón. —hablaba ligeramente con sarcasmo.—Pero esa apariencia fue la que te volvió loca. —Mordisqueaba mi cuello agarrándome con posesión mi trasero. Un leve gemido se escapo de mis labios mientras escuchábamos una fuerte tos que nos obligo a ver que alguien nos juzgaba con la mirada.—Jóvenes, les recomiendo que vayan a su casa que por aquí están los niños y ancianos que no queremos ver eso.Tanto Rune como yo nos reímos ligerame
Rune MontenegroCorría de manera apresurada abriendo la puerta de golpee. Mientras sostenía el arma, el frío se colaba por mis manos mientras apuntaba hacia la distancia y veía a Eloise amarrada. El miedo se apoderó de mí, gritaba desesperadamente sin ser escuchado. En ese momento, presencié a un individuo con capucha apuntando hacia su cabeza. Un potente disparo resonó y terminó con su vida.—¡No! —me levantaba de golpe.Me senté con una respiración agitada. Con mi cuerpo empapado de sudor, observaba a Eloise a mi lado, profundamente dormida. Un año había transcurrido desde que logré liberarme de esas terribles pesadillas. ¿Por qué volvía a tenerla?La situación se asemejaba a un filme mal narrado que se reiteraba una y otra vez... Giovanni había sido una molestia constante para mí. Aunque lo hubiera eliminado, parecía como si fuera un insecto que había esparcido su veneno. Nunca había imaginado que el estaba profundo con los negocios que se había aliado con varios grupos para derr
El sol de Costa del Sol entraba a raudales por las ventanas mientras organizaba el apartamento que habíamos adquirido hace un mes atrás. Mientras recogía los juguetes de Derrick, notaba cómo se multiplicaban misteriosamente. Rune y yo habíamos decidido mudarnos aquí tan pronto como él terminó su año escolar, pues Rune deseaba que Derrick tuviera una enseñanza de calidad y competitiva que en el pueblo no podría tener. La vida aquí era un sueño, con el mar susurrando a lo lejos y la brisa cálida llenando el espacio de felicidad. No obstante, en medio de la emoción de comenzar una nueva etapa, algo me generaba preocupación.Con un suspiro, dejé de lado los bloques de construcción y me senté en el sillón, tomando un momento para mí. Cogía mi teléfono para distanciarme un poco de mi rol de madre y simplemente ser yo misma. En ese momento, me di cuenta de algo extraño. Últimamente, había un extraño que parecía estar siguiendo mis redes sociales. De pronto, noté que había obtenido varios 'me
Desde hace una semana que tenía un personal de dos seguridades que me seguían a lo lejos mientras Derrick tenía uno dentro de la escuela. Revisaba mi teléfono notando que tenia una solicitud de amistad con la cuenta que me había estado siguiendo, notando que era una cuenta sumamente nueva. Mientras estaba relajada….la volví a ver a ella.En esta ocasión, portaba un paraguas azul oscuro. Siempre se colocaba en el mismo sitio, a mi lado, lo cual empezó a despertar mis sospechas. Cada vez que la observaba, una extraña impresión me invadía el cuerpo. Con un aura enigmática, la mujer daba la impresión de estar vigilante, sin conocer la razón. Permanecí de pie, contemplando a la mujer desconocida mientras también dirigía su mirada hacia la entrada de la escuela, como aguardando algo. Sentía cómo mi corazón palpitaba con intensidad, sin estar seguro si era a causa de la intriga o de la tensión en el aire. Avancé un paso, clavando la mirada en sus ojos, hasta que finalmente me decidí a expre