Tener un propósito para despertar todos los dias es bueno, vivir con una meta es algo aún mejor.
La "doc" se ha tomado en serio lo de ponerme "encubierto".Ha abierto un mundo muy diferente a mis ojos, aunque no podemos hablar regularmente porque seria sospechoso, me proporcionó un pequeño micrófono del tamaño de una pasa pequeña el cual me indico como instalar en la celda, segun me dijo el dispositivo era potente y trasmitía a una distancia de 800 metros a la redonda. Con eso podía documentar las historias de las personas cercanas a mi celda, yo solo debía hacerlas hablar.
Haría lo mismo que con mis otros dos difuntos amigos me era difícil sabía que tarde o temprano ellos morirían pero debían ser los primeros y los últimos.
Así que una vez instalado el micrófono oculto empezaría. Según la información de la doc en las habitaciones no había cámaras pero en los pasillos sí, ademas todo estaba rodeado por personas fuertemente armadas y en medio del desierto controlado por el crimen organizado, las posibilidades de escapar de allí eran nulas así que no vigilaban directamente lo que hacían sus capturados ademas siempre se aseguraban que fueran gente con familia para que por miedo no escaparan ¿Inteligente no?Fue muy difícil la semana siguiente porque tuve que entrevistar a los que estaban en las celdas contiguas.
El sábado siguiente una nueva "ruleta" tuvo lugar, fue desolador murieron 3 hombres más y como si fuera una nueva burla del destino 2 eran los que había entrevistado, el grupo estaba reduciéndose, me sentía impotente no había sido preparado para eso, esas vidas perdidas eran importantes para mí.
El narrador descaradamente atribuyo el aumento de las muertes a la deuda de la trasmisión pasada y prometió más adrenalina en cada juego.
Tuve una fiebre que duró 4 días así que de nuevo tuve que visitar la enfermería, mi hígado estaba revelándose por la cantidad de sustancias a las que lo estaba sometiendo.
Hablé sinceramente con la doc y le dije que debíamos hacer algo pronto porque esa gente había cambiado los planes. Ella ya lo sabía, le pedí que hablara abiertamente de como había obtenido esa información y si ya lo sabia porqué no había hecho algo.
-La verdad es que en este momento no es prudente intervenir hay algo muy poderoso detrás de esto por encima de Hernán y su gente, se paciente por favor- explicó.
-Para ti es fácil decirlo porque no estas viendo gente morir frente a ti, sin poder hacer nada para ayudarlos- le reproche.
-¿Olvidas que soy médico? Mi deber es salvar vidas y estoy dejando que maten personas para mi también es difícil pero la muerte de ellos no será en vano, salvaremos muchas más vidas si evitamos que esto se replique en el mundo, tienes que saber sopesar ambos sentimientos y enfocarte en la misión- argumentó.
-No es fácil...- Dije titubeante.
- Esos hombres de los que hablas son apostadores ilegales sabían que los riesgos que tomaban, es importante salvarlos porque son seres humanos pero es mas urgente e imperativo salvar a las mujeres, niñas y niños que esta gente esta engañando en todo el mundo para traerlos aquí a satisfacer los deseos de una manada de cerdos asquerosos, nuestra misión es ayudarlos a ellos- Remachó.
- Entiendo me calmare y me enfocaré totalmente en la misión, dejando a un lado ese asunto acláreme ¿ Porqué ya sabia del aumento del numero de las personas que morirían?- dije interrogándola.
-Tengo mis fuentes... O.K?- respondió.
- Que clase de fuentes, sé clara- Insistí.
- Esta bien te diré, esta gente contrató a un ingeniero químico, él es el encargado de los venenos naturales y sintéticos, le pidieron aumentar el número de venenos paulatinamente- empezó a contarme.
Cada día me sorprendo de lo inescrupulosos que pueden llegar a ser las personas por dinero.
-Así que cada vez morirán mas...- murmure como para mi mismo.
-Lamentablemente por eso debes pasar de hacer seguimiento pasivo a algo más contundente, necesitamos saber que clase de gente poderosa es la que esta asistiendo a estos "espectáculos" así que vas a grabar la siguiente ruleta- propuso.
-¿Grabar?- pregunté sorprendido.
-Si lo que escuchaste, haremos con esto- dijo mientras sacaba algo de su bata. Sacó algo del tamaño del botón de una camisa.
-Escúchame bien, esto es una microcamara no es la mejor que tenemos pero grabará todo en buena resolución, transmite wireless así que el vídeo llegará a mi tablet tu solo preocúpate de que este en un lugar donde enfoque todo si encontramos algo bueno mejor dicho si vemos a un pez gordo ten la seguridad que presionaremos a el gobierno de este país para que intervenga en este lugar- dijo en un tono bastante seguro mientras ponía la cámara en mi mano.
Allítermino nuestra reunión llegue a mi celda y la oculte en un rincón de difícil acceso.Y esperé...Mientras tanto "trabaje en la misión" indagando sobre los que quedaban 7 en total incluyéndome.
Hablé con 2 más y el día de la ruleta antes de que nos obligaran a sentarnos conversé con los otros 4, supe sus nombres y un poco de porqué estaban allí, ya nos habíamos hecho a la costumbre, somos apostadores vivimos de la adrenalina, estábamos haciendo la máxima apuesta.
Esta vez no había rivales todos eramos vulnerables, mi supuesta "ventaja" podía terminar sí por ejemplo ponen cianuro que es letal al contacto con mucosas, heridas abiertas o si entra por el sistema respiratorio, en fin. Ya no me sorprendía nada, solo me puse una camisa con botones y reemplace el del bolsillo a la altura del pecho con la "cámara" no emitía ningún brillo o señal de que estaba grabando pero trate de moverme lo mas que pude por el lugar, espero que se hayan enfocado la cara de los malditos guardias y a los desalmados que vienen a burlarse de nuestra desgracia.
"La ceremonia" empezó y se degenero en dos nuevas muertes que dejaban 5 participantes. La siguiente sería hipotéticamente la penúltima ruleta o tal vez la ruleta final, con esta gente nunca se sabe.
Aunque el narrador no lo mencionó hizo énfasis en que solo quedaban 5, yo sabía que eso aumentaría frenéticamente las apuestas on-line sería como un rastro de sangre para tiburones hambrientos y ellos lo sabían.
Se me estaba acabando el tiempo, cuando regresé a la celda, traté de poner en orden mis ideas tenía un poco menos de una semana ¿Para qué? Que haría con ese tiempo tan corto.
Me acosté para pensar con más claridad pero un fuerte dolor abdominal me lo impidió, eran retorcijones, estaba teniendo contracciones musculares dolorosas, empecé a ver borroso perdí el equilibrio y me fui de bruces contra el suelo.
Allí me quedé sin poder moverme, estaba bloqueado, no podía gritar pidiendo ayuda, me sentí muy angustiado. Por fortuna en ese momento llegó la mujer del aseo, traía la comida y al verme tirado en el suelo reacciono inmediatamente, volteandome, le hice señas con los ojos, ella entendió y llamó a los guardias me llevaron a la enfermería.
Por suerte para mí el ataque duró unos minutos y estando en la camilla recuperé el control de mi cuerpo y lo primero que hice fue gritar, la doc vino hacía mí y me revisó. No había ningún guardia allí, tomó una muestra de mi sangre y mientras esperaba los resultados, hablamos.
-Doc, esta vez sí pensé que no la contaría, puede ser la última vez que me vea con vida y quiero pedirle algo por favor- Dije en tono serio.
Ellame hizo señas de que hablara con confianza.
-Siempreque este a mi alcancé, lo haré ¿Qué quieres?- dijo.
- Si algo me llegará a pasar, quiero que vayas con mi familia y los ayudes, es lo único que pido- dije suplicante.
-Cuentacon eso, te doy mi palabra de que así sera pero no te pongas sentimental, tu ganarás - dijo intentando bajarle el tono cursi a la conversación.
-Yapuedo morir en paz- dije con un suspiro.
-Tufamilia estará en las mejores manos- prometió.
La doc hizo ademan de que miraría que resultados le arrojaría el laboratorio y se fue a hacer sus cosas.
Yo me quedé pensando en mi familia en como tomarían la noticia, si alguien les dice que he fallecido, me quede metido en esos pensamientos.
La doc me dijo que estaba bien lo que estaba alta era el sodio, que tenia que tener más cuidado con la cantidad de sal que comía pero eso estaba fuera de mi control, como ya nos habíamos puesto de acuerdo en todo, llamó a los guardias y me devolvieron a la celda.
Al llegar a la celda me acosté de nuevo, pensando en lo que venia supe que la cuenta regresiva había iniciado de nuevo y faltaba una semana para la próxima ruleta.
Semana que pasé en la misma rutina, de tratar de hablar con las personas de alrededor pero todos estaban muy estresados con razones de sobra ya estabamos en las finales y en este juego no había espacio para estrategias soló rezarle a lo que cada uno crea que lo pueda salvar.Un día entre los tantos me informaron que como era de los 5 "finalistas" tenía derecho a pedir algo que estuviera dentro de nuestras limitaciones, me tomé un tiempo para pensarlo, no había nada aparte de salvar mi vida, libertad o salvar a mi familia que yo quisiera mas en este mundo el resto de cosas me parecían superfluas en ese momento, entonces le dije a la señora que cuando me trajera "la cena" le diría que quería, entonces ella me dejó sólo.
Decidítomar una ducha en el improvisado baño, al salir me senté envuelto en una toalla, tome el pequeño espejo que me habían dado y me miré, me encontré totalmente desfigurado casi no me reconocí, con los ojos hundidos, ojeroso una maraña de pelo negro indomable, una barba poblada igualmente oscura con uno que otro pelo cano, una mirada sin esperanza y las facciones mas afiladas que de costumbre.
-Realmente solo me hace falta el gorro peludo y el abrigo de piel para parecerme al tal Ivan el terrible- dije como intentando bromear.
Realmente me parecía al retrato del "Zar" que había visto en la escuela, en otro momento esa había sido una broma graciosisima pero no había nadie allí para escucharla, estaba sólo realmente sólo.Cuando miré dentro de mi también me encontré destrozado, era otra persona, mas sentimental, me sentí tan sensible por todo lo que había pasado que desee en lo mas profundo de mí poder salvar aunque fuera a una persona así el costo fuera mi propia vida y de repente de mis ojos como si fuera un manantial surgieron las lágrimas, lloré en silencio solo traicionado por mi agitada respiración, lloré por mi egoísmo porque muchas personas me habían querido e incluso aceptado con mis defectos y yo ciego me sentí merecedor innato de su cariño, olvidándome de devolverlo, durante varios minutos solo lloraba y entre largos suspiros desee también una oportunidad en esta vida o en la otra para retribuir el amor que me habían dado.
Mis ojos llenos de lágrimas se hicieron pesados, solo me dejé caer, me acomodé de lado en la cama y por primera vez en semanas, descanse.
El plácido sueño fue interrumpido por la apertura de la celda, entró la señora encargada de traer la comida, le dije entredormido que dejara la comida y saliera pero ella insistió en que tenía que decirle que quería para conseguirlo, muy a mi pesar tuve que incorporarme, me senté en la cama, con todo lo de la llorada no pensé en que iba pedir, recordando mi asqueroso reflejo pedí algo sencillo una maquina de afeitar eléctrica que me permitiera cortarme el cabello y la barba.
La señora se encogió de hombros y simplemente se fue. Al quedar sólo nuevamente, me puse calzones además una camiseta y me dispuse a cenar. Comí lo que pude de lo que habían traído y soló espere que el sopor me venciera de nuevo.
Tuve que esperar 2 días para que me trajeran mi "regalo" el tiempo lo invertí prácticamente en escribir, fantasear en el papel sobre mi hijo, de como sería y esas cosas así rogando a Dios que fuera sano, no como su "padre" ese tipo de cosas me daban esperanza.
Cuando al fin me trajeron la maquina era todo un set completo que sería la envidia de un barbero profesional, lastima que yo no sabia usarlo adecuadamente, leí el manual y me decidí a usar la cuchilla que me dejara el cabello bastante corto. Con mucha paciencia me di a la tarea de quitarme todo ese pelo de encima, me arreglé la barba pero no me la quite, quería disfrutarla irónicamente desde que era adolescente y luego que me convertí en mayor de edad no me salió nunca un buen bigote ni una buena barba, a diferencia de mi padre que se veia muy varonil con su bigote espeso y barba poblada, mi pobre viejo nunca tuvo el placer de enseñar a su hijo a afeitarse, es que no había nada que afeitar a excepción de 3 pelos rebeldes en el mentón que desaparecían con facilidad a un solo paso del rastrillo, mi padre no pudo y yo tampoco podre enseñarle al mío...
Los días pasaron, de pronto ya estaba otra vez frente a la puerta del salón de la ruleta, esposado y con el guardia a mi lado, al dejarme con mis compañeros supe que esa vez seria distinto eramos pocos lo que aumentaba las posibilidades, todos estaban taciturnos, meditabundos, en un silencio de hielo que duró hasta que encendieron las luces.
La"ceremonia" más teatral que nunca el narrador le imprimió una especie de solemnidad a esa final, habían cambiado la mesa por una mas pequeña y el narrador dijo lo que ya sabía habían aumentado el número de venenos, animo a los espectadores a apostar porque esa podría ser la última noche, los ánimos se crisparon y casi a rastras nos llevaron a la mesa, uno de los guardias disparó al suelo, el disparo reboto en el piso y fue a incrustarse al vidrio que protegía a los "espectadores" causando el pánico en ellos y hasta en el narrador.
Hizo falta un tiempo para que todo se calmara, apuntando a nuestras sienes nos obligaron a sentarnos en la mesa, en cuanto al público, supongo que pudo más el morbo y los palcos volvieron a llenarse. La primera ronda empezó fue realmente tensa, cuando el narrador dio la orden de tomar de los vasitos frente a nosotros nadie quiso hacerlo, de nuevo a base de amenazas, los 5 al unísono respiramos profundo y bebimos.
Se hizo un silencio sepulcral, permanecí con los ojos cerrados, el claro sonido de una arcada y la algarabía del público, abrí los ojos a la triste realidad alguien había muerto de nuevo...Su cara se había puesto pálida, las venas del cuello se notaban ennegrecidas y los minúsculos vasos sanguíneos del rostro también, había quedado con la lengua fuera fue muy triste. Cada vez que eso pasaba me sentía responsable, el público como era de esperarse rompió en una histeria y solicitó más muerte.
Los maldije en lo más profundo de mi ser, luego que se llevaron el cuerpo se reanudo el "juego", otra ronda comenzaba y me hundía en un desasosiego terrible.
Cambiamos de lugar, la orden de tomar fue dada y todos supongo aceptamos que nuestra suerte estaba echada, por consiguiente bebimos inmediatamente, nuevo silencio que se prolongo por unos minutos: Ronda desierta.
Desconcertados tuvimos que volver a cambiar de lugar, en el fondo quería salir rápido de eso, una ronda más extendía la tortura.
La orden de nuevo y volvimos a beber pero esta vez, se sintió diferentes para mí, una vez la bebida entró en mi boca estaba tibia, sentí que mientras bajaba por el por el esófago al estomago aumentaba la temperatura, cuando llegó a este, como si estuviera sentado en un horno en un momento sentí un dolor fuertisimo mis músculos se tensionaron dejándome paralizado, tenía una imperiosa necesidad de vomitar y de respirar pero no pude la única respuesta fue un sabor a sangre que corrió por mi boca, de pronto todo ceso y no sentí nada absolutamente nada solo me fui de bruces contra la mesa y todo se nubló.
Pero aún podía escucharlos, la familiar algarabía y los gritos, podía sentir pero no podía moverme por mas que lo intente, solo sentí el movimiento brusco, el cambio de temperatura y un golpe seco con algo metálico debajo de mi, algo rozo mi rostro.
Fue lo ultimo que sentí.
Eljuego había terminado.
Apartándome de toda la idiosincrasia teista en la que fui criado, como humanista siempre di más importancia a la vida que a la muerte, ya que estuvo rondandome toda mi escasa vida. Siempre pensé que la muerte era un sueño de paz y descanso del interminable sufrir que representa estar vivo, más que el "paso" a otras realidades o estados como el cielo o el infierno pero mientras estuve "dormido" no obtuve un gramo de esa paz tan deseada, me sentí aprisionado en la oscuridad.El problema era que no pasaba nada de nada y la añoranza de lo que había dejado inconcluso me hacía imposible disfrutar el estar en la apacible libertad que ofrece el no estar vivo.No había dias, ni noches, horas ni minutos no habia nada absolutamente nada, pero mis pensamientos seguían allí, de nuevo estaba prisionero pero esta vez no habían guardianes, ni captores sólo yo y una interminable incertidumbre.Sólo eso es lo que puedo decir de ese estado, de una manera abrupta, empecé a sentir d
Fue difícil hacerme a la idea que no podía volver a contactar a mi familia, pero apenas tuve tiempo para autocompadecerme.Seguí un arduo proceso de recuperación de motricidad y terapia post-traumatica.Después de eso, comencé a trabajar oficialmente para la "organización", la llamaré así de ahora en adelante porque en realidad, no me suministraron un nombre específico y es lo mejor, según la doc.Ya que, no trabajamos para nadie en particular, ni algún gobierno. Solamente es una cooperación entre distintos profesionales de diferentes ramas que se encargan de tratar de hacer del mundo un lugar menos malo.Me relajo un poco saber estas cosas, aunque no tuve mucho tiempo para tranquilizarme pues la doc no me lo permitió, una vez pude caminar y valerme por mi mismo, en lo que más podía. Vino el verdadero desafío.La preparación física, ya que para poder enfrentar situaciones de mi nuevo "trabajo" debía ser una persona con una buena condición f
El tiempo pasó, sin darme cuenta, de manera que establecí una rutina. Estuve camuflado detrás de la fachada de un instalador de cable e internet, me consagre en tratar de combatir ciberdelitos.Sin poder encontrar la misión que me permitiese, quedar a paz y salvo de mi deuda con la "organización". No es que no hubiera hecho nada por salvar vidas pero no estaba implícito en mis funciones. Me había dedicado a intervenir en estafas por medio de la red, detectar y atacar grupos donde se comparte contenido relacionado con menores de edad pero no había hecho nada especialmente bueno.Hasta que empezaron a surgir rumores en la web de una epidemia peligrosa que posiblemente podía convertirse en pandemia, aunque no estaba confirmado por ningún medio tradicional.Las cosas empezaron a ponerse feas, pues se difundieron cientos de Fake News,cadenas en redes sociales que empezaron a causar pánico entre las personas del común para
Fue traumático, había perdido a la Doc. Las horas que siguieron fueron muy difíciles, habían tantas variables sobre lo que le podría haberle sucedido, me carcomía la mente, pensar en que le hicieran algún daño. Pero lo pensé detenidamente, llegué a la conclusión de que alguien con su sagacidad mental y física. Difícilmente podía verse en aprietos ante tal situación.No demoramos en tener noticias suyas, pues terminó siendo cómo creíamos. La Doc apareció en una de las cámaras, atendiendo a un anciano, yo la reconocí inmediatamente pero tenía que esperar la confirmación de la IA de reconocimiento facial pues tenía cubrebocas, no hizo ninguna señal que pudiese levantar sospechas, se limitó a mirar la cámara y volver a su quehacer.Sentí una mezcla muy extraña entre alegría por encontrar a la Doc, pero también sentí tensión por lo que pudiera suceder de ahí en adelante. Mi presentimiento no falló, al parecer estaban esperando el personal médico y terminaron abriendo el foro de la págin
Alexandr Serebryakov Martínez llamado "Iván el terrible" es un adicto a las apuestas, lo hacia sobre todo por lo que pudiera generar riesgo de ganar o perder pero no siempre era legal en lo que apostaba, una vez perdió con las personas equivocadas.Podía perderlo todo, su casa, familia e incluso la vida, en esa situación terminó entregándose a si mismo para saldar la deuda.Lo involucraron en una red clandestina de apuestas, una ruleta de la muerte con veneno, lo que siempre consideró una gran debilidad, era alérgico a muchas sustancias que era normal consumir para casi todas las personas pero en cambio lo hizo invulnerable a venenos que matarían a cualquier ser humano en segundos, a él le producían malestares menores.Tomó mucha fama e hizo ganar mucho dinero a quiénes lo tenían en cautiverio, pero como si
En este estado se puede pensar mucho, ser "Iván el terrible" no es fácil, bueno no me llamo así ese es mi apodo de apostador.Pero ya que tengo tiempo para analizar mi situación, caigo en cuenta que la casualidad no existe, la repetición de un acto trae consecuencias, pero eso no lo sabía hace un tiempo.Mi nombre es Alexandr Serebryakov Martínez, mitad ruso por mi padre y mitad mexicano por parte de mi madre, tengo un acento molesto, cualquiera que me ve y me oye hablar piensa que soy ruso de verdad, pero no sé nada de ruso con excepción de las groserías que aprendí por medio de mi papá cuyo origen sí está en la lejana Rusia.Mi padre salió de allí en el contenedor de un barco con destino a América lleno de inmigrantes con sueños, de los que sólo quedaron 3 abandonados en las costas de México, él era un tipo rudo pero no sabía español y estaba quebrado pero era muy ingenioso. Se hizo amigo de un compatriota suyo que si sabía español, quien consiguió trabajo para ambos en el puerto com
Hemos llegado.Por venir pensando todo el camino, no presté atención hacía donde íbamos, presiento que estamos bastante lejos de la ciudad.Siento que alguien me toma del brazo y me obliga a bajar de la camioneta, aún tengo la capucha negra en la cabeza, esto no pinta nada bien, le debo mucho dinero a este hombre, me huele a que me matará, tal vez no la cuente.Escucho el mujir de unas vacas, ¡madre mía! estamos en un descampado, no puedo dejar de sudar por los nervios y también por el horrible calor.-Si me van a matar, haganlo de un balazo pero haganlo ya, no me maten del cansancio o de una insolación - me atrevo a decir en tono de sarcasmo.-Ya quisieras preciosidad pero todavía no me pagas lo que me debes, estaremos juntos mucho tiempo todavía- dice alguien.Reconocí la voz de Her
Han pasado varios días desde que esas personas murieron, estuve bastante triste, llegué a no comer, ni tomar agua por una semana.La vieja piruja que traía la comida se la llevaba de igual manera, no la tocaba para nada, no le dirigia la palabra.Ignoré las nuevas voces en las paredes no valía la pena esforzarse en conocer a nadie.Decidí no ser parte de ese juego macabro preferí morir antes, la inanición es una forma difícil de morir, sentía el crujir de mi estomago, nauseas, dolores de cabeza, articulaciones y en los costados. Según lo que habia aprendido en uno de esos programas de supervivencia gringos estaba en las últimas etapas de la deshidratacion, hasta me chillaba la cabeza, mi cuerpo intentaba a toda cosa sostenerse por sí mismo pero yo no tenía grasa ni azucares que ofrecerle.Una vez aluciné con que me habian liberado y regresaba con mi familia, fue tan real que mi desilusión al darme cuenta que no era verdad, incrementó mis ga