A Nani, no le quedaban dudas, de que la culpable de esto era Camila, y sabía que esta la odiaba por lo sucedido aquella noche en que Andrés abusó de ella, ahora se estaba vengando y David había caído en su juego. Simplemente, esto no se quedaría así, los padres de Nani, harían cualquier cosa por ver feliz a su hija, Nani, pidió una sola cosa a sus padres, acabar con Camila y con todo a su alrededor, sin perder tiempo. Camila, sabía que esto le traería muchos problemas con todos, tanto con la familia Reyes, como con la familia Uribe. Ahora era culpada por lo ocurrido en la boda, estaba más que segura, que no era su culpa, no tenía nada que ver con lo que había pasado, decidió no prestar tanta atención al asunto e ignorar lo que los medios decían de ella. Pero una cosa pensaba ella y otra Nani, quien no perdió tiempo y decidió actuar de inmediato.Una llamada entró al móvil de David, no deseaba hablar en este momento, pero era insistente. — ¡David! ¡Me las vas a pagar, tú y esa perra!
Camila despertó, estaba sobre una cómoda cama, tenía su pierna vendada, quiso tocarla, pero no pudo, le dolía también su mano derecha, se levantó de la cama con mucho cuidado de no caerse, ya era de mañana, había dormido toda la noche ¿Dónde se encontraba y quien la había traído hasta aquí? Dando saltos con una sola pierna, fue hasta el gran ventanal con una vista maravillosa, muchas plantas en un hermoso jardín, una gran playa y el mar tranquilo, sencillamente un lugar encantador ¿Por qué no recordaba nada de lo ocurrido durante la noche? Tampoco recordaba ¿Por qué estaba en este lugar? En ese momento se abrió la puerta y entró David, llevaba unas bolsas en la mano, las depositó en el piso, solo se limitó a mirarla y salió cerrando la puerta. El corazón de Camila se había acelerado al ver que David estaba en ese mismo lugar, con ella. - ¿Qué hacía David aquí? Necesitaba muchas respuestas. Deseaba ducharse, desde el día anterior no lo había hecho y era una incomodidad terrible. El cli
— Ya extrañaba tu voz, tengo entendido que no puedes hacer ningún tipo de llamadas, es mejor por tu seguridad.— ¡Tomás, cuéntame cómo van las cosas!— No te preocupes por nada, todo se está manejando de la mejor manera. Solo quiero que te cuides, no quiero que te lastimen ¿Cómo se ha portado David contigo?— David, se ha portado como un caballero, es más, creo que me cuida y me protege demasiado, siempre sabe que quiero, y está siempre al pendiente de mis cosas.— ¿Cómo está tu pierna y tu muñeca?- Aún me duelen, pero ya me he sentido mejor.— Me alegra por ti, te estaré llamando solo cuando sea necesario, ya que pueden intervenir los teléfonos y no queremos que los encuentren.— Gracias, Tomás. ¿Qué haría sin ti?- ¡Cuídate, adiós!Para Tomás, la idea de que Camila, este a solas con David le molestaba de sobremanera, se había enamorado de la joven locamente, pero eran las órdenes del señor Julio, y este confiaba ciegamente en su nieto, que no le haría daño a la joven. Las pal
David salió de la habitación llevándose el móvil de ella. Para David recordar a cada momento lo que había sucedido esa noche, lo estaba matando, ahora se daba cuenta de la magnitud del daño que le hicieron, la habían humillado, ultrajado y no contentos con eso, la habían violado. María Antonia les propuso que les hicieran unas bromas a los chicos que estaban becados en la universidad, porque ellos no se merecían estar ahí, y que les enseñarían las diferencias de clases, en principio todos aceptaron, pues vieron que solo era para pasar el rato y divertirse, David no estaba enterado de los planes que tenían para con estos chicos, Nani y María Antonia si sabían que Camila había dicho que él le gustaba, pero eso también lo decían otras chicas. María Antonia se había fijado mucho en Camila y la odió desde que se enteró de que ella quería a su primo, y que pensaba decírselo algún día. El odio desmedido de María Antonia hacia Camila, era porque Andrea, siempre le contaba a ella lo que Camila
Un camisón y panti para tapar su desnudez, deseaba comer algo y fue hasta la cocina, un refresco para calmar la sed, de inmediato llegó David, su salvador, traía su pantalón puesto, arrogantemente apuesto, espalda ancha, brazos y piernas fuertes y bien formadas, bastante alto y de figura atlética. Sus ojos azules la observaban y escaneaban cada parte de su cuerpo, haciéndola sentir incómoda. Destapo la botella y se la entregó, volvió a besarla con las mismas ganas de hace unas horas, la miró a los ojos y se alejó. Él se fue hasta su habitación, pensaba en muchas cosas, se preguntaba si Camila había disfrutado tanto como él, si había sido muy rudo y la había lastimado, si ella aún lo odiaba. Pensando esto se acostó en su cama y pronto volvió a quedarse dormido. A la mañana siguiente, Camila aún seguía dormida, David preparó el desayuno y se lo llevó hasta la habitación, la dejaría descansar, mientras iría a la lavandería, había mucha ropa sucia, además era preferible estar fuera de ca
Julio Reyes fue llamado por la familia Uribe, el llamado que le hacían era urgente, Julio se acercó con sus guardaespaldas, no confiaba en nadie y menos en estas personas, que habían dado muestras de acabar con aquel que ellos quisieran.— ¡Queremos arreglar esto por las buenas!! – dijo Gonzalo Uribe, conocido desde hace muchos años y socio en algunos negocios.— ¡sé que estás protegiendo a la chica! ¡Entrégamela!- ¿Qué vas a hacer con ella? Dijo Julio Reyes un tanto preocupado.— No es de tu incumbencia. — continuo Gonzalo.— Es mejor que dejemos las cosas tal y como están. Tu hija debe entender que David ya no la quiere, ¡que se busque otro novio!- ¡No es fácil para mí, ver a mi hija llorar por un imbécil que la dejó plantada en el altar, Nani es mi bebe y por ella hago cualquier cosa!- ¡Yo también hago cualquier cosa por mi nieta! ¡Jamás te la voy a entregar, así que estamos a mano!— ¿De qué estás hablando? ¡Esa chica no puede ser tu nieta! ¡Conozco a toda tu familia!
— ¿Podemos dar inicio a la reunión?, creo que no falta nadie. -- Dijo la mayor de sus hijos.— Falta una persona, es muy importante. El mayor de los Reyes estaba demasiado pensativo, eso todos lo podían notar. — en ese momento llegó Camila, todos los presentes la observaban. María Antonia se levantó de su silla e hizo una de sus pataletas de niña tonta.— ¿Qué haces tú aquí?- Buenos días. — Camila saludo a todos, Julio reyes, la invitó a sentarse junto a él. Si todos ya estaban extrañados por esta reunión tan repentina, ahora con la presencia de esta chica las cosas parecían aún más extrañas. Andrés, quien se encontraba en un rincón del salón, se había puesto muy nervioso, la presencia de Camila en la reunión era demasiado extraña, además no quería que sus padres y sus abuelos se enteraran de su ataque sexual hacia ella. Camila al entrar vio a todos, sobre todo a Andrés, su corazón latía muy rápido, no quería siquiera verlo, y menos estar al lado de él, también vio a David, quien no
Camila no salía de su asombro, ahora pertenecía a la familia Reyes, entendía tanta amabilidad del señor Julio Reyes, la había ayudado porque él sabía que era su nieta, ¿se preguntaba si también sabia de la agresión de Andrés hacia ella? Para olvidar todo esto, decidió ir hasta la fundación o lo quedaba de ella. En su auto lloró su suerte, cada vez su vida le daba más sorpresas.Al llegar a la fundación, vio las instalaciones totalmente quemadas, que triste que esto hubiera pasado, los chicos la culpaban y al parecer tenían toda la razón, las cosas buenas las había traído ella, y también las cosas malas. Deseaba arreglar las cosas, los chicos debían tener de nuevo sus instalaciones, pero de nuevo era la falta de dinero. Ya lo había hecho unas veces y ahora lo haría de nuevo, buscaría patrocinadores, buscaría trabajo y ayudaría de nuevo a los chicos. Le pidió a Tomás buscar a los instructores, y tratar de calmarlos, ya que ellos no la querían ver, para que escucharan lo que tenía para d