Gary se acercó a Michael donde estaba acostado en el sofá, negó con la cabeza suavemente. Su jefe estaba ahí esperando que volviera a casa a pesar de que él tenía mucha hambre y ella estaba ocupada cenando con una gran celebridad en un restaurante muy caro, sentía que Sasha también se estaba vengando un poco. Sabía que Michael la lastimó el año pasado, pero Michael nunca había salido a almorzar o cenar con ninguna mujer durante todo el año, excepto la noche en que fue a conocer a Amanda y eso se debió a que una vez fueron socios comerciales y él quería que las cosas fueran bien entre ellos.
—¿Jefe?— Michael abrió los ojos y lo miró, se veía tan cansado y hambriento. —¿has averiguado dónde está?—Sí jefe. Actualmente está cenando en Mackintosh— el corazón de Michael se rompió en mil pedazos pero se controló. —¿Con quién?— estaba preparado para escuchar el único nombre que no quería pero no puede escapar.—Con Derek Holmes— miró a Gary de inmediato, esSasha se despertó al día siguiente con dolor de cabeza, se presionó la mano en la sien y se bajó de la cama, revisó su teléfono y se sorprendió cuando vio la hora, eran las 2:15 pm, se miró a sí misma para notar que todavía estaba usando su ropa de ayer. Bajó las escaleras mientras bostezaba y se frotaba la sien para minimizar el dolor de cabeza.—¿Por qué bebí tanto anoche?— se preguntó y luego recordó —¡Dios mío! ¿Cómo llegué aquí? ¿Pagué la cuenta anoche?— corrió escaleras arriba inmediatamente por su teléfono y llamó al restaurante —hola, soy Sasha Brown. Lamento lo de anoche.—¿Qué pasó señora?— preguntó la recepcionista.—Es posible que me haya emborrachado demasiado y me olvidé de pagar las facturas. Así que si me pueden enviar la factura y los detalles de la cuenta del restaurante, la transferiré de inmediato...—No tiene que preocuparse señora— interrumpió la joven —ayer vino su marido y se hizo cargo de las facturas, él fue el que la llevó a casa.
Sasha descansa en su silla de cuero mientras pensaba en la conversación con Michael anoche. No podía creer que hablaran con tanta libertad y, por una vez en su matrimonio, él accedió a algo que ella dijo sin ignorarla o fingir que no la escuchaba. Su corazón se aceleró con solo pensar en la sonrisa que le dio ayer como respuesta. ¿Podría Janet tener razón? ¿Ha estado queriendo recuperarla todo este tiempo pero ella estaba demasiado ciega para verlo? ¿Había perdido dos meses de su tiempo con él en una venganza sin fin? Si es así, ¿no era ella la mujer más estúpida del mundo?Pero, para no aferrarse al pasado, hizo las cosas bien anoche, ¿no? ¡Por Dios, Michael se comió la comida que ella cocinó! Su sonrisa se ensanchó cuando recordó cómo se terminó la comida que ella puso en su plato. ¡Se lo comió todo! Y no dejó ni un poco. Se sentía como una colegiala recién enamorada, su corazón rehuía la luz que no había experimentado en mucho tiempo y se encontró deseando que el d
Michael llegó a casa por la noche y se dio cuenta de que Sasha aún no había regresado. Se sorprendió y pensó en llamarla, pero decidió darle un poco más de tiempo.—Pensé que nos encontraríamos en la casa como anoche. Debo admitir que la cena de anoche fue increíble—felicitó Gary y Michael lo miró.—Em, yo… em…Quiero decir, señor...—No estoy ofendido— lo interrumpió Michael.—Oh, eso es bueno entonces. Supongo— Michael sonrió.—Debo decir que estoy de acuerdo contigo. La cena de anoche fue increíble y tenía muchas ganas de experimentarla esta noche de nuevo, pero supongo que la han retenido en la oficina.—¿Debo averiguar jefe?—No, solo dale un poco más de tiempo. Voy a ir a refrescarme— con eso, se levantó de la silla de ruedas y la llevó arriba mientras Gary lo miraba con una sonrisa, el jefe se reconcilió con la amante anoche y él ha cambiado mucho y estaba más conversador hoy que nunca. Bueno, él siempre ha sabido que la amante es la clave de l
Michael no pudo evitar reírse entre dientes y la chica se sintió avergonzada, ahora su enamorado se estaba riendo de ella y no culpaba a nadie más que a Sasha, creía que era culpa suya. Entonces se fue con la mente de vengarse de Sasha de una forma u otra.—Bueno, ¿qué sucedió?—, Comentó Gary cuando la chica se fue y Sasha se rio entre dientes junto con Michael.—Algunas chicas simplemente ya no respetan a las parejas casadas. Sabe que Michael está casado y que yo soy la esposa y, sin embargo, se atrevió a soñar con él en mi presencia. ¿No es una falta de respeto?—Lo es— acordó Michael y Sasha lo fulminó con la mirada mientras Gary le miraba.—¿No eres tú la causa?— Michael se sintió avergonzado y miró su menú para ocultar su rostro de la vista de ellos, especialmente el de Sasha.Su cena se sirvió poco después y disfrutaron de la comida. Charlaron muy poco pero la alegría estaba ahí mientras esperaban el postre que trajo la joven camarera poco después. Mientras los
Pasaron los días con las cosas mejorando cada vez más con Sasha y Michael, sin más ignorarse el uno al otro y eran más como una pareja casada que como extraños y ambos deseaban que nunca terminara. Vanessa se sorprendió y se sintió feliz cuando habló con Sasha y se enteró de cómo les iban las cosas, no lo vio venir y su alegría era inexplicable al escuchar todas las historias de Sasha. Janet y las chicas también estaban felices, todas creían que Sasha se merecía la oportunidad de ser feliz y con el hombre de sus sueños.Sasha bajó corriendo las escaleras detrás de Michael, lo alcanzó mientras subía al auto.—Oye, me preguntaba si puedes volver un poco más temprano hoy— Michael la miró cuando se sentó dentro del auto y Gary tomó su silla de ruedas para ponerla dentro del maletero del auto.—¿Hay alguna razón para eso?—Sí, quiero que vayamos a dar un paseo por la noche y luego comamos antes de regresar. ¿Qué tal eso?—Está bien— respondió y Sasha sonr
Después de su ducha, ambos fueron a la cocina a preparar el desayuno. Sasha siempre había soñado con cocinar junto a él, pero lo que no esperaba era la habilidad culinaria de Michael, le cortó las verduras con una excelente habilidad maestra que la dejó asombrada. El al ver su mirada de sorpresa, se rio entre dientes.—A mi abuela le encantaba cocinar y se aseguró de llevarme a la cocina con ella. No importaba lo poco que estuviera, nunca me dejaba marcharme y, gracias a ella, soy bueno en La cocina.—¡De ninguna manera!—¡Sí!—¿Cómo es que nunca antes has cocinado nada?— Michael sonrió levemente.—Cuando uno no está feliz, tiende a olvidar muchas cosas que le encantaba hacer. En cuanto a mí, desde que murió la abuela, no me gustaba acercarme a la cocina, pero de vez en cuando lo hago como una forma de recuerdo de todas las cosas que ella me enseñó— sonrió ante un recuerdo lejano.—Desearía haber llego a conocerla.—Créeme, la amarías más que a mi madre. C
Michael la miró y recordó ese día, ella se había ido a la playa con sus padres y él la había visto de lejos como corría en su traje de baño blanco, una sonrisa adornaba sus labios pero rechazaba el pensamiento.—Entonces mi turno, ¿Verdad o reto?—¿Qué tal reto?—Bien, te reto a que te quites la ropa y te quedes en ropa interior y te quedes afuera durante veinte segundos.—Espera, no tomaste las bebidas por perder tu desafío— acusó ella.—Bien— Michael tomó el tequila y se sirvió el primer vaso que terminó de una vez, así como el segundo y el tercero—ahora, tu desafío— Sasha sonrió e inmediatamente comenzó a desvestirse, Michael se sorprendió, no esperaba que ella aceptara el desafío. Después de desvestirse, caminó hacia afuera y comenzó a contar los segundos mientras el hombre de adentro acariciaba su cuerpo con los ojos, su cuerpo se veía mucho mejor de lo que recordaba y realmente quería tocarla. Los segundos pasaron en poco tiempo y Sasha volvió a entrar, se
Una semana después, Sasha salió de la sala de conferencias con Janet, Agnes, Agatha y Marilyn. Todos la estaban molestando para que contara cómo era su vida con Michael. Toda la presión ha sido por el hecho de que ayer Michael la recogió del trabajo y por la sonrisa constante que siempre había en su rostro. La siguieron a su oficina y se apiñaron alrededor de su escritorio mientras Sasha se sentaba, sonriendo mientras miraba sus caras una tras otra.—¿Qué quieren las chicas?—El jugo caliente, échalo niña— instó Agatha y el resto asintió.—La vida está siendo buena honestamente— sonrió mientras tomaba su teléfono, vio la hora e inmediatamente se puso de pie —chicas, lo siento, continuaremos esta conversación en otro momento, tengo que irme ahora.—¿A dónde?— preguntó Janet.—Escuché hablar a Michael y Gary hoy. Michael irá a rehabilitación para ver a su médico y quiero sorprenderlo presentándome, me he perdido muchas de sus sesiones, pero ya no quiero hacerlo. D