Aiden Paxton:

No habían avanzado mucho cuando Aiden le espetó a Marck:

–Ya termina de hablar y deja de mirarme de reojo con esa media sonrisa.

–No tengo nada que decir.

–Mentira, te mueres por comentar algo sobre Arwen y yo.

–¿Cómo la pasaste?

–Muy bien, gracias por tu preocupación.

–No me preocupé, al ver todo el tiempo que pasaba solo para leer un correo y dar una recomendación, dejé de inquietarme para darle paso a la satisfacción que sentía por tener, una vez más, la razón.

–Pierdo todo el control de mí mismo cuando la tengo cerca.

–¿Y se lo dijiste?

–Se lo demostré con creces.

–A veces pienso que necesitas un manual, ella quiere oírte decir lo que sientes. ¿Tengo que aprender mandarín para explicártelo?, tal parece que el español no funciona contigo.

–¿Es necesaria la burla?

Mientras Marck reía a carcajadas, llegaron a la mansión de Aiden, se había i