Capítulo 31.Marcus se quedó de piedra al encontrarse con su hermano, tenía entendido que él se encontraba del otro lado del mundo realizando importantes negociaciones para la corona, pero si estaba en el palacio, eso significaba que el rey tenía algo importante para decirles, lo cual no le gustó para nada, pues siempre que se situaban frente a frente se desataba la guerra entre ellos.– Vaya, hasta que el favorito del rey hace su aparición – ironizó Marcus mirando con gesto de pocos amigos a su hermano.– Su majestad me ha pedido que venga, así que aquí estoy – contestó sin más.– ¿Tienes idea para que nos llamó? – Inquirió con curiosidad.–En lo absoluto, pensé que tú lo sabrías – respondió Max.– Supongo que no nos quedará más remedio que averiguarlo, vamos, no lo hagamos esperar –.Los príncipes caminaron por el ala real donde el rey tenía sus habitaciones hasta llegar a una espaciosa estancia donde se hallaba su despacho, para Marcus la presencia de su hermano era insoportable, e
Capítulo 32.Catherine tomó la frazada que había sobre la cama para cubrirse, esto ante la mirada atónita por parte de Zack, a quien le fue imposible reprimir una gran carcajada. El gesto de la joven se le hacía tan infantil, característico de su inocencia y su forma de ser.–Zack, ¿qué estás haciendo aquí? –lo reprendió ruborizándose desde la cabeza hasta la punta de los pies.– Sólo venía a decirte que ya está listo el desayuno, cariño – dijo sin poder parar de reír.– ¿No te han enseñado que debes llamar a la puerta antes de entrar a una habitación? – continuó regañándolo.El quiso avanzar hacia donde estaba ella para darle un beso, pero la chica retrocedió entrando rápidamente al cuarto de baño completamente avergonzada.– Vete para que pueda vestirme – gritó.Zack no podía parar de reír ante la actitud de Cat, así que decidió hacerla sufrir un poco más.– ¿Pero por qué te ocultas, pequeña?, si estás hermosa – soltó con desparpajo incrementando aún más el rubor de las mejillas de
Capítulo 33.Catherine se quedó paralizada por un momento sin saber como actuar ni qué decir, desde su llegada a Anderson publicidad, las burlas por parte de algunos empleados y de las modelos no se habían hecho esperar, y aquello ya estaba empezando a colmarle la paciencia, se obligó a mantener una postura erguida y con la frente muy en alto tomo la determinación de enfrentar a esas mujeres frívolas y sin corazón.–Suéltame – dijo con autoridad ante la mirada expectante de la mujer que sostenía fuertemente su brazo.– Tú no eres nadie para ordenarme – contestó la modelo con ínfulas de superioridad.–Te dije que me sueltes – espeta Cat perdiendo los estribos.Las modelos estaban estupefactas ante la reacción inesperada de la que ellas veían como alguien insignificante, y por supuesto que nunca se imaginaron lo que estaba por suceder.– Si sabes lo que te conviene, nunca en tu vida vuelvas a intentar tocarme – pronuncia ella con una seguridad que causó impacto a todos los que la miraba
Capítulo 34.¿Quieres acompañarme a casa? – le preguntó estupefacta y sin que se le ocurriera qué decir para que no lo hiciera.– Sí, claro, eso dije, tuviste un muy mal día y no pienso dejar que te vayas sola, así que iremos en mi coche y alguien más se llevará el tuyo – contesta decidido.Catherine estaba en serios problemas, y solo un milagro la podría salvar, pues si él decidía acompañarla, no le daría tiempo de cumplir con el horario establecido por el Olimpo, y llegar tarde la haría acreedora a una penalización y a estas alturas y faltando tan poco para terminar el contrato, eso sería lo peor que podría pasarle. Se dirigieron hasta la entrada del edificio y Cat le daba vueltas a su cabeza tratando de encontrar una solución ante semejante encrucijada, cuando de repente el móvil de Zack comenzó a sonar, se detuvieron y entonces él se limitó a contestar.– Es Alan, mi amigo de toda la vida, que quiere ahora – dijo a propósito en voz alta para qué su amigo del otro lado de la línea
Capítulo 35.– Volvemos a vernos, Afrodita – dijo Zack haciendo acopio de todas sus fuerzas para mantenerse neutral.Catherine no podía creer lo que sus ojos estaban presenciando, ver a Zack en ese lugar era como si una puñalada estuviese atravesando su frágil corazón, pues se suponía que las andanzas del pasado habían quedado atrás, y en ese momento se estaba dando cuenta de qué no era así. Con esas actitudes, Zack le estaba demostrando que no era una persona en la que se pudiera tener plena confianza, y que al igual que ella, tenía secretos ocultos.– ¿Cómo está, señor Anderson?, tenía tiempo que no venía por acá – contestó Afrodita buscando las fuerzas desde lo más profundo de su interior aún cuando en el fondo se sentía destrozada.– Eres el mejor espectáculo de este lugar, Afrodita, siempre es un deleite verte – intervino Alan salvando la situación.– Muchas gracias, pero ahora debo retirarme, sólo vine para saludarlos, se quedan en compañía de Venus, ella estará encantada, ¿cier
Capítulo 36.– ¿Y qué pasó, Zack? – inquirió ella rogando al cielo para que no le dijera lo que tanto temía.– Sólo hablamos un poco, amor, pero necesitaba que lo supieras, tú siempre haz sido muy honesta conmigo y lo mínimo que yo puedo hacer es retribuir de la misma forma – le dijo y esas palabras le causaron un gran dolor a la chica pues ella no había sido honesta del todo.– Agradezco tu sinceridad, ¿pero me gustaría saber por qué volviste a ese lugar? ¿por que si tienes una relación conmigo fuiste a verla? – cuestionó abrumada.– Sólo fui a acompañar a Alan, él hizo las reservaciones –.– Lo entiendo, pero tú sabías que te encontrarías con ella–.– Sí, no puedo mentirte, por favor perdóname, sé que no debí acompañarlo, pero tenía que hacerlo – confesó apesadumbrado.Cat sintió como su mundo se le venía encima, estaba atrapada entre sus dos personalidades, y lo peor era qué su gran amor también lo estaba, y a juzgar por su expresión y por las cosas que le estaba diciendo él se sen
Capítulo 37.El impacto fue muy fuerte, Cat empezó a ver todo negro y poco a poco fue perdiendo la conciencia, la gente murmuraba y el caos se apoderó del lugar. Los servicios de emergencia llegaron llevándose a la chica para ser atendida, entre sus pertenencias encontraron el número de su madre, así que se comunicaron con ella para darle la desafortunada noticia.– Sra, esta llamada es para informarle, que su hija la señorita Fletcher ha sido internada en el hospital central debido a un accidente automovilístico– comunicó el paramédico.El miedo se apoderó de Amanda, pero no por el hecho de poder perder a su hija, si no los beneficios que le traía tenerla.– Dios mío, no puede ser, ¿pero cómo está ella? – preguntó buscando llamar la atención como siempre.– Su estado es crítico, por lo que será mejor que venga al hospital cuanto antes – contestó el joven.Catherine fue ingresada al área de terapia intensiva, y de inmediato fue conectada a un sinfín de aparatos para monitorear su esta
Capítulo 38.Zack se sentía morir al escuchar aquella noticia tan terrible, no podía soportar el dolor que su corazón estaba experimentando en ese momento, su amada Catherine estaba en el hospital y él no había estado con ella para protegerla. La culpa lo invadió por completo, pues seguramente Cat iba distraída y por eso tuvo aquel accidente, se dijo que tuvo que haberla seguido, acompañarla hasta su casa y tal vez de esa forma no le hubiera ocurrido nada, pero no lo hizo, y ahora estaba pagando las consecuencias de haberse descuidado de aquella forma.– Le dijeron a qué hospital la llevarían? – Interroga con preocupación.– No, joven, no tengo ni la menor idea, siento no poder ayudarlo – contestó la señora haciendo que la impotencia creciera aún más en él.Salió a toda prisa del edificio, tomó su coche en el trayecto hizo varias llamadas para que su equipo de seguridad de inmediato se pusiera manos a la obra para localizar en donde estaba hospitalizada Catherine. Por primera vez todo